Capítulo 7: Reencuentro

306 11 0
                                    

*Capítulo 7: Reencuentro*

(BYRON)

Mikeila y Lizzie estaban completamente emocionadas, se colocaron enfrente del armario y no paraban de probarse modelitos. Me estaba poniendo nervioso y encima me aburría.

-¡Ya vale!-dije fuera de mis casillas-Definitivamente no entiendo a las mujeres. Os quedan bien todos los vestidos que os habéis puesto y seguís probándoos más. Ni que fuerais a ver al rey…-dije negando con la cabeza. Lizzie me miró sorprendida y me hermana bufó.

-Mira que eres pesadito… Tú no lo entiendes-dijo mi hermana mirándome molesta.

-¡¡Y menos mal que NO!!-grité y salí de la habitación dando un portazo. ¿Cómo era posible que tardaran tanto en ponerse un vestido? Bufé molesto y me tiré al sofá a ver la tele, por lo menos ahí estaría más a gusto. En menos de diez minutos bajaron las dos perfectamente arregladas. ¿Ven cómo no era tan difícil acabar pronto?

-¡Estáis preciosas!-grité emocionado ya que por fin nos iríamos a la fiesta. Mi hermana me giró la cara y Lizzie me dedicó una tímida sonrisa que se extinguió con un codazo que le propinó Mikeila. Las miré con una ceja alzada y me encaminé hacia la entrada, Mikeila pasó por mi lado dándome un empujón y saliendo ella primero por la puerta. La miré sorprendido ¿estaba enfadada por semejante tontería? Cuándo iba a salir, Lizzie tiró de mi brazo y me pegó a la pared, me dio un tierno beso y se acercó a mi oído.

-Lo siento, se supone que no podía hablarte ni nada-dije encogiéndose de hombros y guiñándome un ojo-Y recuerda, estoy enfadadísima contigo-dicho esto, me dio un corto beso en los labios que me dejó muy desconcertado. Definitivamente jamás entendería a las mujeres…

-¡Liz que haces! ¡Ven ya!-gritó mi hermana desde el coche. Lizzie corrió hacia el coche mientras me mandaba un beso por el aire. Subí al coche y conduje rápidamente hacia la fiesta, tenía ganas de distraerme, al final no me iba a disgustar tanto ir… Aparqué dónde pude y vi un montón de coches aparcados enfrente de la casa. Mi prima se lo había currado… toqué a la puerta y se estaban tardando en abrir...

-¿Es que no abren o qué?-dijo Mikeila enfurruñada.

-¿Llamo a Narel?-le dije a mi hermana con una sonrisa. Sus ojos se iluminaron y me abrazó con todas sus fuerzas.

-Sí, sí, sí-dijo dando saltitos de alegría. Le día un beso en la coronilla e iba a sacar el móvil del bolsillo cuándo, por fin abrieron la dichosa puerta…

-Siento la tardanza-dijo una chica morena, que llevaba  un vestido azul celeste y un recogido muy favorecedor a mi parecer, la miré muy sorprendido… era era…-adelán…te…-dijo tan sorprendida cómo yo. Lizzie y Mikeila entraron con una sonrisa en el rostro cada una pero yo no, me quedé ahí, mirándola al igual que ella a mí. No sé si fueron, segundos, minutos o horas pero ninguno de los dos cambiamos la postura. Estaba tan bonita… definitivamente, era la chica más hermosa que había visto en mi vida, nada en ella había cambiado, su pequeña y delgada pero esbelta y bien formada figura te dejaba sin respiración, sin contar su radiante sonrisa y sus oscuros ojos que dejaban paso a la imaginación para saber  la personalidad de su dueña. Sus ojos, de repente cambiaron su brillo sorprendido y curioso por uno amable y emocionado. Sonreí instintivamente.

-Hola-dijo al fin, ya ni recordaba su voz… era tan melodiosa, tan dulce que hacía que todo lo que dijese fuese hermoso. Pero… ¿por qué me encontraba con ella ahora que en unos meses sería mi boda? ¿Acaso me estaban torturando y restregándome por la cara que ella jamás será mía?

