『𝐀𝐥𝐥 𝐓𝐡𝐞𝐬𝐞 𝐘𝐞𝐚𝐫𝐬 || 𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐲』

Capítulo 32. "Arrepentimiento."

El viaje se había retrasado una semana después de hablarlo con sus padres. Había sido difícil convencer a Loki aun cuando este le había dado permiso de que su hermano menor fuera con él.

Su mano tomo el brazo de su hermano menor para detener su mareo. Fenrir podría acostumbrarse a esos viajes por el Birfrost pero el definitivamente nunca lo haría.

—¿El gran justiciero Daredevil aguanta peleas pero no un simple viaje? Patético—se burló el pelinegro viendo a su hermano.

—Idiota—murmuro Matthew por lo bajo.

Regresaron al departamento de Hell's kitchen. El lugar se mentía intacto aunque con polvo adornando la superficie de los muebles.

—¿Te he dicho que tienes un pésimo gusto en decoración, hermano?

Fenrir como heredero al trono y descendiente directo de los Reyes de Asgar desde su nacimiento estaba acostumbrado a estar rodeado de lujos en cambio Matt desde pequeño solo a lo sencillo. Cuando paso a ser parte de los Thorson su vida había dado un cambio totalmente drástico del cual jamás se acostumbró.

—¿Y yo te he dicho lo odioso que llegas a ser a veces?

El menor rio mientras Matt le lanzaba una escoba. El príncipe odiaba las tareas domésticas pero en Midgard debía entender que era un simple mortal así que solo acato las ordenes de su hermano mayor.

—Espero que volver aquí valga la pena Mattie—dijo en un suspiro mientras el pelirrojo sonreía.

Entre quejas de Fenrir, Matt arrugo su entrecejo al oler ese característico olor a pólvora que tanto conocía y volvía loco.

Él había estado ahí.

(◦◦◦)

El cielo obscuro daba un toque de tranquilidad aunque el ruido característico de la Ciudad de Nueva York reafirmaba que esta no lo era del todo.

La noche estaba como para disfrutarse con amigos en algún club, viendo películas o entre los brazos de algún amante recordando momentos románticos o totalmente salvajes.

En el caso de Wade Wilson, había elegido seguir de cerca a su ex novio. Cada paso que Peter Rogers-Stark daba, él lo seguía a una distancia considerada pues tomaba en cuenta el sentido arácnido del chico.

Desde aquella noche en la fiesta de Harry Osborn donde habían dormido juntos, algo en Peter no le agrado del todo. La actitud del castaño era tan diferente a la que solía tener la mayor parte del tiempo y esa mancha negra moviéndose en su cuerpo.

Podía asegurar que ese no era su Peter y lo había comprobado en una de sus noches de vigilancia al ver que el modo de combatir del hombre araña había cambiado, era tan poco tradicional al que solía recurrir.

—Hombre araña.

Se acercó a él sin importarle si después el chico se alejaba de él. Se alarmó de inmediato al ver como golpeaba brutalmente a un tipo que había intentado robar la casa de una pobre anciana.

EL hombre araña le propicio un golpe más al rostro del sujeto el cual lo dejo inconsciente y lo tiro con brusquedad en el frio suelo. La voz de Deadpool a sus espaldas no le importo.

—¡Peter!—pronuncio su nombre con brusquedad cuando se encontraron en la azotea de un edificio abandonado.

—¿Qué quieres Deadpool?—su voz fría y cortante era algo que merecía y lo entendía pero... podía jurar que había algo más en Peter. Alguien que lo controlaba.

—Me preocupas baby boy. Tú... no eres así. Esta no es la forma de hacer justicia por parte del hombre araña.

Peter rio con sarcasmo. Le recordó tanto a la arrogancia de Tony Stark. Por algo eran padre e hijo, ¿no?