Sorpresas inesperadas

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Me encontraba ordenando las sillas y las mesas para una actividad muy entretenida que había organizado para los niños el día de hoy. Eran las 8:40 de la mañana, los niños llegarían dentro de 20 minutos Jenn había pedido permiso para llegar un poco más tarde ya que se debía ir a realizar un examen así que estaba sola. Cuando ya tenía todo listo me acerqué a la entrada a esperar que los niños llegaran poco a poco fueron llegando todos menos la pequeña Rindy espere unos minutos más pero no llego, esta niña me tenía muy sorprendida era muy inteligente, era cariñosa y tierna. No tengo preferencias dentro del curso para mi son todos iguales pero cada niño es especial y ella tenía algo muy parecido a alguien y eso llamaba mucho mi atención. En fin estaba apunto de comenzar con la actividad cuando alguien toca la puerta y al abrir me encuentro con Carol y Rindy de la mano.

- Hola pequeña, pense que no vendrías.- Me pongo a su altura y ella deposita un tierno beso en mi mejilla.- Venga ve a sentarte a tu puesto porque vamos a comenzar con la actividad.- La pequeña mira a Carol, esta le guiña un ojo y la pequeña corre a sentarse.

- ¿Su madre la dejo en dirección?- Pregunté confundida.- Ella me miro y solto una sonora carcajada.

- Rindy es mi hija, Therese.

- ¿De verdad? Pregunté algo en shock- Sabía que ella se parecía a alguien pero no sabía bien a quién ahora lo tengo claro y porque llamaba tanto mi atención.

- Si. ¿Le sorprende Therese?

-Bueno si, algo.- contesté algo apenada.

- Se lo iba a comentar el día de la cena, pero justo nos interrumpieron.

- Si, es cierto. Encontraba ciertas similitudes en Rindy pero no sabía con quién.

- ¿Ciertas similitudes?

-Rindy es una niña muy especial, y esta mucho más adelantada que otros niños. Imagino que la pasión por lectura la heredo de usted.

- Es muy intuitiva Therese. Y por favor no me trates de usted.

- Lo siento, bueno yo ya debería haber sabido es mi responsabilidad.

- Estas recién incorporandote, aún nisiquiera has tenido tu primera reunión con todos los padres.

- Pues si, tienes una hija encantadora. Tu y tu marido deben estar muy felices y orgullosos de Rindy.

- Yo no tengo esposo, bueno si, pero estamos en proceso de divorcio, y si estamos muy orgullosos de nuestra hija.

- Oh, yo lo siento mucho de verdad.- contesté apenada.

- No tienes porque tranquila, cuando ya no hay amor, no hay nada que se pueda hacer.- Nos quedamos en silencio unos segundos mirándonos fijamente hasta que ella volvió a hablar.- Bien estoy atrasada y mis alumnos están solos así que nos vemos luego Therese.

- Si claro, mis niños también están solos. Nos vemos luego Carol.

Luego de eso, me quede pensando un momento, eso quería decir que estaba soltera, o sea que tal vez aún... Por Dios therese en que estas pensando, ella se esta divorciando debe estar sufriendo, además piensa en Rindy, ella es tu alumna. Saqué todos esos pensamientos de mi cabeza y comencé con la actividad de los niños.

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