𝐎𝐕𝐄𝐑𝐃𝐎𝐒𝐄 𝐎𝐅 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓𝐒 → 𝙶𝚁𝙸𝚉𝚉

Ø4 || Caught Up

Ø4 || Atrapados

-¡Sean! - gritó para que le escuchase.

Se iba haciendo paso entre la multitud, empujando, y esquivando adolescentes con las hormonas disparadas.

-¡Xenia!, ¿¡que haces aquí!? - gritó para escucharse sobre la música con una sonrisa al verla.

-¿Acaso no puedo estar aquí? - se defendió con una sonrisa.

-Si, ven, vamos a hablar mejor en otro sitio - la tomó de la mano saliendo al exterior para hablar con más tranquilidad -. ¿Quieres un poco? - le ofreció de su vaso de cerveza, ella lo aceptó. Y metió ese líquido tan adictivo para algunos en su organismo -, me sorprende verte aquí. - confesó.

-A mi también, Emily me acabó convenciendo.

-Me alegro de que así fuese, tenemos que celebrar que estés fuera de aquel sitio que no debe ser nombrado. - dijo como si fuera un secreto.

-Ya estas con Harry Potter - el asintió divertido -. No tienes remedio.

-Pero aún así me quieres. - se acercó a ella.

-¿Que es esto? - preguntó la chica haciendo que Sean frunciera el ceño confuso - Nunca hablamos de esto. - les señaló a ambos.

-Nunca hubo una respuesta - dijo simple -. Y estaba Brad. - escupió con odio y asco.

-Agh, no me lo nombres. - dijo de igual manera.

-¿Esto te molesta? - volvió a señalarse.

-No. - confesó.

Sean la agarró por la cintura pegándola más a él y comenzando a devorar sus labios con pasión.

Llevado un rato la temperatura comenzó a subir, Sean metió la mano por su pantalón y justo cuando la cosa se iba a poner interesante, la puerta se abrió, dejando ver al chico de biología.

-¡Grizz, tío! - se quejó Sean incómodo por la situación.

-¡Joder! Perdonad, ya me voy, ya me voy. - exclamó al darse cuenta de lo que pasaba. Rápidamente Sean lo hecho del sitio.

-Nos ha jodido el royo, lo siento. - se disculpó llendo de nuevo junto a ella, pero la chica no podía dejar de reír.

-No importa, tal como en los viejos tiempos ¿no? Aún podemos ir a dentro a arreglarlo bebiendo y bailando. - sugirió Xenia tomandole de la mano, llevandolo al interior de la iglesia.

Al traspasar la puerta la música no tardó en inundar sus oídos.

-Ten. - le extendió una lata de cerveza.

-Venga ven. - le llevó al centro de la iglesia donde se puso a bailar seguida del rubio, el alcohol hizo el resto, y a la mañana siguiente con suerte despertó en uno de los bancos de la iglesia.

La luz entraba por los cristales iluminando todo lo que se le cruzaba en su camino, igual así la cara de la pelirroja, haciendo que esta se la tapara.

Notó al moverse que había alguien apoyado en ella, sin mucho interés se levantó haciendo que cayera, pero era tan grande la que llevaba encima que ni se inmutó.

Salió al exterior topándose en la entrada a Luke y al chico que cuestionó la decisión de Cassandra, Harry.

-Cuánto sol... - se quejo abiertamente.

-¿Eres Xenia? - la chica asintió levemente -. Emily nos dijo que se iba para casa, que te lo dijéramos - mencionó Cassandra. -. En cuanto al otro tema, cogeré un coche e iré a Greenwich, a buscar ayuda. - comentó la rubia mirando al horizonte.