Han pasado muchos años, acabo de cumplir sesenta años de edad, mi vida no tuvo nada más significante para mí. Ahora un hombre sin amor, se quedó viajando solo, un hombre que el amor nunca fue para él, ni siquiera me molesté en volver a tomar otra ruta como lo decía mi mejor amigo, ni siquiera pensé en volverme a enamorar, no me quedaba otra más que aceptar que mi vida no era para buscar amor, y si lo encontraba de cualquier forma me iba quedar solo, ella me dejó viajando solo, mi vida después de eso ha sido difícil pero por la cuestión de que yo no la he podido olvidar, por la simple razón que aún siento que está junto a mí, ella me decía que le hubiera gustado conocer muchos más lugares juntos, su ciudad favorita fuera de aquí, la ciudad de "Bergstone", tiene casi el mismo nombre que yo, eso provocaba que amara esa ciudad, la amó aún sin nunca conocerla, ahora quisiera ir a buscarla, pero eso es imposible, quisiera ser feliz como muchas personas lo son en su vida, hace poco me generaba algo de envidia esa situación, pero no me queda otra más que aceptar mi realidad y tratar ser feliz con lo muy poco que tengo, he pensado regresar a mi antiguo pueblo, no sé si haya cambiado, pero es mejor no volver, solo quiero estar con mi soledad, y tratar de olvidar lo pasado. Ahora mi mente solo me hace recordar cuando era joven, una etapa dónde a cualquier cosa le decía que sí, tenía incluso más fortaleza que ahora, mi piel era joven, mis dientes blancos, pero ahora me pudiera comparar con una hoja, me voy marchitando poco a poco, aunque por dentro, mi vida se marchitó de hace mucho tiempo, y que más puedo hacer cuando a pesar de quedarme sin palabras lo he dicho todo, he perdido toda la esperanza y haría algo para ser feliz, pero mi corazón está muy lastimado, mi corazón no podría soportar ningún dolor más, que más me queda por ver cuando sé que sus ojos nunca van a volver a abrirse, qué más puedo hacer, seguramente me preguntaré esto el resto de mi vida y nunca encuentre una respuesta. Un pasajero enamorado que siempre sale en las tardes a ver los atardeceres, es el único regalo bonito que me ha dado este mundo, mis ojos miran a donde salió ese rayo de luz y creo que así podría pasar toda mi vida, ahora puedo decir que estoy enamorado del océano, espero y eso ningún día desaparezca, es algo que lo veo infinito, y las veces que puedo ir ahí pienso que ella está al final, donde se junta el cielo y el mar, pero no es así, pienso que son nuestros corazones, ella está muy arriba y yo estoy muy abajo, pareciera que estuviera cerca pero la realidad es otra, solíamos pensar que viviríamos juntos para siempre, sabía que alguien iba dejar este mundo, pero no tan rápido. Algunas personas muy cercanas a mí me han pedido algún consejo, pero más que un consejo yo podría decir que cuando has encontrado alguien que en verdad amas, se necesitan apoyar entre los dos, y estar preparados para cualquier sorpresa que la vida les ponga de frente, podemos estar muy enamorados pero si no estamos preparados, tal vez no es un amor tan grande, la vida me ha hecho pensar así, ni siquiera sé si estoy bien o mal, ni siquiera sé si estoy seguro de ese pensamiento, pero diría mi mejor amigo de la adolescencia, busquemos la ruta que nos haga feliz, no importa cuántas tomes en la vida, toma el tiempo que sea necesario, pero siempre ve por tu felicidad, puede ser que algún te canses de tomar muchas rutas, pero necesitarías tener mucho valor para enfrentarte al maravilloso mundo del amor, lo que amas, puede ser eso que te destruya, el amor puede ser eso que haga cambiar tu vida, pero por lo que he sabido durante estos años, nadie ha tenido la misma suerte que yo, nadie ha tenido que pasar por tantas malas situaciones como yo, pero no se lo desearía a nadie, ahora me gusta ver a la gente feliz, la vida no es fácil y menos cuando sabes que le puedes decir a una persona "hasta mañana" y ese mañana nunca va llegar. Ahora no tengo ni mucho, ni poco, pero tengo lo suficiente, me tengo a mí con vida, espero tener mucho años más por delante, pero ahora ya no tomaré ninguna otra ruta amorosa de nuevo, dejaré de ser el pasajero enamorado que toda mi vida fui.
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La Ruta Del Pasajero Enamorado
RomanceEste escrito relata la historia de Casberg, un hombre de 60 años que su vida no ha sido nada fácil, la historia se desarrolla en el pueblo de BlueStone un pequeño lugar muy especial para él. Casberg nos hará parte de los momentos más significativos...