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Dong-yul entro junto a su hermano menor a su habitación en silencio mientras que sus padres dormían.

-Seok, escucha...

Su hermano negó con la cabeza y camino de un lado a otro. Parecía estar más afectado de lo que debería.

-¿Qué estabas pensando cuando la besaste? Es nuestra prima.- dijo intentando no subir mucho la voz.- se supone que eres una persona sensata y eso que hiciste es una locura, imagina que dirán nuestros padres o los padres de Melody.

Dong-yul no dijo nada. No necesitaba que otra persona le dijera lo que ya sabía, ni siquiera su hermano.

-¿La has besado antes o fue la primera vez?-Con una mirada su hermano lo supo e hizo una mueca de asombro.- no puede ser...

-Seok, cálmate un segundo. Sé que está mal y que lo que hacemos no nos va a llevar a ningún lado, pero...la amo, la amo desde que somos niños y...

¿Y qué? Dong-yul ni siquiera sabía que más decir, solo quería ser honesto con su hermano, como siempre lo había sido desde que eran niños.

El menor de los Kim suspiro y no supo que hacer más que abrazar a su hermano mayor.

-Lo siento, Dong-yul. Pero debes pensar en el futuro un momento. Piensa en lo que pasa si terminan peleados, si la familia se entera... quien sabe que pueda pasar.




Melody pasó toda la noche anterior pensando en lo que estaría pasando entre Dong-yul y Seok, incluso con sus padres. Estaba nerviosa y algo asustada, no quería dañar a nadie por amar a alguien, y mucho menos a su propia familia, que a pesar de no ser todos de sangre, se trataban como tal o incluso mejor.

-¿Estas bien, princesa?- dijo su padre cuando sus hermanos se fueron de casa y su madre se fue al baño para terminar de arreglarse.- pareces preocupada o algo así.

Melody suspiro. Desde que era una niña hablaba mucho con sus padres, sobre las cosas buenas que le pasaban o sus problemas, y ambos nunca la habían hecho sentir mal por sus pensamientos, de hecho la dejaban expresarse libremente. Incluso cuando les dijo que quería aprender a montar motocicleta a los catorce años. Pero esta vez, ¿Cómo podía decirles?

-Papá... ¿recuerdas cuando tenía diez años y mamá le toco viajar fuera del país?- Hoseok asintió mientras se sentaba en la mesa frente a ella.- esa noche me costó mucho dormir porque nunca había estado separada de mamá por tanto tiempo y menos por las noches, así que te quedaste conmigo y me contaste una historia, la historia de cómo conociste a mamá y por lo que pasaron para poder casarse... ¿Cómo supiste que valía la pena arriesgarte por mamá?

Hoseok le sonrió, pero no a ella, fue como si el simple hecho de recordar cómo fueron los primeros años con su esposa y madre de sus hijos, le dieran ganas de sonreír.

-Simple, tu madre fue la primera mujer que me quiso por quien yo era y no buscaba nada más que mi cariño y compañía. Con ella me sentía libre y no tenía que fingir nada, ¿Cómo no iba a arriesgarme por ella? Además si no se arriesga no se gana, y yo quería a tu madre para toda la vida.

Melody se quedó en completo silencio mirando a su padre que tenía una cara de completo enamorado y luego a su madre que se acercó sin saber de lo que habían estado hablando.

-Hobi, amor estoy lista. ¿Nos vamos?- dijo su madre alegre. Ambos iban a tener una cita todo el día, así que no le sorprendió ver a su madre con un vestido ligero ese día y unos zapatos deportivos.

Nuestro secreto (Trilogía 2da. Generación de Pure Love #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora