HIJO DE CAÍN ( GAY )

LA MARCA DE CAÍN

Me levanto del suelo, sin quitar la mirada de mi adversario, doy una mirada a los demás, Rafael, lucha contra dos arcángeles caídos, miguel mantiene a raya a algunos que intentan acercarse a Caín quien cuida de Joe, Gabriel lucha contra Hauras general de los ejércitos demoniacos, trato de ir hacia él pues parece no pasarla bien pero una lanza se clava a sentimenteros de mi ¿Cómo poder ayudarlo si yo no estoy en mejores condiciones, mi mirada recae de nuevo sobre Astarot quien me mira y sonríe, este no es nuestro espacio, es obvio que ellos aquí tiene la ventaja, no estamos en un lugar que sea fácil de manejar, además de luchar contra ellos debemos luchar por no contaminarnos y terminar siendo uno de ellos, antes lo ponía en duda pero ahora reconozco que Lucifer se trajo consigo a grandes y eficientes secuaces, muevo mi cabello para que no estorbe mi visibilidad.

— Un pajarito me dijo que usaste mi corona— dice con otra lanza en sus manos— dime ¿Cómo es que tienes tal pureza si pagaste el precio de usar un instrumento demoniaco?— pregunta jugando con una maldita serpiente que parece tener voluntad propia a la hora de atacar.

— No fue la gran cosa— respondo con altivez— la verdad me decepcione al usarla— bloqueo el ataque de su lanza.

Parece quien hablar de esa manera lo molesta, ruedo por el suelo esquivando tanto sus ataques como los de sus mascota, me distraigo al ver que Caín hace algo con Joe, mi intención era sacarlo de aquí lo antes posible pero me ha sido imposible hacerlo, suelto una exclamación de dolor cuando la lanza del duque del infierno se clava en mi hombro.

— Un bibliotecario como tú, sabio debería saber que no podemos distraernos mientras luchamos— dice haciendo más precio— acabalo— habla con la serpiente que se lanza hacia mí, despliego mis alas para escapar pero aun así no lo logro, quedo pasmado al ver caer la cabeza del animal a mi lado.

— Lo siento— miro a la persona que habla.

— Zard— digo viendo al mulato completamente bien y con un aura pura y fuerte.

— Levantarte Ariel— ordena sin quitar sus ojos del duque infernal.

— No podemos hacerles gran daño por estar en sus dominios, es difícil controlarlos— digo ya de pie.

— Ariel deberías rendirte, sabes que mi surgir está cerca— mi mirada cae sobre el ser en el tono— solo mira a tus compañeros, unos heridos, a cada segundo se contaminan más, incluso tú, uno de los más cercanos a mi padre empiezas a contaminarte — dice Lucifer.

— Ya te lo dije luz bella, si has de surgir lo harás a su tiempo— respondo viendo sus ojos.

— Trata de sacar a joe de aquí — dice Zard parándose frente a mí— yo me encargo de este— dice viendo a Astarot.

Asiento y me retoro, me acerco Caín quien solo observa el rostro de su hijo casi inconsciente ¿es un hibrido por que no puede adaptarse a este lugar? Me pregunto al darme cuenta de lo cerca que esta de la muerte, su aura es muy de...bil, su aura no ha despertado, aparto al castaño del rubio tomándolo en mis brazos, nos cubro a ambos con mis alas, despierta susurro esa palabra en el momento que nuestros labios se rosa, uno nuestros labios brindando una inyección de mi aura para que la suya despierte, se supone que lo haces por salvarlo ¿Por qué cierras los ojos Ariel? ¿Por qué disfrutas del contacto? ¿Por qué mi estómago se contrae y no deseo separarme de sus belfos jamás? ¿Por qué cuando siento su aura despertar no puedo apartarme? ¿Es esto lo que se le llama placer? Siento su mano acariciar mi mejilla, mis ojos se abren para encontrarme con su mirada avellana vivaz y fuerte sobre mí, sus labios moviéndose al compás de los míos, negándonos a separarnos.