Parte 4" día de las madres"

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Después de los acontecimientos de esa tarde, Bunny insistió en que Jack aceptará quedarse como huésped en su casa debido a que el joven se encontraba perdido y había mostrado ser un chico educado, ante tanta insistencia el samurái acepto quedarse en la casa de los bravo.

-bueno ya que al fin aceptaste quedarte, Johnny cariño me harías favor de acomodar a Jack en la habitación de huéspedes.

- Pero mamá, esa habitación es la que uso como mi gimnasio personal!! - dijo un tanto exaltado el fornido rubio.

- cariño porfavor no seas grosero con las visitas - aquella señora se cruzaba de brazos, se notaba molesta por la actitud de su hijo por lo cual el samurái intervino de pronto para intentar calmar el ambiente.

- Bunny porfavor no se exalte, lo que menos quiero es incomodar e iniciar una discusión entre madre e hijo, si le parece puedo dormir en otro lugar, tal vez en su alfombra realmente no me incomoda.

- por supuesto que no dormirás en la alfombra, eres mi invitado y no permitiré eso. - un poco más calmada la señora bravo soltó un gran suspiro dirigiéndose a Johnny - hijo porfavor lleva a Jack al cuarto de huéspedes , tienes suficiente espacio en tu habitación para guardar esas cuantas pesas que tienes hazlo por mí .

Johnny observó el tono en que su madre le pedía ese favor y al sentirse culpable por si actitud anterior asedio a la petición -esta bien mamá, este guapetón solo lo hará por su mami.

La señora bravo satisfecha con la respuesta de su bebé sonrió con alegría - muchas gracias cariño sabía que no le fallarias a mami, bueno chicos los tengo que dejar un momento quede de jugar una partida de póker con mis amigas así que si necesitan algo estaré en la casa de a lado.

- jugaras de nuevo con la mamá de la enana

- no le digas así cariño, es una de tus amigas además es una niña muy linda, bueno ahora sí me voy o llegaré tarde regreso en unas horas.

Bunny tomaba su bolso y salía de su hogar dejando a el rubio y el samurái completamente solos.

- bueno pues... Mami dijo que te llevará al cuarto de huéspedes Jack así dices que te llamas verdad?

- si todos me llaman Jack.

- mucha charla y poca acción, sígueme Jack te llevaré a la habitación.

El pelinegro seguía a Johnny por el lugar, subiendo las escaleras hasta llegar a un segundo piso en donde al parecer se encontraban los dormitorios, el fornido rubio giro la perilla de dónde sería la recámara de Jack y al abrir el lugar se podía ver un notable desorden, en el piso se encontraban incontables artefactos de ejercicio, en donde al parecer estaba la cama se podía ver varias toallas sucias y el desorden continuaba porque además de esas toallas también había ropa deportiva de Johnny por todo el lugar.

-oh cielos!! No recordaba que el lugar se viera tan mal y si dejo todo así mi mami se molestará.
Ok amigo tu me ayudarás a limpiar esto, después de todo será tu habitación.

Jack al ver todo el desorden de su nuevo "amigo" solo obedeció a lo que le había dicho y sin más se dispuso a levantar la ropa y las toallas sucias. Johnny llevaba su equipo de ejercicio directo a su recámara para después ayudar a Jack con el desorden.
Ambos limpiaron aquella recámara hasta dejarla limpia casi irreconocible .

- mucho mejor no lo crees? Ahora sí mamá estará feliz aunque imposible no estarlo teniendo un hijo cómo yo jum!! Hum!! Haa!!.

Sin duda la actitud de Johnny hacia reír a Jack, realmente era un sujeto agradable aunque un poco extraño al hacer ese tipo de poses, al samurái no le molestaba en lo más mínimo.

- oye amigo, piensas dormir así , no traes equipaje o algo por el estilo? .

Jack no llevaba consigo nada más que lo que tenía puesto en esos instantes así que se limitó a mover la cabeza dando un no por respuesta.

