Y qué raro se me hace ir a dormir y no darte las buenas noches como siempre. Lo hacía incluso cuando te ibas sin avisar, cuando sabía que te habías dormido hacía ya un buen rato.
Y sin embargo me he metido en la cama y he abierto tu chat sin saber muy bien qué hacer. Han sido eternos los minutos que han pasado mientras pensaba en que tú ahora estás perdido en los bares de Madrid, quizá siguiendo el ritmo de unas caderas que no son las mías.
No sé si me lees, y si lo haces no sé cuándo será la próxima vez que te pierdas en las palabras de este desastre al que tanto quisiste, pero buenas noches. Hoy y todas las noches de tu vida. Que descanses. Te quiero.

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Ahora que ya no somos
RomanceAhora que ya no somos tendré que conformarme con el recuerdo de tus besos y con los sentimientos a flor de piel...