Love Is Not Easy |Harry Styles Fanfiction|

Capitulo 4: "El comienzo"

— Amelia —movía el cuerpo de su hija, pero no despertaba— Amelia...

Amelia perezosamente se removió en el sofá, zafándose así de las cobijas que tenía enrolladas a su cuerpo.

— ¿Que pasa? —bostezo

— Tenemos que tomar un vuelo y hay que estar una hora antes, perdóname

Amelia se levanto del mueble sin energías, sus ojos le pesaban.

— Ben no es tu culpa.

Tomo las sabanas excepto su cobija, y hizo una pelota de tela con el. Ben noto que no había dormido en la cama.

— ¿Porque dormiste en el sofá? —Le pregunto.

Amelia quedo helado, estática se puso, ¿Que le diría? ¿Que tenia una fobia a las cama?

— Es que me quede dormida aquí

—  ¿Y las sabanas? —Dijo no muy convencido a su argumento.

— Bueno —pensó—: no se, seguro las agarre dormida —le sonrío nerviosa.

Cruzaba los dedos porque le hubiese creído

— Esta bien —dijo— Arréglate, estaré afuera.

Ben agarro la manilla y se fue. Sabia que su hija mentía, pero, ¿porque? El detectaba las mentiras, pero decidió callar y ceder esta vez.

Vestida, recogía algunas de sus pertenecías en su mochila, si iba de un lugar a otro y otro, al menos tendría algo con que distraerse.

Ya lista, le dio un último vistazo a la habitación, la había dejado como estaba; hasta tendida la cama. Tomo la manilla y salio al pasillo. Y en definitivo, como su padre le había, se encontraba afuera pero recostado a la pared. El a verla se sorprendió. ¿Esa era su hija? ¿Tan bella y única?

— ¿Porque me miras así? —Dijo tímida— ¿Me veo mal?

Amelia inspecciono su vestimenta buscando un defecto: traía un jean negro, sus zapatillas negras y una blusa de tiras blanca. ¿Estaría mal?

— ¿Verte mal  Amelia? Eres hermosa mi niña. —le dijo, Amelia se puso sonrojada al halago de su padre.

— Gracias —Dijo feliz.

— Veo que copiaste de mi en usar un bolso —Dijo divertido, le mostró su mochila de cuero. Amelia quedo fascinada por el material. Eran del mismo diseño, pero diferentes tipos de fábrica.

— Yo creo que tu lo copiaste de mi —Rieron los dos juntos.

Ben les hizo señas a unos desconocidos, eran los hombres de ayer, sus guardaespaldas.

—Amelia ellos son Preston y Lewis.

Los dos hombre le sonrieron, ¿Aquellos hombres severos y erguidos podían sonreír? Se preguntaba. Dejando su comentario. Los saludo cortésmente.

— ¿Pasamos por el equipaje? —Dijo uno de ellos

— Si claro —Autorizo Ben.

Amelia espero a ver que sucedía, Preston y Lewis salieron con su equipaje, muy confusa decidió preguntar

— ¿A donde lo llevan? -dijo la joven mientras veía como esos dos señores se iba con su maleta

— Van hacia los autos donde esta todo el equipaje —le notifico— Ou, se me olvidaba.

Ben buscaba desesperadamente en todo los rincones de su abrigo, hasta que saco un aparato electrónico adornado con un lazo rojo. Amelia abrió sus ojos de asombro. No podía recibirlo.