- como es que viajaste a un lugar desconocido sin tu equipaje? Bueno como sea porque no te das una ducha en lo que busco algo que tal vez pueda quedarte.

- una ducha? -dijo Jack un poco sorprendido .

- si amigo una ducha tu sabes, te mojas usas shampoo .

- si te comprendo solo que...

El rubio se daba cuenta a que se refería - a si la ducha está por haya sígueme...
Johnny le explicó a Jack lo del agua caliente y el agua fría, también le señaló el jabón y su shampoo favorito marca el sr Kevin que el rubio estaba dispuesto a prestarle, mostrándole por último su afeitadora eléctrica por si requería usarla refiriéndose a su barba.
Jack ponía completa atención a todo y ya que lo había entendido el rubio salia dejándolo solo.
El peligro tomo aquella ducha que le relajaba, aún se cuestionaba el porque había llegado hasta eses lugar y de ese modo, al menos no había sido por Aku.
También decidio hacerle caso a su amigo y quitarse la barba con ese artefacto extraño, desde que Ashi se había ido Jack no se molestó más por su aspecto pero ahora por una extraña razón se sentía diferente, tal vez se debía a la amabilidad de esas personas que lo acogían sin más en su hogar y porque al llegar a ese sitio podía comprobar que había terminado ese ciclo de Aku que tanto le costó terminar.
Al salir de la ducha con una toalla enredada en su cintura salia en busca de su peculiar amigo.

- Johnny e terminado te encuentras en esta habitación? - el samurái tocaba la puerta antes de entrar a lo que el rubio le pidió que entrara y para sorpresa de Johnny, el pelinegro parecía otro.

- entonces seguiste mi consejo..

- así es Johnny, muchas gracias por permitirme usar tus cosas - Jack realizaba su acostumbrada reverencia.

- si, no te preocupes por cierto esta será tu ropa de dormir es una de mis pijamas si te queda un poco grande mi mami te la puede arreglar después.

- te lo agradezco nuevamente Johnny.

- oye Jack ... Yo sé que apenas nos conocemos un poco pero quería pedirte un favor.

El samurái le intrigaba el saber que clase de favor le pediría su anfitrión, se veía nervioso así que colocó su mano en su hombro intentando calmarlo.

- claro puedes pedirme lo que sea si es que está en mis manos con gusto te ayudaré.

- yo quiero pedirte ayuda para comprar un obsequio, mañana será el día de las madres y bueno mi mami siempre me a consentido todo desde que yo era un guapetón bebé, ella es lo único que tengo y siempre e querido darle algo especial pero nunca sale como quiero.

Jack quedaba cautivado por la petición de el rubio, a pesar de que a simple vista podrías pensar que es alguien que solo piensa en si mismo había alguien que le importaba más que su persona y ese alguien era la señora bunny su madre. Es así que el pelinegro asintió con la cabeza.

- claro Johnny te ayudaré en la búsqueda de tu obsequio. - regalándole una suave sonrisa ahora el rubio hizo una reverencia ante el.

- bueno es así como tú agradeces así que Johnny Bravo te agradece tu ayuda, bueno debo irme que mañana nos espera un gran día jum!! Hum!! Haaa!! Que descanses amigo.

Johnny abandonaba la habitación de su huésped dirigiéndose a la suya.
Jack lo miraba sin borrar esa sonrisa de su boca y es así como se fue a la cama, era la primera vez en tanto tiempo que consilio el sueño pronto y durmió profundamente.
Mientras tanto Johnny aún no podía creer que el hombre que lo perseguía en sueños ahora se encontraba ahí en la habitación de a lado, se encontraban bajo el mismo techo y por alguna razón eso le daba tranquilidad.
Después de tantas noches ambos dormiría tranquilos, sin pesadillas inexplicables ni alucinaciones extrañas, como si lo único que les hubiera echo falta en este tiempo era saber sus nombres y el echo de estar uno tan cerca del otro.







// Y esta historia continuará queridos lectores//

Samurái Bravo// Soñando con mi destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora