A la mañana siguiente al despertar me duche, me arregle y al bajar desayune sola ya que el había salido. Al finalizar sali a dar una vuelta por el jardín y vi un lugar por donde podría escapar, claro está que no lo dude y comenzce a correr, cuando estaba en una carretera decidí esperar que pasará alguien en auto para pedir ayuda.
Llevaba una media hora ahí y no pasaba nadie, cuando vi un carro acercarse hice señas, el carro se detuvo y cuando bajaron la ventanilla de atrás quede helada, era el maldito idiota.
-Me hizo subir al carro a la fuerza, al llegar a su mansión bajamos del auto y cuando fui a irme a mi habitación el me detuvo tomándome del brazo.- Ni se te ocurra volver a intentarlo.
O que, me vas a matar -dije dejándolo-.
Si te hago algo a ti me muero pero se que te has hecho muy amiga de Cristina y a ella si puedo matarla -dije serio-
No pude evitar sentir como mis ojos se cristalizaban y asenti -no volvera a pasar-
Eso espero -dijo el-
Y apenas sentí que me soltó corrí lo más rápido que pude hasta mi habitación. Maldito idiota y maldito síndrome de Estocolmo -me tire a la cama y unos minutos despues mis ojos se cerraron gracias al sueño que tenia-
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Mi Síndrome De Estocolmo
Short StoryTe das cuenta de que tu vida es un desastre cuando te enamoras de tu secuestrador. Clary Morrison una chica de tan sólo 18 años dulce, amable, encantadora y creyente del amor de peliculas. Henrry Desmond el jefe de una gran organización de tráfico d...