Capitulo 3.

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Pasaron varios días y Nicholas seguía en su casa con Isaac, por ahora no hablaban mucho, Isaac parecía ser un chico callado y tímido. Solo se cruzaban algunas veces por la casa.

Nicholas sintió un pequeño ruido que provenía de la sala central así que decidió ir a ver que era. Cuando llegó habían varías personas en los sofás y unas de ellas era Isaac — ¿Isaac que haces? —  El observó que los chicos que estaban allí estaban fumando, se cruzó de brazos y esperó a que Isaac le diera una explicación de porque habían más de diez personas fumando dentro de su casa.

— Emmm — Isaac se laventó del sofá en el que se encontraba y caminó hacia la cocina jalando del brazo de Nicholas para que fuera con el. No quería que Nicholas lo hiciera pasar vergüenza delante de sus amigos.—  Son unos amigos míos, si? no son molestos solo estamos fumando un poco — Se sentó sobre la mesa y miró a Nicholas.—  ¿Dejas que se queden? — 

— Vayan a fumar a otra parte, dejaran mi casa con el olor del cigarro y es asqueroso — Nicholas se dio media vuelta y caminó hacia la puerta de la cocina.—  Llévatelos —  Salió de la cocina y caminó hacia su cuarto. Al llegar se dejó caer sobre la cama y miró el techo por unos segundos cuando escuchó la voz de Isaac desde la puerta 

— Ya se fueron. —  Isaac dijo en tono bajo y continuó su camino hacia el jardín de la casa. Necesitaba tomar un poco de aire y fumar en un lugar donde el señor de la casa no se quejara.Se acostó en el piso, puso un cigarro entre sus labios y le dio una calada 

Nicholas se levantó y caminó detrás de Isaac hasta llegar al jardín, se acostó a su lado —  ¿Estas bien? —  Le quitó el cigarro, lo apagó y arrojó lejos. El cigarro hacia mal al cuerpo y el no quería que  a Isaac le pasara algo.

—  ¡¿Que haces?! — Isaac intentó tomar el cigarro antés de que lo arrojara pero no pudo. Se sentó en el piso y observó el cigarro que se encontraba entre el pasto del jardín —  No tenías por que hacer eso — Golpeó levemente la pierna de Nicholas y se levantó en busca de un cigarro nuevo.

Nicholas tomó la pierna de Isaac para que no se fuera —  Los cigarros son malos, amigo — Jaló de la pierna de Isaac haciendo que este cayera al piso. Un leve  gemido de dolor se escuchó cuando Isaac cayó al piso —  Lo siento —  

Isaac frunzió el ceño —  ¿Por que no me dejas en paz? Solo molestas, no te metas en mi vida, nadie te lo pidió —  Se levantó y entró a la casa golpeando la puerta que daba al jardín detrás de el

Nicholas suspiró y se quedó dormido en el piso. Parecía que habían pasado unos minutos dormido  pero cuando abrió sus ojos todo estaba oscuro, había anochecido. Se levantó y salió de la casa sin buscar a Isaac.

Minutos después se encontraba caminando por las calles oscuras. No entendía por que era que todo estaba oscuro, se suponía que debían estar las luces encendidas. Logró ver un par de sombras alrededor de el, supuso que eran personas caminando por al lado suyo. Unas manos tocaron su espalda y el se asustó un poco. Al darse vuelta escucho una voz que pronunciaba su nombre. Era Isaac. — ¿Que se supone que haces aquí Isaac? — 

— Te seguía — Isaac contestó y esbozó una pequeña sonrisa que Nicholas no podía ver ya que estaba todo muy oscuro.—  ¿A donde ibas? —  Isaac preguntó con algo de curiosidad, Nicholas no solía salir de la casa a estas horas, siempre se quedaba mirando una película sentado en el sofá

—  Solo quería salir un rato —  Nicholas contestó algo seco. No estaba de humor en ese momento y no tenía ganas de hablar, menos con Isaac, con el que se había peleado hace unas horas atrás. El continuó caminando sin darle importancia a que Isaac se encontraba detrás de el. Minutos después se encontraba perdido entre la oscuridad. Notó los pasos de alguien pero no eran exactamente los de Isaac, se escuchaban como tacos de mujer. De un momento a otro se encontraba dentro de una habitación a la cual solo entraba un pequeño rayo de sol, el techo llovía sobre el y tenía su torso desnudo. Se podía ver como su torso se encontraba rasguñado y sus manos amarradas con una soga la cual no pudo desatar. Sacudió su cabello mojado para quitarle el agua pero esta seguía cayendo constastemente del techo. 

Intentó levantarse pero sus pies estaban amarrados como sus manos no permitiendo que este pudiera pararse.

Luego de estar un rato largo dentro de esa habitación que se llovía pudo oír como la puerta se abría con lentitud y pudo observar unos pies femeninos descalzos. Empujaron a una chica que cayó al suelo al lado de el. Ella también tenía sus manos amarradas pero sus pies no, tal vez habían olvidado hacerlo. El la miró fijamente mientras esta se levantaba pero rápidamete cayó al suelo. Parecía estar bastante debíl. La ayudó a sentarse en el suelo y unas cuantas preguntas se le vinieron a la cabeza, tal vez ella podría saber algo más sobre que estaba pasando — ¿Por que estamos aquí? ¿Que nos harán? ¿Nos dejaran ir? ¿Por que hacen esto? — 

La chica lo miró y sacudió su cabeza negando, ella no sabía que era lo que estaba pasando, simplemente la habían atrapado en la noche como le habían hecho a el — No tengo idea — Dijo en un susurro, su voz era debíl, sus brazos estaban lastimados con rasguños como el torso de Nicholas y los pies de ella tenía una marca por la fuerza en que habían apretado la soga en sus pies ántes de llevarla a la habitación, ya que se la habían quitado para que pudiese caminar hasta esta.

Nicholas tenía un millón de preguntas más pero la chica no iba a poder contestar, ¿Que era lo que estaba pasando? ¿A el? ¿Por que a el? ¿Que tenía de especial? ¿Solo era un chico normal como siempre pensó serlo? ¿Por que elegir a alguien que no tiene nada de especial o al menos que no sabía que tenía algo?.

¿Solo o acompañado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora