Kawaru - XiaoYang

CAPITULO 2

- ¿Tienes donde quedarte? - Yangyang se colgó de su brazo como solia hacerlo.

- No, pero supongo que puedo ir con el administrador Lee.

La verdad era que solo planeaba ver su rostro unos momentos y luego volverse a ir, pero no pudo hacerlo al verlo de nuevo.

- No, tengo una habitación libre en casa, puedes quedarte conmigo - XiaoJun se odió por sentir emoción.

- Pero...

- Por favor - Yangyang hizo un pequeño puchero - Solo será el tiempo que tu quieras ¿si?

¿El tiempo que quiera? ¿Que te parece para siempre?

- Está bien, pero deja de hacer eso, no te ves lindo, solo estás asustandome.

Yangyang lo miró ofendido para después sonreir.

- Estoy muy feliz de que hayas vuelto - era sincero, XiaoJun lo sentia.

Vivir en la casa de Yangyang no era la mejor de sus ideas, tendrian muchas oportunidades de estar juntos y no sabia si podria mantener una distancia prudente para no incomodarlo.

Al llegar a su casa Yangyang soltó un quejido de dolor y estiró sus alas.

- Te lo he dicho un millón de veces, pero aun asi disfrutas de mojarte. - Yangyang suspiró.

- La lluvia me tranquiliza - XiaoJun se acercó a él con una toalla.

- Pero tambien te daña - Yangyang sonrió.

- Ahora que estás regañandome, parece que nunca te fuiste - XiaoJun sonrió.

- Es que nunca cambias - Yangyang negó mientras sentia el dulce toque de XiaoJun mientras trataba de secar sus alas.

- Lo hice, pero volví a ser yo cuando regresaste - XiaoJun se paró frente a él - Es como si te hubieras llevado una parte de mi.

XiaoJun lo observó unos instantes, queria besarlo, Yangyang lo miraba fijamente tambien esta vez con su rostro serio.

Antes de que pudiera hacer una tonteria colocó la toalla en la cabeza de Yangyang tampandole la cara de paso.

- Secate el pelo, se que no podemos enfermarnos pero estás escurriendo - Yangyang sonrió.

- Está bien, gracias.

XiaoJun se apartó de él y extendió sus alas.

Algo llamó la atención de Yangyang.

- ¿Que te sucedió? - preguntó preocupado.

XiaoJun lo habia olvidado.

Habia un pequeña mancha negra en su ala derecha, en realidad eran plumas negras, exactamente dieciseis plumas negras.

- ¿Porqué son asi? - Insistió Yangyang y extendió su mano para tocarlas.

XiaoJun sintió en su pecho y en su estomago una sensación de satisfacción y neeviosismo, era como si el toque de Yangyang le quemara, entonces apartó su ala, y vió el rostro arrepentido del pequeño ángel.

- ¿Has estado alguna vez lejos de Jeno? - la pregunta lo tomó por sorpresa.

- No más de dos semanas, pero... ¿eso que tiene que ver?

- Hay cosas que no sabia y aprendí mientras me fui, parece que las alas se marchitan o mueren cuando están lejos de su verdadero dueño.

Yangyang enrojeció en gran manera haciendo a XiaoJun sonreir.

- P-pero... ¿porqué? - XiaoJun se alzó de hombros.

- No lo sé, cada mes que pasaba lejos de ti, una pluma se ponia se negra. - Yangyang agachó la mirada.