Pero, porque estas tan enfadada con Mu? - desde la noche del cumpleaños de Camus, Dite había visto un distanciamiento y algo de hostigamiento entre la acuario y Aries - no es como si tú fueras algo de Milo, digo, tú misma decías que te valía lo que él hiciera - agregó al verla arrugar el ceño -
...- silencio, eso era lo único con lo que podía contestarle a la peli celeste y es que ella tampoco entendía su enfado con su amiga -
Es como si Milo te reclamará por haber bailado casi toda la noche con Surt. Tú no eres nada de él, así que con qué derecho él podría reclamarte? – Los ojos celestes se fijaron en las expresiones de la ojí azul, tratando de descifrar sus pensamientos - entonces...- insistió al no obtener respuesta alguna -
...- sus puños se estrujaron y odio el tener que darle la razón a la peli celeste, más no contestó –
En todo caso Milo no tiene la obligación de sentir lo mismo que tú por él, ya que él es hombre libre de elegir con quien quiere pasar el resto de su vida - sabía que estaba siendo cruel con la Francesa más esa no era más que la verdad - y si Mu es la mujer con la que quiere estar, lo único que podemos...puedes hacer es aceptarlo - y ocurrió, al fin la fría guardián del onceavo templo colapsó. Dite, sólo la abrazo y espero que se desahogara -
***M***
Tranquila - Aioros, apenas y pudo tomar la muñeca de su novia, pues esta estaba lista para ir al sexto templo y trocear al rubio guardián -
No!, Aioros, el idiota insinuó lo peor para Mu y eso no lo permito. Quién diablos cree que es?! No es más que un imbécil, descerebrado que piensa que es algo! - gruño mientras forcejeaba con el castaño -
Sé que te indigna pero, no podemos actuar así de violentos. Mu esta dolida y Shaka...- miró a su futura esposa antes de seguir - Shaka solo esta celoso - esas palabras hicieron que su novia dejará de forcejear y lo mirará interrogante - él en su mundo pensaba que Mu solo había sido vista por él, y ver que no era así lo hizo reaccionar de esa manera – hablo con calma, tratando de transmitirle eso a su novia –
Y solo por eso, crees que es justificable su proceder? – Aioros suspiro con pesar, sabia como era la capricornio – él no tiene derecho alguno a sentirse traicionado o dolido, ya que, se cansó de hacer pensar a medio santuario que lo que Mu sentía no le importaba – sus ojos negro verdosos, miraron tristeza al sagitario –
***M***
... — porque se sentía así?! Porque se sentía tan dolido y traicionado?! Como si lo que hiciera Aries con su vida le importara. A él le importaba un pepino, lo que la guardián de la primera casa hiciera y con quien lo hiciera. Pero si eso era así, porque le molestaba tanto? – ya basta! – expreso con molestia, intentando parar así sus emociones y pensamientos. Como si con eso bastara para dejar atrás todo lo que estaba sintiendo – no puedo estar torturándome por cosas tan vanas como esto – murmuro, y con pesadez se dejó caer sobre aquel sofá que había sobrevivido a su molestia – a mí que demonios me importa si gusta de descerebrados, insoportables, inmaduros e idiotas...- chasqueo la lengua, cerrando sus ojos dejo salir un suspiro – Mu no tiene la obligación de amarme...- y al fin después de todo el berrinche hecho, se dio cuenta de que sí, le dolía todo eso porque Mu había dejado de ser solo una compañera de orden. Había pasado a ocupar un lugar especial en su vida–
***M***
Te sientes mejor? – Aldebarán, había llegado temprano ese día a su templo, con toda la intención de saber en que situación se encontraba su amiga –
Si, gracias – trato de sonreír en vano porque vamos, Alde era su amigo de toda la vida, quien la conocía más que cualquiera en la orden, por ende sabía que sería difícil engañarlo –
...- el grandote solo suspiro al ver el amago de sonrisa de Mu, más no dijo nada. Hablar sobre el tema seria como poner el dedo en la herida y eso era algo que él no haría – bien, de todos modos hoy será un día trabajoso – desvió la mirada al exterior al escuchar las voces de los escandalosos de bronce –
Aldebarán! – Kiki y Seiya, se disputaron la atención del tauro, mientras Shun, Hyoga y Shiryu solo saludaban con la mano –
Es un día muy bonito, cierto? – Shun se había acercado a la mayor – le gustaría acompañarnos...?- invito ignorando la mirada del ruso –
Exactamente a dónde? – Los niños de bronce, eran aquella parte de juventud que ellos no pudieron disfrutar por lo que siempre que podía trataba de pasar tiempo con ello –
Iremos a comprar recuerdos, antes de ir a Japón – respondió Seiya dejando atrás a Kiki y Alde –
Se marcharán tan rápido? – la lemuriano miro con curiosidad a los jóvenes guerreros –
Saori, nos dio límite de tiempo – murmuro por lo bajo Hyoga sin darle mayor importancia – digo, tenemos que regresar...pedimos permiso solo por unos días y Saori se molestara si hacemos esperar a los profesores – suspiro. La idea de estudiar con profesores privados hasta nivelarse, no le era muy de su agrado, al igual que tampoco lo era para Seiya e Ikki, pues a Shiryu y Shun parecía gustarles mucho –
Entiendo...- suspiro y le hubiese gustado negarse pues no se sentía con muchos ánimos de ir a Rodorio, más jamás había podido negarle nada a los niños de la esperanza – bien – sonrió, haciendo que la peli verde sonriera con ternura –
***M***
Como paso?, no lo sabía. Más allí estaba media orden dorada y demás, comiendo frente a frente en aquella cafetería.
No había probado algo tan rico en Asgard – para romper la tensión que empezaba a hogar, Mime comento –
Claro que no, una amiga me mando la receta y como no la pude hacer se la regale a la señora que hace postres y mira que logro hacerlo – conto Dite, mientras comía del dulce – recuerdas Camus, como sufrimos junto a Mu para hacerlo, casi quemamos la cocina de Shura – el comentario de Dite, hizo que las mencionadas se miraran por breves instantes –
Yo puedo hacer todo lo que me proponga – Mime suspiro ante el comentario de poco humilde de Sorrento –
Si, por eso Tetis pone en alerta a todas las ordenes cuando pones tus manos sobre la cocina – Aiacos jamás dejaba pasar una oportunidad para matar ilusiones y egos –
Tetis es una escandalosa – bufo –
Deberían dejar que Shiryu lo intente, si hay alguien que sabe cocinar es él – declaro la menor de la orden de bronce – verdad Seiya? – su verde mirada se fijó en su amigo –
Seiya no prueba, el solo traga así que de sabor no sabe nada – expreso Hyoga que miraba con cierto asco el comer del Pegaso – sigo preguntándome cómo puedes tragar así, y no engordar – negó –
Metabolismo – Camus y Mu se miraron fijamente al darse cuenta que habían hablado al mismo tiempo. Dite sonrió era obvio que su molestia no iba a durar mucho. Eran amigas desde hace mucho y eso ni un amor lo iba a romper –
***M***
Deberías aclarar esa maraña de sentimientos antes de hablar Milo – Kanon se había dado cuenta de los sentimientos confusos del bicho mucho antes incluso que el mismo Milo. Por lo que después de como había terminado todo la noche anterior había ido a visitar al bichejo y su miseria –
Ya lo sé, es solo que no sé qué hacer...- suspiro – digo, mi razón y corazón difieren mucho y no sé realmente a quien seguir – hablo con desanimo –
Si quieres mi opinión, te diré que escuches a la razón...el corazón solo te llevara a la perdición – diciendo ello le dio una palmaditas en la espalda – y lo digo enserio...- concluyo –
El Amor, es algo complicado. La razón es la mejor opción a seguir en casos como el Amor, pero y el corazón? Que se puede hacer si este late tan fuerte tratando de ahogar cualquier sentir que difiera con su sentir...
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Malos Entendidos y Dolores en el Corazón (Saint Seiya)
FanfictionDespués de todo, ese sería el primer cumpleaños de su querida maestra, en el cuál podría pasarla junto a todos. Era una fecha indicada y un momento correcto...pero lamentablemente no todo sale como se planea...y más si todo se va al demonio por malo...