Persecución

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Notas: Narra Mikoto y Fushimi, si hay errores perdón auto corrector, según yo lo revise 

Mikoto.

¿Donde esta? Es la única pregunta en mi cabeza, ¿Dónde se metió ese maldito? Lo he estado buscando por todos lados no se que haré cuando lo encuentre, lo mataré o solo le haré pagar con dolor el haberlo matado, incluso Anna me ayuda a buscarlo sin hacer preguntas al contrario que los demás que no hacen más que preguntar para que quiero a ese hombre, no puedo decirles, eso los confundiría aún más, es difícil dar con él se que esta con Kuroh-inu los tengo que encontrar tarde o temprano…

Saruhiko.

En el SCEPTER no hay más que preguntas de quien será el nuevo rey o cuando llegará, todos está confundidos y eso me desespera de sobre manera como si eso fuera a cambiar el echo de que no tendremos rey por un tiempo, aún hay muchas cosas que hacer y una de ellas y por el momento la más importante para mi es la de encontrar al asesino de nuestro entonces rey el Capitán Munakata Reisi, en verdad me es molesto saber que murió por defender a una persona, si no hubiera sido tan imprudente tal vez seguiría vivo… pero así era él, de todo y de todos se preocupaba aunque no fuera su responsabilidad… mis pensamientos se vieron distraídos por lo que tanto buscaba – ¡es el tipo! ahí estas maldito – estaba en una de las plazas del centro de Shizume tenía poco tiempo antes de que se fuera, salí de la oficina seguido por Akiyama y Akira tenía que llegar rápido.

Mikoto.

Camine por toda la plaza central estaba por salir cuando por reflejo vi a un tipo con cabello blanco, camine lentamente tras el no quería cometer ningún error y mucho menos que escapara, se detuvo frente a un espejo y pude ver su rostro era el mismo que el de aquel video que logró tomar Totsuka, lo mire desde ahí sintiendo una inmensa rabia quería golpearlo… mis pies se movieron por inercia mis manos ya iban envueltas en llamas, la gente que me veía corría por terror alarmando a todos y ese tipo que volteo y al verme retrocedió tal vez por miedo o por impulso iba a correr y yo solo hice nacer una llama que le impidió el paso pero al mismo tiempo todo el escenario cambio, ahora estaba en un inmenso parque y mi objetivo había desaparecido lo busque y lo mire de nuevo pero esta vez junto a una chica y ese maldito Kuro-inu el cual ya había desenvainado la katana que llevaba.

- Espera un momento no puedes matarlo.

- ¿Por qué no? – mi rabia iba en aumento.

- Primero escucha antes de actuar, el no es el que buscas.

- ¿Y tu que sabes de eso?

- Se lo que tengo que saber y eso es suficiente, él no es a quien buscas, él al igual que el miembro de tu clan sólo fue usado.

- Pero que demonios… sólo se que ese maldito a quien defiendes mató a Munakata

- ¿Y eso a ti en que te afecta?

- … eso, a ti no te incumbe –aún no puedo, me cuesta trabajo decir los motivos que me llevan a querer matar a ese tipo – apartate ahora mismo.

- No puedes solo llegar y ha asesinar a las personas ¿hay leyes sabes? – eso vino de aquel sujeto que me miraba por detrás de Kuro –inu.

- Tu eres el menos indicado para decir eso, asesinaste a un rey.

- Yo no fui –negó varias veces mirándome – no sería tan tonto como para identificarme de esa manera.

- Ya basta de estúpidas charlas – mi ira sólo aumentaba y no había forma de frenareme.

- Por favor déjame hablar – aquel chico insistía – si tu me permites hablar te explicaré todo lo que se y tu puedes ayudarme a mi – no podía mas que ignorarlo caminaba con toda la intención de matarlo aunque Kuroh y ese chica estuvieran enfrente.

- Se acabó la platica…

- ¿¡¡Porque nunca escuchas!!? – ese horrendo grito vino de aquella chica y aunque lo intente ignorar algo en mi me hizo detener, todo a mi alrededor había cambiado otra vez pero en esta ocasión no era ni la plaza ni un parque común, esto era mas bien un bosque, los árboles eran altos y olía a aquel característico aroma a tierra mojada, el lugar se veía algo melancólico y el cielo estaba nublado, el viento era frío como aquel que anuncia alguna tormenta, me quede parado unos instantes y recordé lo que estaba haciendo, me envolví en llamas para romper de nuevo aquella ilusión…

- ¿Mikoto porque nunca escuchas? – esa voz era la de Reisi gire hacia el lugar donde la escuché pero no había nada - ¿Por qué no escuchas lo que te digo? – volteaba a todos lados buscándole.

- ¡Reisi!

- ¿Déjame hablar por favor?

- ¿Dónde estás Reisi?

- Si no permites que la gente te explique ¿como pretendes que te escuchen a ti cuando hables? Bueno lo poco que llegas decir.

- ¿Yo? Lo siento…

- ¿¡Mikoto!? – reaccione cuando ese grito fue más que directo a mi oído y aquel lugar se desvaneció mientras Kusanagi me miraba.

- ¿Qué demonios?

- Eso es lo que yo me pregunto ¿Qué demonios te pasa? – mire de nuevo y esta en aquella plaza con la diferencia que ninguno de los 3 a los que seguía estaban y la gente me miraba con miedo y a la vez asombro – Vamos – Kusanagi me arrastró hasta sacarme de que lugar y llevarme a casa de nuevo.

Fushimi.

Entramos a la plaza y vimos a algunas personas correr escuchado si apenas mención del rey rojo, corrí rápido quedando cerca de la escena mirando y escuchando lo que Kuro-inu trataba de explicar pero al igual que Mikoto – lo cual no me gusta aceptar – el único e Ho verdadero era que ese tipo había matado al Capitán era extraño pero quince seguir es escuchando aquella explicación absurda y cuando sentí aquella rabia en el rey rojo me acerqué aunque quede envuelto en el mismo hechizo que aquella chica puso intente deshacerme de el aunque costo mucho trabajo.

- Fushimi-san - Akira estaba a mi lado tratando de ayudarme.

- Idiota ve tras ese tipo – sólo fueron segundos pero fue tiempo sufí interés para verles huir.

- Es imposible Fushimi-san – decía Akiyama con aire resignado – he intentado ir tras ellos pero me ha sido imposible, no se que hechizo ocupen pero no les he podido alcanzar.

- Tsk – trone la boca irritado – hay que seguirles buscado – fue lo único que se me ocurrió al momento, estaba enojado harto de todo, lo único que quería era detener a ese sujeto y matarlo.

Un mundo sin ti (MikoRei)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora