Ø3 || The Tour

335 22 8
                                    

Ø3 || La excursión

-¿Cómo... es posible que estés aquí? - preguntó atorandose con las palabras.

-¿Vamos a un sitio más privado? - preguntó mirando a su alrededor, cada esquina estaba invadida por adolescentes.

-Sigueme - dijo. Ella hizo caso, y al rato estaban en una clase vacía -. Aquí no nos molestaran. ¿Y bien?

-Mi condena se acortó. Repasaron mi caso y dijeron que no estaba en esos momentos en mi sano juicio, a sí que, creen que con tres años tuve suficiente. - explicó rápidamente.

-¿Y es así? - preguntó sentandose en una mesa muy atento a lo que hacía la chica, pues no sabía que pensar de ella. Sus emociones estaban disparadas.

-¿Crees que lo hice aproposito? - preguntó dolida por lo que insinuaba.

-No lo se. Por eso te lo pregunto. - se defendió.

-Te he echado de menos. - comentó sin venir a cuento, simplemente lo dijo porque así lo sentía.

-Yo también; pero lo que hicistes... y lo que me hicistes... - añadió recordando todo aquel dolor que sintió.

-Lo siento Sean... - se disculpó sincera.

Sólo fue con el que pudo sentir que podía ser ella misma; creyó que no lo volvería a ver nunca, y quizás eso hubiera sido más fácil.

-¿Y estás aquí porque te adoptaron o porque...? - empezó a decir siendo interumpido.

-Me adoptaron. No me he escapado ni nada por el estilo Prision Beack - le cortó haciéndole reír por el comentario -. Supongo que a ti también.

-Van ha hacer dos años - contestó recordandolo -. Cuando lleguemos de la excursión lo celebraremos en familia.

-Me alegro por ti - sonrió -. Ahora eres jugador de fútbol. - mencionó viendo su equipación divertida.

-Así es. Y es más, se me da bien - dijo y ambos comenzaron a reír otra vez -. ¿Quienes te adoptaron?

-La familia de Emily. No se si la conocerás. - el chico asintió.

-Es la chica que está colada de Luke desde el colegio, el quarterback. - término por decir. La chica asintió con una sonrisa.

-No quiero cortar el rollo, pero ¿como llevas lo de las pastillas? - se preocupó por la chica.

-Sí. Eres un corta rollos total - hizo una mueca falsa de desagrado -. Pero por ser tú, te diré que fue un error dejar de tomarmelas. Y lo descubrí demasiado tarde. Debí hacerte caso. - respondió agachando la cabeza.

El se acercó y posó una mano en su hombro.

-Ya pagastes por aquello. - sin que ninguno lo pudiera evitar se abrazaron.

Siempre estubieron el uno para el otro, incluso cuando no querian.

Siempre estubieron el uno para el otro, incluso cuando no querian

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐎𝐕𝐄𝐑𝐃𝐎𝐒𝐄 𝐎𝐅 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓𝐒 →  𝙶𝚁𝙸𝚉𝚉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora