El sonido del reloj de la dirección me desesperada.
Los tacones de la secretaria eran dos armas de matar para mis oídos.—¿Cuándo se supone qué debe venir?—pregunté enojado,dirigiendo mi atención a ella.
Con aquellos labios rojos y mirada también de pocos amigos,se encogió de hombros.Para seguir caminando de un lado a otro.
—Alumnos.—llamó el director que recién había aparecido.Nos señaló su despacho para entrar.
¿Hicimos algo?
No estaba confiando pero al ver que nos mostraba un folleto,comprendí porque nos había llamado.
—¿Volver al jardín de niños para cuidar a esos mocosos llenos de bacterias?No gracias.
—Tendrán una nota por ayudar.—no dijimos nada.—¿Qué quieren?
Con una estrechada de mano,completando el contrato,estábamos aquí.
Nuestra primera cárcel.
Nuestra guardería.
El infierno mismo.
Y no lo digo porque habíamos vuelto a nuestro hogar.
—¡Sigue oliendo a un futuro desastroso!—bromeó Wilmer.
Era bueno volver,creo.
—Miren—.señaló Eugene el jardín que se encontraba muerto.Nada de vegetación.—La mesa de la delegada.
Volvamos años atrás,donde nosotros empezábamos con pequeñas travesuras.Entre ellas se recataba como ejemplo el acto heroíco de Eugene.
Odiabamos a nuestra directora pero no tanto como él.Así que un día agarró su escritorio y lo llevó al jardín ,pegándolo al final.Buenos recuerdos.
—Mi legado sigue aquí—dramatizó al llorar.
Demasiados,diría.
—¿Y los mocosos?,—pregunté .—Digo,los niños.
Y como respuesta,el sonido de la campana cuando entrábamos.Nos recibió.
—Ahora lo veremos.
Bastantes par de ojos nos recibieron ,sonrientes antes de comenzar.
Un fuerte jalón me hizo caer al piso.Lo último que vi fue a los demás desaparecer al entrar en diferentes puertas.
—¿Quieres ser mi amigo?
Miré a un niño de cabellera rubio y ridículo traje de marinero.
Lo agarré y lo empuje,entrando en un salón para encontrarme con mis amigos.
Bueno...
—¡Dejen mi cabello!—Kristoff intentaba safarse de un niño que agarraba unas tijeras.
En el fondo esperaba que lo haga.
Era demasiado el tiempo que se demoraba en el baño para arreglarse.—¡Tú desde ahora eres mi mami!—una niña apareció,empujando al otro niño manos de tijera.
Comenzó a reírse Wilmer escandalosamente,llamando la atención de otros niños.
—¡Y tú mi papi!
El pelinegro la miró para después con un chasquido de sus dedos,desmayara a la niña.
Que...
Todos los niños que se encontraban a nuestro alrededor se detuvieron.
Mirándonos a los tres.
Esto no iba ser nada bueno.
De pronto sentí algo afilado en mi pierna derecha.
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Ángeles vs. Demonios (Jelsa)[Editando]
عشوائيAntes que pasara aquel suceso que dividiría a la humanidad y los planes del creador.Se dio aquella orden que sus ayudantes podrían engendrar un progenitor como recompensa,con planes escondidos entre ellos, a sus ayudantes pero entre tantos de todo...