Clara, Javito y Simón (diciembre 2008)

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Clarita se graduó con honores. Javito le pisó los talones con el promedio y Simón rindió las materias necesarias para comenzar la universidad. Los tres mosqueteros culminaron la secundaria y estaban preparados para iniciar una nueva etapa que prometía cambio.

Como si fuera poco esa tarde de diciembre, en el día de cumpleaños número dieciocho de Clara, serían los encargados de llevar las banderas en el acto protocolar de fin de curso programado por autoridades escolares y profesores.

Clara y Javier obtuvieron el lugar por promedio, y el tercer puesto fue en reconocimiento para Simón elegido como mejor compañero de grado. Treinta y cinco estudiantes se despedíandel colegio Parroquial ese año.

Carmela junto a Coca despertaron esa mañana con ansias. Clarita llegaba a su mayoría de edad y estaban felices. Carmela se sentía orgullosa de su niña que, con templanza y perseverancia, había logrado su cometido.

Prepararon un enorme desayuno que llevarían al dormitorio de Clarita. Café con leche, más café que leche, como le gustaba, exprimido de naranja, tostadas y pocillitos con manteca, mermelada casera que preparó el día anterior Carmela, y el más rico dulce de leche.
La dejaron descansar. El ciclo lectivo había culminado y restaban las formalidades institucionales. Mike acompañaba en la cocina mientras sus dueñas adornaban la canastita conjazmines y pequeños globos. El jazmín era devoción de Clara. La fragancia la sumergíaen un profundo éxtasis de dulzor y frescura. Cuando florecía la planta que Carmela había cultivado fue que descubrió que le apasionaba.

A las páginas de sus libros las marcaba con jazmines disecados. Los guardaba como reliquias porque grababan momentos que quedaban en el recuerdo y cuando los acariciaba recordaba aquellas historias que los atravesaba.

El primero que dio inicio a su ritual fue aquel que colocó ante la Virgen de Guadalupe agradecida por devolverle la fe a su madre. Jamás creyó en el rezo. Aunque en su colegio elcatequismo era condición obligatoria, renegaba de que pudiera existir algún Dios que la escuchara.

¿En verdad existía? ¿Y si fue el hombre quien creó a Dios a su imagen y semejanza? ¿Realmente Dios nos creó? ¿Será como la religión católica se encargó de relatar la historia? Clara ponía en duda aquello que alguna vez le contaron.

Si la presencia de Dios realmente era cierta, ¿por qué unaniña frágil e inocente tuvo que vivir esas monstruosidades? ¿YCoca y Carmela? ¿Por qué la injusticia de ver a su madre golpeada? ¿Por qué se llevó a su padre? 

Los por qué convivían con Clara y esos por qué aminoraron cuando entendió que Carmela encontró amparo en la palabra de Dios.

Tomó su guitarra y junto a Carmela abrieron la puerta procurando no exaltar a Clarita. Colocaron el desayuno sobre la mesa de luz y a la cuenta de tres las melodías entre el canto y elsonido de las cuerdas despertaron lentamente a Clarita.

"Duerme, duerme, negrito,

que tu mama está en el campo, negrito.

Te va a traer codornices para ti,

te va a traer muchas cosas para ti..."

La voz suave y delicada de Coca desveló a su hermana.

—¡Felicidades, Clarita! —exclamaron a coro, mientras Mike saltaba desesperado sobre la cama para saludar con lengüetazos a su ama. Se le llenó el alma, hacía mucho tiempo que no sentía esa sensación.

La mañana se completó cuando, poco tiempo después, Simón y Javito fueron a agasajar a su mejor amiga. Se acercaron con dulces, chocolates, gomitas azucaradas. Procuraron elegir las golosinas preferidas de Clara.

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⏰ Última actualización: Apr 30, 2019 ⏰

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Eterna Clara (primeros capítulos) Nueva edición en físico por Ediciones FeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora