_Solo quiero saber porque no me contesta, soy gay, no soy un monstruo, soy tu hija no una desconocida, sabes hoy una mujer me ofreció dinero por sexo, ella me dijo que lo iba a pasar bien, guardo su número en mi bolsillo y no he tocado mi bolsillo porque he pensado en ti, ¡joder! Hablame mama_ me arrodille en aquella oscuridad que me rodiaba, mis lágrimas cubrían mi vista_ ¿porque no me hablas?_ una vez me dijiste que darías la vida por mi, pero supongo que me metiste, porque por una tontería me la estás quitando, sigo siendo yo, tu maldita hija, tengo apenas 18 años pero siento que tengo 100, estoy cansada, tengo pensamiento que no debería tener, tengo persona malas que me están buscando para hacerme daño cuando se dieron cuenta que era un don nadie, que nadie se preocuparía por mi si me pasara algo.
_Hoy he logrado subir al edificio más alto de Madrid y mama se ve hermoso, siento que nadie me puedo hacer daño desde aquí_ me limpie las lágrimas viendo con claridad, me levante sentadome en el borde.
_Creo que solo quería decirte que lamento no ser perfecto_ corte.
