New Perspective [NamMin] (CANCELADO)

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"Meh," Le sacó la lengua a su pelirroja favorita, ella le picó el ombligo antes de recriminarle que eres muy infantil, Jeon Jungkook, "¿Y? Aprendí de la mejor." Pero Aeri sólo bufó en burla y con la mano desvió la mirada de su novio a otro lado, él riendo al instante.

"¡Ya! Es un tema serio."

"¿Tan serio como que todavía no vemos esa película nueva que salió la semana pasada? Porque te recuerdo, Kim Aeri, que no la hemos visto y se supone que es buenísima."

"Más serio aún." Jeon Jungkook siempre fue una persona un tanto despreocupada, eso lo saben todos hasta su abuela. Kim Aeri está incluida en esa lista de gente que sabe que a Jungkook no le gustan los asuntos serios, que a veces prefiere evitarlos y seguir con las risitas mientras se pueda.

No obstante, él ya aprendió que debe enfrentar los problemas, por más pavor le provoque la situación, su timidez ha disminuido considerablemente y todo gracias a sus esfuerzos por ello, no es momento de parar ahora y tirar a la basura sus esfuerzos, aunque le causa intranquilidad que su novia haya dicho las palabras a las que todos le tienen miedo:

Tenemos que hablar, dijo.

Y eso es una mala señal, en cualquier sentido, es conocimiento general que cuando alguien dice esas palabras nada bueno pasará, ¿qué importa si su novia es la mejor persona que ha conocido en toda su corta y estúpida vida? Sí, ella es maravillosa, pero esas palabras no lo son tanto. No combinan, que ella lo diga sólo lo vuelve peor. Le aterroriza. 

"¿Vas a terminar conmigo?"

"¿Qué? ¡No! Sólo quiero hablar contigo," Ella asegura, pero Jungkook sigue sin creer del todo que no tiene una mala noticia que darle, "Hice una promesa y la voy a cumplir."

"¿Promesa? ¿De quién? ¿A quié--" Le da un beso repentinamente para callarlo, no es algo de lo que no esté acostumbrado, al contrario, le gusta que de repente su novia se ponga sus moños y le dé besos sólo porque le salió de los ovarios hacerlo. 

"Si guardaras silencio por un minuto ya lo sabrías ahora," Ella menciona con toda la seriedad del mundo, y es ahí cuando Jungkook asiente y ella por fin sonríe, lista para decirle cualquier cosa que le tenga que decir, "La otra vez acompañé a Jimin al obstetra porque ninguno de ustedes quiso hacerlo."

Su mención hace que haya una mueca en su cara, no fue intencional, pero hay demasiada mierda pasando en estos momentos como para que hablar de él sea algo bueno.

Vaya.

Y él pensando que Jimin había ido sólo, gran revelación.

A Jimin siempre le ha tenido muchísimo cariño y Jungkook exactamente no es la persona que más lo oculta, sí, puede que al principio fuera un propio tsundere, pero entre todos sus hermanos adora a Jimin y hoy en día no tiene miedo de demostrarlo, le da igual el qué dirán. No obstante, lo de últimamente lo tiene parado en un sitio muy raro, porque ya no sabe qué pensar de él, ni qué opinar, ya no sabe a quién apoyar.

No pensó que su hyung, el mismo Jimin que conoce, sería de esas personas que evaden responsabilidades; es pasional y trabajador, sobre todo es muy responsable, le tomó por sorpresa saber que regalaría a su cachorro y no lo comprende del todo, no apoya esa decisión para nada. 

Sabe que hay desprecio en su mirada y en su voz y en cómo desvía la mirada, escéptico le dice a su novia, "¿Oh? ¿En serio? ¿Cómo les fue?" 

Es que no puede reaccionar de otra forma, no puede sin sentirse mal consigo mismo. Su novia arquea las cejas, "Me ha dicho que están molestos con él."

"¿Te dijo la razón?"

"Sí."

"¿Entonces? ¿Qué me quieres decir?" Su novia agacha la cabeza y le toma la mano, guiándolo al sillón de su apartamento cuando hace unos momentos estaban muy felices jugando con el dinosaurio que era su Wii, el juego ya quedó más que olvidado cuando ambos se sientan.