-Hola ¿Cómo has estado?-le pregunté eclipsando lo máximo posible mi emoción al verla. Ella vaciló un poco y jugó con su gargantilla algo nerviosa.

-Bien… ¿y tú?-me dijo con media sonrisa.

-Eres hermosa…-dije perdiéndome en su mirada.

-¿Qué?-preguntó alzando una ceja. Yo reí nerviosamente.

-Bien-respondí estáticamente. Ella me dedicó una enorme sonrisa.

-P-pero pasa, no te quedes en la puerta-me dijo separándose un poco de la entrada de la puerta para dejarme pasar. Le sonreí abiertamente.

-Me gustaría hablar un poco contigo, mejor vamos al jardín ¿sí?-le dije con una cara de pena y le tendí la mano. Ella dudó un poco asintió con la cabeza pero ignoró mi mano tendida ¡Eso me dolió! Di un suspiro y la seguí, se sentó en uno de los bancos de piedra que estaba más lejos de la casa. Su rostro bañado bajo la brillante luz de la luna, era aún más hermoso si cabe. Parecía un auténtico ángel.

(DARCY)

Me sentí nerviosa al verlo, estaba cambiado pero sus ojos verdes no habían perdido ese brillo especial que recordaba del pasado. No sé ni cómo ni por qué pero terminé sentándome en el banco más alejado de la gente. Estaba algo nerviosa y confusa. ¿El por qué? Ni idea… simplemente me sentí así. Mientras se me acercaba, me quedé atónita por lo guapo que se había puesto. Si no fuese por Breed… ¡BREED! Me puse rígida, Breed… comencé a echarlo de menos. Le necesitaba, necesitaba hablar con él…

Byron se sentó a mi lado e intentó cogerme la mano. Aparté mi mano con brusquedad y le miré con una expresión de furia. ¿Furia por qué? El me miró desconcertado y sus ojos reflejaron tristeza, me sentí mal, mal por haberlo tratado mal sin motivo alguno.

-Lo siento yo…-dije muy nerviosa, mi móvil comenzó a sonar en el interior de mi bolso y me asusté. Mi bolso cayó al suelo y Byron se precipitó a cogerlo, justo cuando me lo estaba devolviendo sentí un luz sobre nuestros rostros. Mientras yo descolgaba la llamada, Byron miró en todas direcciones.

-¿Si?-pregunté nada más descolgar.

-Soy yo, preciosa-oí su anhelada voz al otro lado de la línea. Mi corazón dio un vuelco de la felicidad.

-¡Breed! ¿Cómo estás? Oh cielo, te he echado tanto de menos…-dije levantándome de golpe y alejándome un poco de Byron, me daba vergüenza que escuchase mis empalagosidades con Breed.

-¡Vaya, veo que mi pequeña me ha echado de menos!-dijo entre risas. Sonreí anchamente.

-No sabes cuánto… Lindsay nos ha hecho una fiesta de bienvenida y no sabes que agobio…-dije mientras seguía caminando.

-¿En serio?-me imaginé cómo alzaba su ceja y reí-¿Qué te hace tanta gracia?

-Pues es que te he imaginado con la ceja alzada-dije intentando apaciguar mi risa.

-¿Cómo lo sabes?-me preguntó mediante risas.

-Pues… porque te amo y porque te conozco íntegramente-dije de una forma obvia.

-¿Y qué tal? ¿Te estás aburriendo?

-Aburriendo no… me encontré con Byron y hace un rato estábamos hablando en al jardín-dije sin emoción alguna. Breed calló rápidamente. Durante unos pequeños instantes me estaba empezando a poner nerviosa.

-Ah…-dijo al fin. Mientras caminaba nerviosa me tropecé con una rama y casi caigo al piso. Vi una sombra que se precipitó a correr. Me asusté y caí al suelo haciendo que un fuerte sonido se produjese…

_____________________________________________________________________________

OLAA ^^ AQUÍ EL SIGUIENTE! UN SALUDO Y ESPERO QUE LES GUSTE! <3

Pide un DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora