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a day alone, what can go wrong?

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Menudo golpe se había dado. Definitivamente, no era buena idea subir las escaleras corriendo. Recorrió el trecho que quedaba hasta su habitación y al llegar, tocó la puerta.

-¿Freeddy? ¿Estás despierto?
Al no oír contestación alguna, Billy entró con cuidado y cerró la puerta, tratando de hacer el menor ruido posible.

En la litera de abajo, Freeddy dormía como un bebé. La manta le tapaba hasta el cuello y algunos rizos rodeaban su cara mientras respiraba suave y rítmicamente.

Parado en la puerta del cuarto, Billy no resistió la tentación. Sacó el móvil, desactivó el flash y le hizo una foto.

Mientras tanto, el menor se revolvió en sueños y murmuró un par de cosas que Billy no escuchó.

Tras un rato contemplando a su "hermano" dormir plácidamente y sin pesadillas (no como durante la noche), decidió bajar a hacer el desayuno. Tenía bastante hambre y era más que probable que cuando Freddy se despertara también la tuviera.

Bajó las escaleras tan rápido cómo las había subido y llegó en seguida a la puerta de la cocina. Vale, sabía hacer tostadas. Seguro que sobrevivía.

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¿Cómo era posible que se le quemaran 10 tostadas? Tenía que tener mala suerte. Además, se había quedado sin pan. Justo cuando estaba a punto de romper su hucha de cerdito para salir a comprar más pan, (ya no para hacer tostadas, sino para reponer el que había gastado) recordó que su madre tenía una reserva en el congelador.

Raudo y veloz, se dirigió a la despensa y lo abrió. Localizó la bolsa del pan y la sacó. Y justo cuando estaba a punto de bailar para celebrarlo, se dio cuenta de que estaba vacía. En su interior solo había una nota y un par de dólares.

"Lo siento, usé el pan para un bocata de media noche. Tenía hambre y no necesito ninguna otra excusa.
Mary"

Sí, eso parecía algo que Mary haría. Se guardó los dos dólares en el bolsillo. Ya no tendría que romper a Harry, su estimado cerdo. Le había cogido cariño. Rebuscó en el congelador y encontró un paquete de gofres congelados. Parece que ni siquiera tendría que salir. ¿Quién no sabe hacer unos gofres? Solo hay que calentarlos.

Oficialmente, Billy Batson no sabe hacer gofres. Tiró los restos carbonizados de lo que alguna vez fue un dulce desayuno y salió a comprar algo a la tienda de la esquina.

Volvió unos cinco minutos más tarde, con batidos de chocolate, magdalenas y churros que le había dado una amable señora por ayudarla cuando le robaban el bolso.

Ya eran las 9:30, por lo que decidió subir y despertar a Freeddy. Abrió la puerta de su habitación y vio a su crush escribiendo muy concentrado en una pequeña libreta.

Tosió de forma falsa y ruidosa  para llamar su atención, y el resultado fue espectacular. Freddy dio un respingo y guardó la libreta debajo de su almohada en menos de 3 segundos. Ni que fuera Flash.

Tratando de aparentar normalidad, Freeddy de dirigió a Billy.

-¿Está ya el desayuno? Tengo mucha hambre.

-Ya está listo. Me alegra que tengas hambre, tenemos hasta churros. Y por cierto ¿qué es esa libreta?

Freddy volvió a dar un respingo. Estaba seguro de que a Billy no le había dado tiempo de verla bien. ¡Joder, si había estado ensayando!

-Eso era... Una alucinación provocada por los vapores tóxicos del colchón.- dijo con voz mística, mientras movía las manos en círculos- Nada ha sucedido aquí Billy Batson.

-No me lo trago. Pero si no me lo quieres decir, está bien. Te respeto. Cómo persona, cómo hermano, como amigo. Ni voy a tocar esa "alucinación.

Freddy suspiró aliviado. Billy sí que era una persona honesta y que sabía respetar la privacidad de los demás. No como otr@s. Ejem Mary, ejem.

Mientras el menor se levantaba, cogía sus muletas y le hacía salir de la habitación, Billy solo tenía una cosa en mente."¿Cómo puedo cotillear el cuaderno de Freeddy sin que se de cuenta?"

Ambos estaban en la cocina comiendo un par de minutos después.

-¿Fomo difes que fas confeguido los chufos?- preguntó Freeddy con la boca llena.- Eftan muy buenof.*

Billy estuvo muy tentador de hacerle una foto. Pero mantuvo la calma y comenzó a explicar el asalto y la paliza posterior. Los maleantes deberían aprender a dejar en paz a las abuelitas.

-A efte pafo, me imagino a laf abuelaf creanfo una flapaforma: Ancianaf for Shazam. Fería fantaftico*.

-La ferdad ef que fi.*

Definitivamente, esos eran los mejores churros que ambos habían probado en mucho tiempo.

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-¿Qué hacemos ahora?

-Tú, tienes que tormarte el antibiótico, y mientras tanto yo voy a poner una película. Y después te irás a dormir otro rato. Mientras tanto yo haré la comida. Y no quiero quejas ni reproches ¿Entendido jovencito?

"Oh, joder. Parezco una abuela. Me falta cogerle la cara y apretarle las mejillas como si fuera un peluchito. Ahora que lo pienso, podría hacerlo. Tiene los cachetes tan suaves."

-Que sí mamá, que sí.- Freeddy volvió a rodar los ojos. -Y vale. Pero tienes que bajarme la caja tú. El medicamento está en un estante alto y no llego.

Y era cierto. Por más que se estirara, Freeddy no conseguía alcanzar el bote, situado en uno de los lugares más altos de la cocina.

-No dejar al alcance de los niños, - leyó Billy en la etiqueta del antibiótico.- Creo que eso lo han cumplido.

-¡Ni que tú fueras una montaña Batson! Tampoco eres tan alto.

-Pues no, pero me conformo con ser más alto que tú.

Billy dejó el medicamento en la encimera y bajó su cabeza hasta la altura de Freeddy, ahora sentado en uno de los taburetes de la cocina.

-Aquí tienes tu medicina. Espero que no te quejes pequeñajo. No la escupas si sabe mal.

Y diciendo cada una de estas palabras, su rostro iba acercandose más al contrario, hasta que estuvieron tan cerca que simplemente con mover la cabeza, sus labios se rozarían.

*¿Cómo dices que has conseguido los churros? Están muy buenos.
-A este paso, me imagino a las abuelas creando una plataforma: Ancianas por Shazam. Sería fantástico*.

-La verdad es que si.*

Ese ha sido mi mejor intento de escribir a Billy y a Freeddy hablando con la boca llena de churros.

Así de interesante se queda esto. Espero que os vaya gustando. La verdad es que leer los comentarios que dejáis en cada capítulo me anima mucho. Os lo agradezco de verdad, ya que cuando empecé este proyecto no creía que fuera a gustar tanto.

Ahora tres cosas más.
Número 1:
Estoy pensado en hacer alguna otra historia de estos dos. Y tengo un par de tramas ya pensadas. Si os gusta la idea, pondría un pequeño resumen en el siguiente capítulo, para ver cuál publico primero.

Número 2:
No tengo planeado que este fic supere los 12 capítulos, así que la trama empezará a cerrarse pronto, aunque no descarto un epílogo.

Número 3:
Dentro de dos días, me voy de viaje a Londres. Estaré allí casi una semana, así que lo más probable es que no tenga mucho tiempo para escribir. De todas formas, intentaré subir algún capítulo antes de irme o mientras esté allí. Lamento cualquier molestia que os pueda causar, y gracias de nuevo por votar y comentar. Como ya he dicho, me alegrais el día chic@s.

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