Parte 14

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El comedor era un lugar muy grande donde habían muchas mesas para sentarse en grupos, plantas decorativas, cascadas de adorno y al final a lado izquierdo se encontraban donde preparaban los almuerzos, eran como los patios de comida rápida, sin embargo estos solo contenían comidas muy elaboras y variados platillos de comida tradicional, como era de esperarse aquellos tipos de comida se los debía costear uno mismo y como Anie tenía la suerte de pertenecer a una buena familia podía darse el lujo de comer allí. Ella había pedido kare raisu que es un arroz al curri, mientras que Sonjong pidió sukiyaki que es nave, carne, vegetales, hongos, tofu y shirataki... en verdad este hombre a pesar de ser tan delgado si come en serio, cuando tomo los palillos no pudo evitar mirarse el vendaje y de inmediato sintió un poco de calor en sus mejillas *qué te pasa Anie?, el hombre solo quiere molestarte y lo está consiguiendo, no hagas esto!* se reprendía mentalmente mientras Sonjong estaba pendiente de no dormirse pues tenía muchísimo sueño... no había dormido bien anoche ya que se había enterado de que su madre había estado un poco enferma... y la salud de su madre siempre fue delicada; ella notó que algo le preocupaba y directamente le pregunto "Sonjong está todo bien?", el realmente no quería que ella se percatara, más si aún estaba herida, se suponía que debía preocuparse por sí misma... sin embargo su mirada le decía que no se daría fácilmente vencida... así que simplemente le dijo "si, seguramente es que tengo un poco de sueño, es por un problema familiar"... ella recordó que en el libro había una parte en que contaban que la madre de Sonjong había caído enferma y que como era muy apegado a ella no podía evitar mostrarse un poco preocupado y varias personas lo habían notado, puesto que el siempre parecía estar feliz, pero extrañamente en ese tiempo estuvo muy decaído... *ese tiempo debe ser ahora* pensó ella... y se atrevió a preguntar nuevamente "es sobre tu madre?", de inmediato él la miro sorprendido *ella se había dado cuenta?!, pero cómo?*, ella al ver la reacción de él supo que había acertado y el viéndose acorralado no tuvo más opción que contarle, pero en verdad no quería que le tuviera lastima ni que ella cargara con un peso de preocupación que no le correspondía, por lo que intento contárselo lo más alegre que pudo, ella al saber que él era tan apegado sabía que a pesar que se lo contaba con esa cara en el fondo le dolía entonces Sonjong pensó *porque... porque me siento tan bien cuando le cuento algo tan importante a ella... han sido solo 2 días y ya confió tanto en esta chica?*, pensó que era ridículo, pero para su sorpresa ella le dio ánimos y le dijo "sabes, aunque nos conocemos hace poco puedes contar con migo, siempre te apoyaré y aunque no soy muy buena haciendo reír o con la etiqueta me gustaría ir  algún día a conocer a tu madre a ver si puedo hacerla reír... o por ultimo cocinarle algo... porque uno de mis fuertes es la cocina sabes?!", el no pudo evitar mirarla totalmente sorprendido *ella siempre había sido así?* en ese momento se arrepintió de no haberla conocido antes, ella era realmente linda como un cerezo en plena floración y realmente alegre como una luz en la oscuridad... era *increíble* pensó el, y riendo dijo "está bien, es una promesa le diré a mi madre que quieres visitarla", ella se alegró pues había podido hacer de nuevo alegre a Sonjong; pero justo en ese momento uno de los cabos primero se acercó a la mesa donde estaban y le dijo que el príncipe lo estaba esperando, el asintió, miro a Anie y le dijo a Anie "bueno si su majestad llama no tengo opción, fue un gusto almorzar con tigo Anie", ella le sonrió y él se fue.

la chica del cabello plateado destacaba mucho en aquel gran comedor y como era de esperarse muchas miradas se dirigieron allí... *tengo algo en la cara?* ya que que todos la miraban extraño, pero nadie se acercaba... al final terminó prácticamente comiendo sola, su mirada se fijó en la cocina y rápidamente fue allí, cuando la gente la vio no pudieron evitar sorprenderse y hacer reverencia pues sí, todos conocían lo que hablaban de ella y que era realmente cruel, pero la impresión de todos fue realmente lo contrario a eso "disculpen, podría pedirles un favor?", era como si fuera un ángel muy amable, por lo tanto no había nadie que se pudiera negar a su petición y así fue como consiguió los materias para hacer lo dulces, pidió que los llevaran a su habitación ya que ahí tenía una cocina totalmente equipada.

Así es porque para su sorpresa la ¨habitación¨ de los que tenían alto rango más parecía un tipo de suite donde había dormitorio, cocina, living y baño, uno podría perfectamente vivir ahí para siempre... *acaso no consienten mucho a los de alto rango...*, y si su habitación era así... *como será la habitación del príncipe Li?*, pues si ella supiera que en la habitación de él tenía una gran bañera, probablemente le hubiera recriminado de clasista y de príncipe consentido.

La villana JasmineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora