¿Lo ves papá? Te puedes volver a enamorar

Capítulo 2 - Nadie más que Elsa

Dos meses después de la boda, Hiccup y Elsa esperaban a su primer hijo, ¡que felices y emocionados que estaban!

- ¿Qué crees que sea niño o niña?

-No lo sé, Elsa, pero sea niño o sea niña yo lo amaré tanto como a ti -dijo Hipo para después abrazar y darle un beso a Elsa- y si es una niña estoy seguro de que será tan hermosa como tú.

-Y si es niño, yo estoy segura de que será tan apuesto, amable y cariñoso como tú.

Todo marchaba bien y antes de cumplir un año de casados, su primer hijo ya había nacido y lo habían llamado Jackson, era un niño encantador al que sus padres consentían mucho, pero en especial, su tía, Anna.

Cuando su hijo nació, su cabello era igual al de su padre, pero cuando cumplió un mes de nacido, comenzó a tornarse completamente blanco, parecido al de su madre.

Todo era perfecto, hasta el día que Elsa salió a hacer unas compras y no regresó. Hipo la busco, pidió ayuda a la policía, pero Elsa no dejo ningún rastro; ¿Se había marchado? Imposible, ella amaba a su esposo y a su hijo, pero esa parecía la única respuesta; la policía no hallo su cuerpo muerto y nadie llamo a Hiccup para pedir un rescate por su esposa, ¿qué había pasado entonces? Nadie sabia la respuesta. ¿Los había abandonado? No, eso no era posible, ¿pero entonces porqué Elsa no se comunicaba con su esposo y con su hijo?

Un años después todos daban por muerta a Elsa, todos, menos Hiccup, él aún tenía esperanza en que su esposa regresará con él y con su hijo algún día; no podía darse por vencido, por alguna razón, él sentía que Elsa aún estaba viva y un día, ella regresó. Él no lo podía creer, era ella, tenía el cabello más corto que antes, pero sin duda era ella, lo sabía, sabía que ella aún seguía viva y ahora podrían estar juntos de nuevo y esta vez para siempre, podrían ver crecer a su hijo juntos y ser una familia feliz.

-Y ya le dijiste sobre...

-No aún no, y no sé si debería decírselo

-Él lo debe saber, además tu corres peligro, sabes que quieren atraparte ¿no?

-Ya han pasado dos años, si realmente quisieran atraparme ya hubieran dado conmigo...

-Pero Elsa

-Se lo diré pronto, te lo prometo

-¿Cuándo?

-Cuando sea un buen momento, no quiero preocuparlo.

-Pero...

-Se lo diré, Anna, se lo diré.

Todo parecía marchar bien ahora, pero dos años después, Elsa volvió a desaparecer y esta vez, la policía halló su cuerpo muerto, esta vez, ella no volvería, ahora Hiccup lo sabía, ella no volvería nunca más.

Cuando la policía lo llamó para que reconociera el cuerpo de su esposa, su corazón se desmoronó, Elsa estaba tan linda como siempre, pero esta vez, su piel pálida era completamente blanca y cuando tocó su cuerpo estaba totalmente helado, ahora, ella estaba muerta y una parte de él murió con ella. Era demasiado doloroso recordarla sabiendo que ella estaba muerta, que jamás regresaría y que solo la volvería a ver en sus sueños, pero nunca volvería a estar junto a ella, que nunca podría ver a su hijo crecer.

-¿Deberíamos decírselo?

-No lo creo conveniente... quizás el saber que su esposa estaba embarazada lo destrozaría más.

Para Hiccup era tan doloroso saber que su amada esposa, Elsa, no regresaría, que esta vez se había ido  para siempre, que ver sus retratos en la casa le causaban tanta nostalgia, pero tenía que ser fuerte por su hijo; quitó todas las fotos de Elsa de su casa y las guardo en el sótano, al igual que parte de sus sentimientos, ya no era el mismo de antes, ahora todo era distinto, ya no era tan amable y tan feliz como antes, al menos no con las demás personas que no fueran su hijo, él era lo único que le motivaba a seguir viviendo, porque si él no hubiera existido, seguro que Hiccup habría muerto de tristeza, pero Jack era su hijo, su motivo de vida y lo único que le quedaba de Elsa, la muestra de su amor,  de su eterno amor; Hiccup sólo amaría a Elsa.

Su madre le aconsejo buscar a otra persona con la que compartir su vida, pero él se rehusó, él amaría por siempre a Elsa, su único y verdadero amor.