18: Not Today Cullen's

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Elizabeth y Bastiann, habían estado juntos lo que restaba del día y toda la noche del día siguiente.

Había sido reconfortante estar solos, sin que nadie los fuera a molestar o interrumpir, a ella le agrado que respeten al menos su privacidad cuando estaba con él.

Aunque muy en el fondo sabía que posiblemente la familia Kryacos tuvo que ver respecto a eso.

Bastiann dejo un beso en uno de los hombros desnudos de Elizabeth, la chica ronroneo con satisfacción al sentir el suave contacto de los labios de él en su piel.

Volteo a un poco para verlo, él le sonrió esta vez yendo a besar cortamente sus labios.

Ambos estaban sentados sobre lo alto de una de las montañas. Beth estaba entre las piernas de Bastiann con su espalda recargada en el pecho de él.

El amanecer apenas se estaba haciendo notar, los rayos del sol comenzaban a salir entre las nubes. Golpeando lentamente el cuerpo de ambos chicos.

Y dejando reflejar el hermoso brillo de sus cuerpos, eran como ver diamantes.

-No sabes cuanto te he extrañado...-ronroneó Bastiann acomodando un mechón de cabello detrás del oído de Beth.-En serio, creí que jamás te volvería a ver.-

Elizabeth, se estaba esforzando para tratar de ocultar la extraña sensación que estaba sintiendo.

Sí, le alegraba volverlo a ver e incluso estar con él, pero se había sentido tan diferente durante el sexo.

Qué incluso peso brevemente en Edward. Eso le había molestado y había estado utilizando uno de sus dones para olvidarse de ese chico Cullen.

-¿Tú estuviste después de que me fuí?.-pregunto Beth. Refiriéndose al pasado.

Se alejo del pecho de Kryacos, sólo para verlo de frente, sus rodillas estaban apoyadas sobre el césped y a centímetros de la entrepierna de él.

-Sí.-asintió, Beth espero a que continuara hablando.-Todo se convirtió en un caos, habían cientos de personas corriendo de un lado a otro, mientras los cuerpos de algunos vampiros que estaban con ustedes eran quemados.-su voz se volvió algo incomoda.-Oliver y yo fuimos directamente en tu búsqueda por todo el castillo, para protegerte antes de que te hicieran daño.-le confesó acariciando una de sus mejillas.-Luego nos encontramos a tu padre y nos dijo que tú estabas a salvo, Victoria y él trataron de parar la batalla para salvar el castillo.-Beth trago la ponzoña que se le había formado en la garganta.-Y pues bueno ya conoces el final, tú estuviste desaparecida todo estos siglos, no sabíamos nada de ti. Tú padre murió y  tú madre apenas reapareció.-

Elizabeth, bajo la mirada un par de segundos mirando simplemente los vaqueros negros de Bastiann, el chico estaba algo incomodo por a verle contado aquello a Beth y hacerle recordar lo que vivió en el pasado.

-¿Tienes hambre?.-sonrió Romanova de manera juguetona.-Hay que ir a cazar, hace mucho que no lo hacemos juntos.-

Ella se puso de pie con mucha agilidad.

Bastiann mordió su labio inferior mirando lo bien que le quedaba su playera a ella, sus largas piernas pálidas resaltaban más a causa del color.

Él chico acepto sin pensarlo dos veces, ambos compartían el gusto mismo apetito por la sangre de las personas.

Mientras trato de olvidar el cambio de ánimo que tuvo Beth.

...

Edward había estado insoportable en las últimas horas, más prácticamente desde que Elizabeth y Bastiann, desaparecieron.

Danger |Edward Cullen|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora