—¿Cómo dice que dijiste?— pregunté,siendo sincera,sin haber entendido ninguna palabra de ella.
Mi hermana mayor me vio para después bufar fuerte,logrando que me asustara un poco.
—A mamá no le gustaría que hagas eso.— dije con reproche.
—I mimí ni li gistirii qii higis isi.—Elsa me repitió ,sorprendiendo hasta a Rapunzel que había dejado de estar viendo a la nada.—Perdón,Anna.
Intenté hablar pero ¿Saben qué?Fui interrumpida.
Otra vez.
Vaya,me debo ya acostumbrar a eso.
—¿Soy yo o ese chico te ha estado viendo desde que viniste?
Miré a quién me estaba indicando mi hermana,logrando ver unos ojos verdes y cabellera castaña.
—¿A mí?—pregunté otra vez ¿Y saben qué?Sin entender.
Otra vez.
—Oh,es el tipo que Mérida vio.El loco de animales.—Rapunzel habló.—Es raro.
—¿Raro por los animales?—resoplé,logrando que Elsa elevada una de su cejas.Hablando de eso¿Por qué a mí no me sale hacer eso?
—Imagínate un animal reptiliano.
—Las serpientes son lindas.— la interrumpí.
—¿Qué lanza fuego?
—¿Qué?
Antes de darme cuenta me encontraba viendo a mi hermana y a mi amiga que me miraban preocupadas,tarde fue mi reacción cuando la profesora ahora se encontraba en mi campo de visión.
—Oh vaya,al parecer a alguien si le interesa mi clase.— dijo la víbora,digo ella.— Afuera de mi clase.— demandó.
¿Qué?¿Por qué?
—Y por llamarme víbora,tendrás un castigo al terminar las clases.—finalizó dejándome aturdida .
¿Pero qué?
—Pero...
—¿Pero?¿Dijiste pero?
Ya no quise discutir más ,así que con la poca dignidad que me quedaba salí del salón.
Pero por supuesto,no sin antes verla para demostrarle que esto no se quedaba así.
A decir verdad,le hice un cumplido.
Las víboras son más lindas y tiernas que ella.
Me senté en el suelo al lado de la puerta que ya se encontraba cerrada,dejándome al menos recostarme en la fría pared y lamentarme de todo esto.
Si es como creía,esto no se iba quedar como un castigo pequeño.
¿Era muy tarde para escaparme y volver a mi hogar?
Y justo en este momento ,la misma sensación cuando algo malo iba pasar,me embargó.
Tristeza y repulsión se unía como los primeros sentimientos en mi lista.
Me sentía extraña.
—¿Te vas a poner a llorar?
Miré al chico de esa voz profunda que se encontraba al frente mío.
—¿Es que acaso una no puede ponerse mal sin ser interrumpida?— pregunté a la defensiva.
El chico sonrió.
—No,porque es contagioso tu pobre vida.— dijo sin más,sacudiendo con una mano su cabello rubio despeinado.—Que Dios me ampare para no tener tu mala suerte.
—No digas el nombre de Dios en vano.—hablé seria,dejando esa sensación de lado para pararme y confrontarlo.
—¿Tampoco lo juro?—la burla se encontraba mientras me acercaba más a él.
—Ni lo pronuncies,su nombre no puede ni salir de unos labios sucios como los tuyos.— respondí .
El chico esta vez sonrió,dejándome unos hoyuelos que rápidamente envidié.
—¿Así que viste mis labios?
No respondí,así que solo agarré mis cosas que había dejado en el suelo y me alejé de él.
—¡Te veo luego!
¿Luego?
Espero jamás encontrarme o cruzar palabras con él.Pero,¿saben?las cosas no salen como uno quiere.
NOTA:
Hay un relato antes de esto,si quieres leerlo con una nota.
:D
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Ángeles vs. Demonios (Jelsa)[Editando]
RandomAntes que pasara aquel suceso que dividiría a la humanidad y los planes del creador.Se dio aquella orden que sus ayudantes podrían engendrar un progenitor como recompensa,con planes escondidos entre ellos, a sus ayudantes pero entre tantos de todo...