× 01. Irraggiungibile ×

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Jk

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Recuerdo la primera vez que lo vi, llevaba un saco gris, demasiado antiguo para su corta edad, solo tenía 20 años, no tenía amigos, ni hermanos, sus padres vivían fuera del país y él estudiaba contaduría en la misma universidad que Jimin. Cuando lo conocí en profundidad no creí que fuera tan difícil soportar día a día su presencia, con el tiempo eran más las horas que pasaba con nosotros que en su propia casa y eso estaba comenzando a confundirme.

Siempre me acompañaba a la escuela, me hacía el almuerzo y me llevaba a cada una de mis practicas, al parecer no trabajaba, yo siempre preguntaba porque estaba todo el día con nosotros, porqué no podíamos ir a su casa también, jamás respondió alguna de mis dudas. Una tarde de entrenamiento, mientras practicaba para el examen de cinturón negro en Taekwondo, él me levantó del suelo y se asustó al ver un corte en mi clavícula, el cual me había hecho contra la barandilla de la sala. Lo único que recuerdo de esa caída fue a él frente a mi preguntando como me sentía, me mantuvo la mirada más de quince segundos, quince jodidos segundos en los que mi cuerpo se paralizó y mi vista no se dirigía a otro lugar que no fuera a sus labios. Solo cuando Jimin entró a la habitación preguntando como me fue, pude apartar mi mirada de aquellos finos y apetecibles belfos rosados que eran relamidos sin piedad, un acto inconsciente y automatizado suyo.

Fue entonces cuando entendí que me estaba gustando alguien que era imposible, mis sentimientos comenzaron a diferenciarse cuando me di cuenta de que me era complicado verlo únicamente como el amigo de mí hermano, siempre había sido el chico amable, preocupado por mí, que hacía de mí cumpleaños el mejor cada año, que me hacía reír y mi primer amor. Pero jamás alguien a quien podría mirar a los ojos y no sentir aquello inevitable, aunque insistieran, aunque Jimin siempre hablaba de lo genial que era y de lo buenos amigos que son, como intentando que tuviera ese amor fraternal al igual que él.

Kim Taehyung era realmente hermoso, sus labios eran rosados, llamativos, su rostro de finas lineas marcaban un poco su lado mayor sin arruinar el aura joven, era muy apetecible a mis gustos. Pero no solo eso, su personalidad alegre y protectora, la amabilidad, humildad y madurez que portaba lo hacían mucho más atractivo que cualquier chico que he conocido, aunque eso también lo hacía inalcanzable.

Me había perdido más de una vez en la comisura de sus labios, en las venas de sus brazos cuando se arremangaba las mangas y en la poca piel que mostraba recatadamente desabrochando un boton de su camisa. La idea de tenerlo a mi total disposición, sentir sus labios besando cada porción de mi piel, tocando donde pocas personas lo hicieron, aceleraba mi corazón, siquiera el más mínimo roce entre nosotros me hacía temblar. Era mucho más fuerte cuando él me hacía cosquillas sin saber que esa sensación de euforia se centraba en la zona baja de mi abdomen, algunos le dicen mariposas, a mi me parecían lobos intentando arrancarme la carne desde adentro.

𝕃𝕠 ℚ𝕦𝕖 ℍ𝕖𝕞𝕠𝕤 ℙ𝕖𝕣𝕕𝕚𝕕𝕠 || TaeKook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora