Cap. 10

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Narrador externo

En el campamento de Londres el Capitán Carter y sus tropas ya habían llegado a primera hora de la mañana porque sabian lo que habían hecho Steve y Idyna. Se estaban preparando para atacar cuando, derrepente todos los soldados que allí había empezaron a gritar y a aplaudir
-¿A que viene tanto alboroto? - pregunto el capitán-
Pero cuando salió de su tienda lo vio, eran ellos, las tropas que habían sido capturadas, lideradas por Steve y Idyna. El capitán simplemente se acerco serio hacia ellos
-No castiges a Steve, a sido mi culpa, yo lo metí en esto, someteme a cualquier castigo, pero a él no.
-No va a hacer falta -nos sonrío- habéis sido muy valientes.
Todos empezaron a aplaudir y a decir los nombres de Steve y de Idyna.
Todos estaban felices por haber vuelto, y todos le agradecieron a Idyna con abrazos y sonrisas todo lo que había hecho.
-Idyna, no sabemos como te podemos agradecer esto, has arriesgado tu vida para salvarnos.
-No lo podría haber hecho sin Steve - sonreí y lo miré- pero... Hoy por la noche,nos podríais invitar a unos tragos - dijo la chica sonriendo-
-Hecho, hasta la noche - dijeron los soldados despidiéndose de ella-
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Idyna
Después de todos los abrazos y aplausos me di cuenta de que estaba sucia por todas partes y me dispuse a pegarme una ducha hasta que alguien me interrumpió
-Realmente has estado espectacular-dijo una voz familiar detrás de mi- me has salvado la vida
-Gracias Buck -sonrio y me acerco a el- Bueno... la tuya y la de todos esos -sonreí-
-se acercó a mi y me abrazó-
-Eres la mejor -dijo Bucky acariciandome la espalda-
-Lo se -sonreí-
-Acuérdate de nuestro baile de hoy- cambió de tema-
-El trato era que vinieras sano y salvo, no que te fuera yo a salvar. -reí-
-Anda... -iba a seguir hablando cuando alguien nos interrumpió-
-Ejem
-¿Papá? Quiero decir Capitán - dije un poco nerviosa-
-¿No me vas a presentar a tu novio? - dijo con una sonrisa-
-No es mi novio - dije con una sonrisa- él es James Barnes, para los amigos Bucky y Bucky el es mi padre, el capitán.
-Un placer capitán, y no, no somos novios, demomento -dijo mirándome a lo que yo le pegué un codazo en el estomago-
-Sea lo que seáis, más te vale cuidarla. - lo amenazó mi padre--y como le hagas algo te juro que lo vas a pasar muy mal.
-Papá, papá, ya, relájate -Le acaricie el hombro- gracias por tu preocupación pero me se defender sola.
-No lo dudo hija, pero que tenga cuidado conmigo.
-Capitán, le aseguró que le cuidaré muy bien, aunque no le haga falta y me cuide ella a mí -sonrio acercándose a nosotros-
-Te vijilaré -río- y más te vale no ser una distracción.
-No lo seré, capitán.
-Tengo entendido que los soldados van a ir por la noche a la ciudad a celebrar, ¿vais a ir con ellos?
-Yo si - miré a Bucky para ver si el iba
-Si, yo también iré -sonrió mirándome-
-Pues pasárlo bien, y pronto a descansar, mañana se celebrará tu ascenso a Capitana, el tuyo y el de Steve y no quiero que salgas con ojeras de panda.
-¿¡Que!?¿Como que capitana? - dije emocionada-
-Todos los soldados te quieren como capitana, y hoy he comprobado que realmente estás preparada para ello. - me dijo sonriendo- y agradeceselo también a tu novio, fue uno de los que me lo suplicó.
-Miré a Bucky y sonreí- Gracias gracias gracias - bese a mi padre por toda la cara-
-Ahora ve a ducharte, se va a hacer tarde -se marcho de allí y me tire a Bucky rodeando mis piernas en su cintura-
-Gracias gracias, nunca pensé que llegaría a ser capitana -rodee mis brazos en su cuello-
-No me las des, te lo mereces -sonrió mientras abrazaba mi espalda-

-después de unos segundos me di cuenta de que estaba subida en Bucky asique me bajé un poco incomoda por lo que había hecho-
-Bueno... Me... Me voy a duchar -me despedí con la mano y me alejé-
-Idy -me volvió a llamar- ¿quieres que vayamos juntos a la ciudad?
-Oh - sonreí- si, claro ¿a qué hora?
-No se... ¿21:00? - sonrió de vuelta-
-Bien, a esa hora aquí ¿te parece?
-Perfecto, hasta luego -los dos nos fuimos por diferentes caminos-

Al llegar a mi habitación, cerré la puerta con pestillo, me quité la ropa y metí en la ducha, allí estube un buen rato, quitandome todo el barro y ceniza que tenía por el cuerpo. Al salir me puse una camiseta blanca que me quedaba enorme que utilizaría de pijama y miré la hora, todavía eran las 4 de la tarde asique decidí dormir hasta las 8 para prepararme para salir, puse el despertador y me tumbe en la cama para conciliar el sueño.

No me dejes otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora