Jungkook era el típico chico popular de tu escuela, el que tenía todo lo que quería, todas las chicas estaban enamoradas de él y si una chica no le gustaba a jungkook, este les hacía pasar el momento más vergonzoso de su vida frente a todos, el rechazo. Y bueno... a ti te gustaba, no podías evitarlo, era la cosa más linda que habías visto en tu vida, su cabello castaño y sus ojitos y DIOS, SU SONRISA. Todo de él te gustaba.
Hace tres años que estabas enamorada de Jungkook pero nunca te atreviste a decirle nada por miedo a que te rechace al igual que todas esas y chicas, pero era el último año que tenían en la secundaria, pronto se graduarían y lo más probable es que no lo fueras a ver más, por eso, decidiste confesarle tus sentimientos.
Las clases habían terminado y tenías que volver a tu casa pero decidiste que hoy tenía que ser el día en el que por fin le digas a jungkook lo tontamente enamorada que te tenía. Esperaste a que saliera de su clase y en cuanto salió tu tocaste su hombro.
ㅡA-amm.. jungkook ㅡ
Dijiste nerviosa y él volteó a verte.
ㅡ¿Qué quieres? ㅡ
Dijó serio, pudiste notar como la gran mayoría de alumnos te miraban a ti y a Jungkook, incluso algunos sacaron sus teléfonos para grabar pues no se perderían el gran rechazo que se venía.
ㅡB-bueno tú... me gustas, hace tres años, en cuanto te vi en la clase de música cantando hiciste que mi corazón se acelerará. Amo todo de ti, tus ojos, tu sonrisa, tu pelo, tu sentido del humor... todo, y sé que no eres como aparentas ser, te vi ese día afuera de los baños ayudando a un chico a juntar sus libros pero él creyó que le ibas a hacer algo malo se fué corriendo... ㅡ
Eso último lo habías dicho más bajito para que nadie pudiera escucharlo. Viste como jungkook se sonrojó un poco.
ㅡPor eso y créeme, mucho más, me gustas y quería pedirte una cita... ㅡ
Le entregaste un pequeño ramo improvisado que hiciste con unas flores que encontraste en el patio de la escuela y un pequeño chocolate que compraste en la cantina. Sinceramente, ya veías como te iba a rechazar y hacerte el hazme reír de la escuela por varias semanas como a todas las otras chicas, es decir, no creías que Jungkook fuera a aceptarte con una tonta chocolatinas de diez pesos y unas flores con un poco de tierra y seguramente con mi de perros o quien sabe qué. Viste como Jungkook rió bajito al ver como tus manos temblaban por los nervios.
ㅡNo muerdo, niña...¿sabes? Lo pensaré ㅡ
Dijó y agarró el pequeño ramo y el chocolate que tenías en las manos, se dió la vuelta y siguió caminado como si nada hubiera pensada. Tú no pudiste evitar sonreír emocionada y con las mejillas algo coloradas ¿y los demás?Bueno... estaban con la boca que les llegaba al piso.
Jungkook, una vez alejado del resto olió el ramo que le diste
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ㅡEres tan tierna, t/n...
Dijó para después salir de la escuela e irse a casa con una sonrisa
