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Tocaron la puerta de aquel cuarto plagado de recuerdos sacando a Nakamoto de aquel trance en el cual vivía todos los años el mes completó a su nacimiento como sus discípulos le llamaban, su muerte como Yuta la recordaba.

—Adelante...— Suspiró dejando pasar a Ten quien le traía un vaso de whisky.
—Lo siento Yuta... Deje a Jeno con un humano fácil arriba así que aprovecho para pedir disculpas por ambos. — Nakamoto le sonrió ligeramente, Jeno llevaba a penas unos dos años como aprendiz de demonio y por supuesto aún no entendía el porque pasaba un mes encerrado en absoluto silencio y dejándose prácticamente morir, no tenía la culpa de aburrirse.
Pero Ten si sabía sus motivos.
— Me deja intranquilo el que sigas poniéndote así por él... Yuta lo nuestro podría funcio...—No pudo terminar la frase que el lider golpeó la mesa.
— Chittaphon no menciones la palabra "nuestro" ¿Cuantas veces debo repetirlo? Fue necesario para tu transformación y punto.
—¿Las tres veces que paso fueron necesarias? —Contestó esta vez alzando la voz, Ten era el único que se animaba a hacerlo y después de todo era al único que Yuta se lo permitía. Por más que quiso responderle no pudo. No podía permitirse el lastimarlo diciéndole que capaz aquellas noches se había tomado litros y litros de alcohol, incluso drogas buscando algo que lo afecte lo suficiente como para dejar de pensar en Sicheng y por supuesto, el sexo tampoco había pasado por alto en sus intentos.

Ten tampoco sabía a ciencia cierta si lo que sentía por Nakamoto era amor, pero tenía la necesidad de que este dejara de llorar y tampoco era como si tuviera alguna otra persona en mente, pero hasta donde sabía el era con la única persona con la cual Yuta había tenido relaciones sexuales sin fines específicos más que el placer y eso lo dejaba en ventaja.

Yuta tomó el vaso de whisky y lo vació de un solo trago. —Si venías a decirme eso ya podes retirarte. — Ten lo miró con algo de lástima y se acercó a tomarle la mano.
—Nakamoto por favor... — Antes de continuar hablando Jeno entró al cuarto de manera abrupta captando la atención de ambos demonios. El menor lucía bastante pálido y asustado.

—Chicos hay problemas.

Volverte a ver. [YuWin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora