Almas Apasionadas

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Jake:

Luego de contarles lo ocurrido a mis amigos, porque si, tuve que hacerlo, estaba furioso y ellos lo notaron. Además, de que Joe no me dejaría en paz hasta que le explicara porque no le permiti besar a la morena que estaba con él.

En realidad, fue Camille la que se interpuso entre ellos, no yo.

Camille.

Un mujer bellísima por cierto. Tuvimos una charla muy confortable anoche, a pesar de que era un lugar muy ruidoso pudimos entablar una conversación interesante.

Es abogada, tiene un estudio jurídico con su hermano y es muy feliz viviendo con sus dos amigas.

No quiso hablarme mucho de su vida amorosa. Supongo que no era un tema para ser hablado en un lugar así y con un desconocido. Después de todo, yo tampoco le hablé de esa parte de mí vida. No con todo lo que ocurrió con Shane este día.

Luego de unos tragos, tomé coraje y decidí invitarla a bailar. Estábamos muy entusiasmados riendo hasta que su sonrisa se borró de golpe. Su mirada estaba fija en un punto lejano.

Y es ahí cuando el desastre arruino nuestra noche. Un maldito cabron la insulto y humilló.

Nos fuimos a los golpes y los de seguridad se lo llevaron, nosotros logramos zafarnos del asunto ya que el dueño del bar es amigo de Cam.

Con su amiga intentando hacerla entrar en razón, decidimos buscar a Joe y Olivia, su otra amiga, estuvimos media hora buscándolos hasta que Camille decidió subir a la terraza.

La angustia con la que le hablaba a su amiga, no pasó desapercibida para nadie. Así que luego de unas palabras decidieron irse.

Viendo cómo la noche se estropeó gracias al infeliz del bar, nosotros nos fuimos también.

Soporte los reclamos de mis amigos y luego partí a mí apartamento. Al llegar me di un baño y me acosté en mí cama.

Fue un día agotador, sucedieron demasiadas cosas, sin embargo lo único bueno fue haber conocido a la señorita Baxter.

Más allá de los líos en los que casi me meto, la pasé bien con ella. Es una mujer agradable e inteligente, perspicaz y con mucho sentido del humor. Por suerte antes de que ocurriera ese altercado, logré obtener su número telefónico.

Mañana quiero invitarla a almorzar, quiero resarcir el daño hecho. Aunque no haya sido provocado por mí, quisiera volver a verla. Y sé que sería una buena oportunidad invitarla a un lindo lugar.

Con la idea de llamarla mañana es que logró consiliar el sueño. Sera un día interesante.

🖤

La alarma suena a lo lejos pero yo ya estaba despierto desde mucho antes. He pensado en cómo afrontar este día.

A pesar de que anoche me fui a dormir con la idea de llamar a Cam, no sé cómo hacerlo. Estoy algo desorientado, han sido muchos años de noviazgo con Shane y ciertamente no sé cómo volver a las citas.

No es que está invitación sea una cita.

Porqué no lo sería...

¿No?.

En fin, decido levantarme, darme un baño y tomar el desayuno. Un café tan fuerte que levantaria hasta los muertos, hace de mí día, un buen día.

Me coloco un traje negro y una camisa negra también. Busco mí maletín y las llaves del auto. Salgo directo al estudio.

La arquitectura siempre fue mí pasión, y poder tener mí propio estudio con mis dos mejores amigos ha sido lo mejor del mundo. Trabajar codo a codo con ellos hasta lograr ser unos de los mejores en Manhattan. Algo que nos enorgullece a los tres.

Mientras voy llegando a mí trabajo, es cuando decido llamarla. Si no tomo coraje ahora, no lo haré más.

Entro a la oficina y nuestra amable secretaria me da mis recados además de una humeante taza de café, amo ese elixir de la vida.

Luego de hablar con Jeniffer y que me mostrara mí agenda, se retiró permitiéndome así poder hacer esa llamada.

Marco su número y escucho el tono, los nervios están haciendo mella en mí sistema digestivo y es cuando escucho su voz cuando me quedo estático:

—Camille Baxter —se escucha del otro lado de la línea y yo luego de espabilar carraspeo.

—Jacob Scott, arquitecto, nos conocimos anoche en el Green Heart. ¿Cómo estás preciosa?.

Diablos, podría haber sonado menos engreído,¡maldición!

Su voz apenas sale en un susurro:

—Jake... Eres tú.

Magnífico, sólo su voz y mí nombre dicho así altera todo mí cuerpo. ¿Qué ocurre conmigo?

—Si Cam, llamaba para preguntarte si tú... ¿Quieres... Bueno, quieres ir a almorzar conmigo hoy...?

Rayos, ¿de verdad?. Tartamudear es el mejor método de conquista del mundo.

Odio a mí consciencia y su sarcasmo.

Luego de un suave carraspeo de su parte y el silencio más eterno del mundo obtengo una respuesta:

—Claro Jake, me encantaría almorzar contigo.

Suelto el aire que retenía involuntariamente y susurro un "si señor".

Le pasó la dirección del lugar al que quiero llevarla y cortamos la llamada.

Nunca estuve tan ansioso en mí vida. Quiero que éste almuerzo sea relajado y tranquilo, sin sobresaltos. Me gustaría poder conocer más a Cam y ser buenos amigos.

Es más que evidente que ninguno de los dos está listo para una relación, así que no espero nada de ella y sé que ella tampoco lo espera de mí .

Pero... ¿Por qué siento que mí estómago salta dentro de mí cuerpo?.

Estoy nervioso como el demonio y no entiendo porque.

Saco esas ideas de mí cabeza y me digo a mí mismo que disfrute de este día y aproveche la oportunidad de conocernos más.

Finalmente ¿qué tengo perder?.

Actualizando dos capítulos ocurren milagros de vez en cuando jaaj espero les guste mucho,dejen sus votos estrellitas y comentarios.

Besos 😘

~D❤️