TRECE || Shin Soukoku - OMEGAVERSE

1.

Capítulo 1. El tigre omega de la agencia armada de detectives ¡tiene hijos gemelos!

"Era su esencia principal y su mirada fría. No importaba a donde fuera, yo siempre lo anhelaría."

La fotografía era mostrada al menor, miro curioso, aquella oscura y ligeramente borrosa fotografía – es un asesino de la Port Mafia. Akutagawa. Incluso yo no lo enfrentaría

Aquellas primeras palabras le abrieron los ojos, dejándole saber lo peligroso que era aquel chico, aun así; sin importar que, el recuerdo vago hubiera llegado. Una tenue sonrisa y un escenario brilloso, no le recordaba.

Pero la duda continuaba y continuaba avanzando.

― Vamos Atsushi-kun, hagamos el trabajo – menciono Tanizaki sonriente

Vida, muerte. Había muchos elementos peligrosos en su trabajo, incluso el día anterior había abrazado una bomba, no pensó pero necesitaba el trabajo, quería ahorrar lo suficiente para llevar a Taiyou y Hinata a la escuela y tuvieran una grandiosa vida. Eso era todo lo que debía hacer, cuidar de su vida y así podía cuidar de la vida de sus dos niños.

Fue como lo tuvo de frente, aquel chico de cabello negro haciéndole sentir menos, haciéndole sentir inútil, sin importancia y haciéndolo pensar que estaba loco. Con recuerdos vagos y horripitaltes como si de una pesadilla se tratase.

Su mayor error fue atacarlo, pero sus compañeros le necesitaban, un tiroteo y una promesa cumplida, robo su pierna y con ello gano el sonido sordo de su grito y dolor agonizante. Todo se volvía negro, no quería morir, tenía que luchar, tenía a Taiyou y Hinata esperándole en casa, tenia... solo tenía, una vez y nada más.

Perdió la conciencia hasta que Dazai apareció, al parecer el tigre le había salvado del chico.

Su vida siguió. Retomo sus recuerdos después de ese encuentro, tanto luchar en su niñez le había hecho olvidar el rostro de la persona que más amo, la única que amo, y ahora volvía a verlo en una personificación de la misma muerte. ¿Por qué la vida debía golpearlo de esa manera? ¿Por qué tenían el mismo rostro? Aun peor... ¿Por qué sus hijos?

Aquella tarde, Atsushi había ido por la despensa, volvió con las bolsas y un libro nuevo, sus hijos añoraban cada vez que llevaba con libros, no eran tontos, para nada. Atsushi se encargó de enseñarles en ABC en la celda, usaban varas y tierra para hacer las letras, y a veces podía conseguir un libro para leerles, aunque muchas veces inventaba cuentos pero siempre intentaba tener el libro presente, así fue como los niños se acostumbraron, y teniendo ya algunas semanas en la agencia, pudo comprar un libro con el que los niños incluso dormían.

― Mamá, ¿Cómo es el nuevo trabajo?

― ¿Por qué ya no vivimos en una celda?

― ¿Por qué vivimos en una casa ahora?

― ¿Por qué tienes tantos trabajos?

― Niños, niños, no pregunten tantas cosas, me revuelvo – dijo divertido y los niños rieron

― Mamá, háblanos de tu trabajo nuevo

― Bueno, está Kunikida-san y Dazai-san

― Siii sii el señor de la agenda y el señor de los suicidios

― Exacto, también está Naomi-chan, Tanikiza-san, Rampo-san y el presidente, quien nos cuida a todos

― ¿y Kenji y Haruno?

― También siguen allí, no olviden a Naomi-chan

― Y Yosano-sensei

― También, eso me recuerda... que debo regresar temprano