¿Asano tiene una hermana? (Karma × TN) [Editando]

Capítulo 5: ¡No me dejes!

POV. Normal

Había pasado casi ya una semana desde que la hermosa modelo de cabellos rubios había llegado a casa, y al cumplirse el plazo de sus vacaciones debía regresar a trabajar abandonando nuevamente a su pequeña hija en esa oscura y enorme mansión casi en penumbras donde parecía que el tiempo no avanzaba con el paso de los años, como si hubiera quedado congelado y estático ante todo. Conservando aún en la chimenea pequeñas flores disecadas y dibujos hechos en crayola que estaban ahí desde hace unos 13 años aproximadamente. En un perchero aún colgaba un saco negro recuerdo de la noche de bodas de los dos adultos que hace un tiempo habían abandonado el lugar solo regresando repentinamente para ver a su hija o para regañarla, respectivamente y como se diera el caso.

Mientras Misaki ordenaba las maletas llenas de ropa y joyería así como de unas cuantas fotos de su familia, su hija, _____ la veía con un rostro entre preocupado y asustado desde el pequeño sofá cerca de la ventana. Desde hace ya unos minutos había suspendido su lectura sobre química para observar atentamente cada movimiento que su madre hacía, así solo fuera mover un dedo, para la chica era un misterio. La admiración que siempre tuvo a su madre era todo menos un secreto por la cara atenta que siempre le propició a cada leve movimiento y palabra de la dama.

-¿Por qué me ves tan atentamente? No es como si estuviera desactivando una bomba como para que tengas que poner atención a todo, solo estoy empacando mis maletas.

-¡Es por eso! Mamá otra vez te vas a ir y yo no he pasado más que una semana y media contigo. No lo entiendo bien, llegas y te vas casi tan rápido como entraste al igual que mi padre cada que viene de visita para dejar dinero o llenar la despensa para que no me muera de hambre- reclamó la chica mientras cruzaba los brazos y volteaba a ver la ventana por la que solo podía observar a varios adolescentes y niños paseando por las calles.

-No te enojes, tu sabes que el trabajo de una modelo es difícil. No solo es sacrificar mi tiempo y comidas que me encantaría probar, también debo sacrificar tiempo que podría pasar con mi familia para poder trabajar.

-¿Entonces porque escogiste ese trabajo? Mi papá también escogió uno en el que a mí hermano y a mí nos hace caso nulo y a ti casi nunca te vemos, nos sorprende más tu presencia que un terremoto o un tsunami. Tu y papá siempre han estado aislados así que si se llegan a divorciar no me sorprendería.

-¡_____! Deja de hablar ese modo, trata de comprender un poco que nosotros debemos cargar con todas las responsabilidades de la casa y de tener una familia

-Nadie los mandó a tener hijos ni a casarse, ustedes quisieron y ahora se aguantan

-Mira, si quisimos tenerte a ti y a tu hermano fue para tener una representación física y con vida del amor que hubo alguna vez entre tú padre y yo, nosotros quisimos personificar ese amor en una vida y amarla lo doble de lo que nos amábamos entre los dos.

-¡Pues se nota que se amaban a montones! Tanto así que mi pobre hermano tiene más figura paterna en el señor que vende café en la estación que a mí padre. Mamá, tan sólo quédate un poco más de tiempo conmigo, prometo que no haré nada malo y que me portaré bien, no me meteré en peleas pero porfavor quédate un día más- la joven solamente se acercó a su madre y le dio un abrazo mientras temblaba de rabia y de impotencia al no poder hacer nada para evitar que se fuera. Por más palabras bonitas que dijera y por más promesas que hiciera ella sabía perfectamente que su madre se debía ir, posiblemente en unas horas o en unos minutos. Nunca le específico el horario, solo sabía que era ese día en el que volvería a sentir ese vacío de figura materna combinado con la inestable figura paterna que Gakuhō le brindaba.

-Dejame explicarte eso, los que pasa es que—

-¿Qué pasa? Yo sé que pasa ¡Ustedes dos se olvidaron por completo de la existencia de sus dos hijos y solo existe el trabajo! Mamá, solo te pido que estés acá cinco días más ¿Que te cuesta? ¿Es más importante el trabajo que tus hijos? ¡Odio a los adultos, no tienen tiempo para nada! Dices que te comprenda por ser adulta y que algún día yo viviré eso ¡Pero tú alguna vez tuviste mi edad y no me entiendes!