impulse control disorder ☹ a.i. (Español)

tres; a dos horas

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―¿Quién es Robyn Flynn?―preguntó Ashton, en tono muy tranquilo porque no quería que la chica lo escuchara.

―No sé, hombre, solo sé que está loca, literalmente ―respondió Calum, haciendo quedar a Ashton más confundido. Ashton miró a Robyn, quien estaba tratando de dar la vuelta por las páginas de un libro, pero le resultaba difícil debido a las esposas por lo que se veía muy frustrada.

Iba a lanzar el libro a través de la habitación, pero la mujer la detuvo, mirándola enfurecida.

―No lo entiendo ―dijo Ashton. Se sentía mal por Robyn debido a lo desalentada que se veía. Eso hizo a Ashton preocuparse.

―Ash, simplemente no hables con ella, ¿de acuerdo? ―habló Calum, pero Ashton no había hecho nada. Él sólo siguió mirando a Robyn.

Ashlyn y Calum empezaron a hablar y Robyn los miró, sintiendo su estómago revolverse Deseó tener la capacidad de tener amigos. Momentos más tarde, Robyn y la mujer salían de la tienda y los ojos de Ashton se agrandaron.

―¡No, espera!―llamó con ganas de apropiarse de la atención de Robyn.

―¿Puedo ayudarle?―habló la mujer en tono amargado. Hizo a Ashton sentirse incómodo y él no sabía qué palabras elegir. Quería hablar con Robyn no con la mujer.

―Um, no. Que tenga un buen día ―dijo Ashton, dando a Robyn una sonrisa triste que ella regresó.

La forma en que sonreía hizo a Ashton fruncir el ceño. Se veía tan triste que casi rompió el corazón de Ashton.

Cuando Robyn salió ya sentía las ganas de gritar. Las esposas se clavaron en su piel y estaban demasiado apretadas.

―Hazlo ―dijo su mamá y Robyn obedeció. Lentamente se sentó en el asiento del pasajero, a la espera de su mamá para quitarle las esposas.

―No te quitarás las esposas hasta la cena―dijo su mamá y su tono envió escalofríos por la espina dorsal de Robyn. Le daba, totalmente, miedo su madre, sobre todo cuando estaba irritada.

―¡Pero mamá, me hacen daño!―gritó, agitando sus brazos alrededor del coche. No estaba asustada por su madre, estaba petrificada.

―La cena es en solo dos horas.

Robyn gimió.

―Ni siquiera me das de comer de todos modos ―murmuró. Robyn esperaba que su madre se sintiera mal, pero se veía bien.

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