Tarde ese día:
Solo fijé la mirada hacia donde lo tenían, se veía adolorido, sin poder sostenerse por mucho tiempo solo, mis ojos no dejaban de enfocar su rostro, con el seño fruncido, intentaba recordar, buscando en mis pensamientos, ¿cómo y cuándo había comenzado este sentimiento entre nosotros?, quizás había transcurrido el tiempo sin habernos dado cuenta de lo que estaba pasando entre nosotros dos, era tan fuerte, solo pude pensar en ese día específico, del primer encuentro:
Hace 10 años atrás...
Era un salón pequeño, de 5to grado de la Escuela Pública del Pueblo, lleno de niños y niñas gritando por todos lados, la maestra, la Señorita Lilian, muy parecida a aquellas que dibujaban en los libros, cabello largo recogido en un moño, usaba un vestido floreado, su sonrisa era la luz que iluminaba el aula, su olor a flores de primavera colmaba el salón, y aunque a veces era estricta, a su vez era muy dulce la mayoría del tiempo.
Estaba escribiendo una actividad en el pizarrón, mientras lo hacía, Mike (mi mejor amigo hasta el momento; su madre fue la mejor amiga de mi madre hasta que, mi madre le quitó el amor de su padre. Ambos teníamos solo el tiempo para hablar en la escuela, en el parque, vacaciones o donde pudiésemos vernos) y yo estábamos hablando ¿qué haríamos en verano?
De pronto lo vi entrar, su cabello rubio como el sol radiante en verano, sus labios de un tono rojizo como cerezas, y su mirada estaba perdida, era el chico más tímido que había conocido, tenía su ropa un poco desaliñada, la maestra lo presenta ante todos, y lo hace sentar en el banco que está a un lado de mi amigo, pareciera que sólo se quedaría allí sin hacer nada, pues no tenía esa alegría ni ánimo para hacerlo; mucho tiempo después sabría porque de su actitud.
Mike al verlo, lo saludo:
_ Oye amigo, bienvenido!
El volteó a verlo y respondió:
_ Gracias!
A partir de ese encuentro, comenzamos establecer una relación de amistad inseparable.
El sonido de las balas dirigidas hacia nosotros, me hizo volver a la realidad, Oh Dios!!, debemos correr lo más rápido para escapar de ellos, nos están atacando, debemos buscar refugio, detrás de mi venía Betha, corríamos sin detenernos, pude ver que Ángel estaba herido en un pie, pero debíamos continuar, no podíamos dejarlo allí, así que entre los chicos lo sujetaron para lograr salir de esto, sin dejar que nos atraparan.
_ ¿Dayton por dónde vamos?, le pregunté apurada.
_ Hacia la derecha, Lea toma a Betha, ella está muy cansada.
_ Vamos Betha!, sígueme, lo haremos juntas, lo lograremos.
_ Lo sé Leahna pero estoy asustada.
Aunque en ese momento estábamos apurados y asustados, no quería que ella me viera preocupada, así que decidí ir detrás de ella y así motivarla a seguir adelante, era necesario que estuviéramos todos juntos, no decaer ninguno.
Solo nos falta un poco para llegar chicos, decía Dayton motivándonos, (tenía en sus manos un GPS 3D, en el cual podía ver desde donde estábamos, y dar la ubicación exacta de los que venían detrás de nosotros, eso nos daba cierta ventaja para escapar y llegar a la isla).
Y así sin ningún tipo de consideración, estaba allí frente a nosotros, el gran puente colgante! Por Dios, sí que es intimidante, su constante movimiento, los espacios entre peldaño y peldaño, como olvidar lo difícil que se nos pondría todo para cruzarlo; en ello recordé la primera vez que tuve contacto con el, lo habíamos cruzado pero con ayuda, así que no teníamos la manera de llegar al otro lado, sabiendo que debe ser lo antes posible, antes de que nos encontraran. Decidimos detenernos para pensar qué haríamos.
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Akasha, el Génesis de la Rebelión
Science FictionEn un mundo donde la tecnología a superado la necesidad del hombre, apartando la esencia de la naturaleza por lo artificial, la búsqueda de poder más allá del dinero, fuerza o espacio, el hombre debe dominar al hombre para lograr una verdadera paz...