Chloe
—¿Despierta tan temprano en tu día de descanso? —pregunta mi padre cuando entro a la cocina.
—Tengo cosas que hacer —beso su mejilla—. Buenos días, papá.
—Cierto, buenos días —sonríe, y me siento frente a él, con mi yogur de fresas de todas las mañanas—. Así que... ¿qué planes tienes para hoy?
—Iré a ver a mis amigos.
Sonrío de tan solo decirlo, y él se ríe. Sabe cuánto amo a esos animales.
—¿Otra vez sola?
—Pues no —me mira con ojos interrogantes—. Iré con un amigo.
—¿Qué amigo?
—Se llama Hunter, lo conocí en la biblioteca.
Le cuento a mi padre sobre Hunter, y él me escucha atentamente, sin perderse ningún detalle. Sin dejar de mirarme, como si le estuviera contando el secreto de la inmortalidad.
—Si aceptó acompañarte, y más aún, si aceptó subirse a Blue, eso habla muy bien de él.
—Digamos que aún no sabe de Blue, aunque no creo que se burle de mí... todavía —nos reímos—. Es un buen chico.
—Me encantaría conocerlo algún día, ¿será eso posible?
—¡Claro que sí! Supongo que Hunter no tendrá problema en hacerlo.
Me despido de mi padre, y salgo al hermoso día que Texas nos regala. Al subirme a Blue, le envío un mensaje a Ivan para comunicarle que ya estoy saliendo, la señal a las afueras de la ciudad no es muy buena y no quiero problemas.
Mucho no le gusta que salga con un hombre que no conoce, pero debe entender que Hunter es mi nuevo amigo. Solo eso, nada por lo cual preocuparse.
A veces siento que nuestra relación no está funcionando, ya que Iván rara vez comparte conmigo alguna actividad que me guste, mientras que yo lo acompaño en sus gustos. Lo hemos hablado, pero cuando sentí que lo hacía más por obligación que por gusto propio, dejé de tocar el tema.
Y cuando me siento un poco dejada de lado, Iván termina sorprendiéndome con una acción que quita ese pensamiento de mi mente. Sé que no es malo, y sé que podemos crecer juntos. Podemos seguir funcionando.
Buenos días, cariño. No estoy molesto contigo, siento haberme puesto en tal estado. Pero ya sabes, celos. Que tengas un hermoso día con tus amigos los peludos, te amo.
Y tras recibir una respuesta agradable por su parte, emprendo mi viaje para buscar a Hunter. El tránsito está tranquilo, así que no tardé mucho en llegar. Incluso, llegué antes del horario acordado.
Paul me recibe con una sonrisa amistosa, y me ofrece un vaso de agua. No hay señales de Hunter en la zona.
—Le avisaré de que ya estás aquí, ¡por suerte ya lo estás! Ha estado muy nervioso, casi que lo golpeo.
ESTÁS LEYENDO
A través de ti (En físico y en Ebook)
Roman d'amour© Todos los derechos reservados. Está totalmente prohibida la adaptación o copia de la novela. Obra registrada en Safe Creative bajo el código 1502203296895 © (La novela está en edición. Es posible que se encuentren con errores que se están corrigi...