—Bienvenido a MI CONSULTORIO. Como verás, esta vez la SM no fue una desgraciada y me habilitó una sala especialmente para mis actividades como psicólogo, hasta tenemos gomitas mira.
—Me gustaba más la cocina...
—Me limpio el culo con tus palabras. Como sea, ¿En qué puedo ayudarte, querido?
—Todos los que vinieron aquí se fueron satisfechos, así que quise intentarlo.
—Te escucho.
—Sé que en China no usan honoríficos pero trátame con más respeto por favor. Como decía, a pesar de tener 24 años los miembros dicen que soy un anciano. Aunque les doy caramelos y les tejo con mis propias manos sus abrigos me tratan así, yo solo les estoy dando amor compresión y ternurA.—Dijo golpeando la mesa, sobándose después por el dolor.
—Créame que comprendo el sentimiento.
—¿De verdad?
—Por supuesto, cada vez que no puedo hacer algo Chenle dice que es por la edad.
—¿Y qué haces para que te respete?
—Le doy nalgadas en la cola mientras le grito que el dinero nunca podrá comprar el amor de Jisung, haciendo que llore y corra a encerrarse a su habitación.
—... Definitivamente no puedo hacer eso.
—Por supuesto que no, tu caso es más especial. Tengo algo que provocará que los miembros piensen dos veces antes de considerarte un viejo lesbiano, hyung.
Taeil asintió emocionado, haría lo que fuera por ganar un poco de respeto.
･*:.｡. .｡.:*･゜
—¿Estás seguro de que esto funcionará?
—Claro que sí, no se atreverán a llamarte abuelo después de que te vean. Irradias testosterona, hyung.
El mayor asintió algo tímido y se dirigió a la sala de estar, generalmente a estas horas todos los miembros se reúnen allí para conversar o ver películas por lo que era perfecto. Haechan fue el primero que volteó al escuchar que unos pasos se aproximaban.
—Oigan todos llegó el abuelit-- Santa madre que me parió.
Todos giraron sus cuellos como el exorcista cuando escucharon a Donghyuck, si el menor utilizaba esas expresiones significaba que había algo bueno de lo que no podían perderse.
Precisamente, ver a Moon Taeil usando pantalones de cuero negro extremadamente ajustados junto con una camisa del mismo color que marcaba toda su pequeña cintura, no era bueno para el corazón de nadie. Todo esas miradas estaban exaltando al más bajito, que de forma inconsciente se desbotonó un poco su camisa mostrando así buena parte de su pecho.
—S-sé mi sugar daddy, por favor.—Habló esta vez Johnny empujando bruscamente al moreno mientras tomaba las manos del mayor.
—Taeil hyung.—Dijo Yukhei evitando que el estadounidense estuviera a punto de besar al bajito.—Baila Artificial Love para mi.
—¡Que dices!—Lo interrumpió Jaehyun.—Mejor que baile Move.
Taeil se alejó rápidamente de todo ese tumulto y, una vez todos estuvieran callados, habló.
—P-podría conceder lo que me dicen...Con una condición.
—¿Cuál?—Preguntó Chenle.
—Dejen de llamarme abuelo.
Las miradas de todos pasaron de ser excitadas a serias, los miembros formaron una ronda mientras hablaban entre ellos en voz baja. Después de unos minutos, Yuta Respondió por todos.
—Aceptamos.
Kun le levantaba el pulgar al mayor mientras le sonreía desde la cocina, con algo de culpa quizás, el chino sabía que al menos Haechan no iba a dejar de decirle así.
Taeil estaba feliz, porque —al fin y al cabo— era un joven al que no le molestaba ser coqueto de vez en cuando, luciendo su outfit con un poco más de confianza. Aún así, una promesa es una promesa.
Tendría que casi violarse un bastón, pero valdría la pena.
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