Cap 27 - Una mañana juntas

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Narra Carla

Mi cuerpo dolía demasiado, el sonido de las ambulancias se hacían presentes, el suelo lleno de vidrios y yo encima de ellos, no me podía mover pero podía ver todo. No entendia que sucedia, quería hablar pero algo en mi garganta me lo impedía. Un paramédico se acercó a mi, me decía que todo estaría bien, estaba entrando en desesperación al ver un cuerpo entrar en una de las ambulancias. Deseaba levantarme y correr a la ambulancia la cual estaba yéndose....

Habia sido un sueño.

La luz de la mañana alumbraba nuestra cama, podia sentir calor por mi cuerpo, estaba sudando. Era un nuevo dia, podía ver a mi hermosa novia con algunos mechones en su rostro calmado y su respiración pacífica descansando en mi pecho. Coloque su cabello de un costado, soltando un fuerte suspiro al saber que solo era una sueño. En eso ella bostezo anunciando que iba despertando.

-Hey! Que tal dormiste?- pregunte viendo como se aferraba de mi tórax.

-Muy bien, teniéndote a mi lado.- beso mi pecho- estás bien? -  se levantó al ver mi rostro sudado

-Si, solo tuve un mal sueño- solte otro fuerte suspiro, dejando escapar ese dolor de pecho que causó aquel raro sueño.

-Que pasaba en tu sueño?- me miraba preocupada, colocando sus manos en mis mejillas.

-No se, era demasiado raro, que había sufrido un accidente pero era tan real.- intentaba buscar una respuesta en mi mente.

-Tranquila mi amor- beso mis labios - anda a bañarte, eso te relajara.

-Bueno.

Sali aun pensativa, miraba mis brazos, tocaba mi cuello aun si saber la razón de porque todo parecía ser real. Deje las toallas encima de la taza del baño y mi ropa tirada en el suelo. El agua caliente cayendo por mi cabeza recorriendo todo mi cuerpo, sin moverme por un buen rato, cerré mis ojos como lapsos de tiempo pasaban imágenes del sueño, mi corazón se altero nuevamente al igual que mi respiración, el cuerpo de aquella persona llena de golpes y sangre en toda su ropa abrí mis ojos desesperadamente golpeando involuntariamente la pared de baldosa. 

Al terminar de ducharme y colocarme la toalla por toda mi cintura  y mi top me percate de una marca en particular en mi cuello, asentando las yemas de mis dedos en el área morada que por un momento me asuste pero recordé lo de anoche volviendo relajar mi cuerpo, agarre mis cosas y salí. Al entrar a la habitación vi a mi novia checando su celular, al verme sonrió y se acercó a mi. 

-Ya te sientes mejor?- asentí con la cabeza, deteniéndose a ver la misma marca en el cuello- y eso?

-Fuiste tu la que ocasionó- soltó una gran carcajada sin creerlo, dándose cuenta que no bromeaba, cesó su risa.

-En serio? JAJAJA dios mio, pero si solo nos besamos- se preguntaba a si misma como sucedió todo eso.

-Solo, amor acepta que me hiciste un chupetón en el cuello.- reía al verla como dudaba de sus capacidades.

-Ay! Si ves lo que causas...- me empujo, sorprendiéndome por lo que dijo.- Tu y tu forma de seducirme.

-Es algo que ya lo llevo en mi - hable como un todo de superioridad, haciendola reir.- vez hasta te estas riendo. 

-Bueno ya, me ire a bañar- agarró su toalla y salió por la puerta.

La mañana paso volando para nosotras, los demas seguian durmiendo, por lo que habíamos desayunado y salido a caminar hasta que despertarán y comenzar el día con lo que teníamos planeado. En el camino nos fuimos conociendo más, contando anécdotas de lo que nos sucedía de pequeñas y experiencias de la vida cotidiana.

Un Amor Como El NuestroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora