Las habilidades de Celestia.

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Autora:

En la mansión Phantomhive, Ciel, seguía investigando por su propia cuenta.
En la de Celestia todo seguía cambiando.

Celestia:

Cómo siempre Sebastián me levanto, la verdad me molesta que lo haga.
Baje para desayunar y como siempre el seguía muy servicial.
-Sebastián-
- si mi lady-
El se dirijió rápidamente a mi para tomar la orden.
- Quiero esgrima-
El sorprendido se agachó y me dijo que no puede ser posible.
-¿Por qué no Sebastián?-
- sus habilidades no son del todo buenas y ha veces llega a enfermar por el estrés-
Yo enojada pues jamás me ha dicho que no.
- te lo estoy ordenando-
- si mi lady-
El al ver mi reacción rápido preparó el salón para la batalla. Me dió mi traje para el esgrima. Y me dió la espada...
Ya los dos con el traje puesto y con lo demás en su lugar... Comenzó la batalla... Undertaker miraba desde el otro lado del salón.
-Espero que no mueras Sebastián-.
Le dige mientras me ponía en una posición cómoda.
-No creo Lady-
Comenzó el ataque mientras yo lo esquivaba con gran facilidad.
El estruendo de las espadas chocando y nuestros jadeos de combate llenaban el salón. Esto está un poco facinante. A pesar de todo yo no quería dañar a Sebastián y no quería tampoco perder.
Lo miré a los ojos y lo ataque con fuerza de tal manera que el quedó en el suelo viendo impactado lo que había logrado.

Sebastián:

Mi lady me atacó y su firmeza y la fuerza de sus ataques hicieron que yo callera al suelo. La mire fijamente a los ojos y ellos cambiaron como antes lo habían hecho.
Ella alzó su mano en forma de ataque pero al momento de dar con fuerza y batir el viento con el filo de la espada soltó con cada uno de sus dedos el sujetador de la espada.
-Jajajaja! Sebastián ¿Cuando te volviste tan débil?-.
Sostenía su estómago a manera de que le molestaba el reír tanto.
Me pare e hice una reverencia.
-Usted a tomado la victoria... Al parecer sus habilidades ya van progresando eso es muy bueno-.
- No se a que se deba... Pero yo me he sorprendido mas-.
Me dijo dando una mirada sería y dominante.
Me hice para atrás creí que me atacaría sin siquiera parpadear. Solo Vi que se alejaba de aquel lugar y que regresaría a su habitación.
Sin duda ella ya era más poderosa cada vez.
Fui a la cocina, mientras cosinaba undertaker se reía en la mesa.
- Ella te ha dado una paliza... Jajaja-.
- Sabemos tanto tú y yo que ella no es lo que dice ser-.
Lo miré fijamente tratando de que se callara.
- Humm lo siento, solo quería animar el resto de lo que ya había-.
- Solo deberías animar fiestas-.
- Ya dejaríamos regresar, deberías decirle que iremos con Ciel-.
- Si ya debe de ser hora para irnos. Le diré en si debido momento-
Undertaker se retiró lentamente mientras seguia haciendo la cena para la noche.

Celestia:

Baje para tomar la cena... Mi sangre hervía dentro de mis venas. No podía creer lo que sucedía. Ya había ganado en dos cosas donde yo era muy mala para ello y sin embargo sabía que me hacían más falta habilidades por ver.

Me senté en mi lugar asignado desde el inicio y Sebastián me sirvió la cena. El parecía nervioso.
-Señorita quiero pedirle algo-.
-Si claro dilo-.
Comía lentamente mientras lo escuchaba.
-Esto será difícil pero debemos de mudarnos a la mansión Phantomhive-.
-¿Para que sería que tenemos que ir allá?-.
-Solo es para tenerlos cerca y pues tenemos mucho trabajo y nos serías útil alla-.
Creía que jamás lo Hiba a pedir. Trataba de ponerme a prueba. Hacepte y comenzó hacer maletas para todos y cada uno de los que íbamos a ir.

No quería irme dentro de mi extrañaría la mansión y lo demás pero no preocuparía pues tengo a Sebastián y a Undertaker junto Ross a mi lado.

Sebastián:

Comence a empacar las cosas de los demás en especial las de mi lady Celestia.
Cuando termine fui a ver que ella estuviera descansando.
La admire como si nunca lo hubiera hecho era extraño como si su pasado se encontrara de nuevo en el presente tan prometedor que tiene.
Cuando iba bajando me alle a Undertaker.
-humm Sebastián estás nervioso no has Sido bueno en ocultarlo-.
-No son nervios solo es ancia de tener a bochan de nuevo bien a donde debe y debió de haber estado todo esté tiempo-.
Bajaba las escaleras lentamente y detrás de mí el venía.
-Comprendo... Pero digo que ella te causa una afición por el pasado
¿Cres que la recuerde o que ella recuerde a Ciel?-.
- No lo creo son tan alejados desde aquella noche el no quiso recordar nada y así fue bochan está seguro en su mundo y sus sueños-.
-Humm jejeje sus habilidades van creciendo y llegará un momento en el que ella se pregunte si es humano serlo de esa manera-.

Me detuve bajando y lo miré fijamente.
-Comprendo que te preocupe pues ella podría tomar venganza por lo sucedido pero no crees que Daniel tenía una pequeña afición a torturar a quienes le hacían daño-.
-Con lo mucho que la has cuidado no creo que quiera matarte. Sebastián-.
Seguía con mi camino hasta la calzada de la puerta principal.
Sabia dentro de mi que ella sería lo mejor para todos y que no había problema alguno de ella sugiera o Ciel.
Sin embargo tengo que ponerme a prueba y saber que no soy el único en esta planicie de mundos que la busca.
A lo lejos solo escuchaba la risa de undertaker pasar por míos oídos.
Tal vez el asesino de la rosa también la busque y el siguiente baile nos rebelará si es ella a quien buscan.

Ciel:

El día aburrido como siempre paso de estar percibido.
Las cosas no salían de acuerdo con lo que yo quería. Cada vez era más difícil saber cómo era el asesino y el paradero de Sebastián no lo sé tampoco.

Me preguntó quién sería la invitada especial de el.
Cuando ya no podía seguir me fui a mi habitación.
Mientras quitaba mis ropajes recordaba escenas de mi vida cómo mortal y todas las cosas que Sebastián había hecho solo para mi.

Me acosté y seguía viendo el techo de mi habitación.
Me dije a mi persona que no tenía la preocupación de un niño. Ya no era un niño aquel niño chiquito se había huido.
Solo quedaba yo.... Yo y nadie más.
Al fin y al cabo jamás necesite de Sebastián.
Mis ojos se cerraron hasta ver la luz del sol entrar por mi ventana.

Sebastian. El otro contratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora