Viajaban en aquella carretera padre e hija. Sentada con sus piernas cruzadas en el copiloto observaba la carretera. Iban tan rápido que el viento fuertemente jugaba con su cabello alborotándolo. Las copas de los árboles brillaban más que nunca por el sol. Los pájaros cantaban armoniosamente.
— No sabía que vivías tan lejos.
—sonrío— No es tan lejos, ya casi llegamos Amelia.
— Si quieres llámame Amy.
— ¿Amy? ¿Porque? -pregunto Ben desorientado por su petición.
— No lo se, mama siempre me decía así ya que abreviaba según ella Amelia.
— Esta bien Amy.
Amelia le sonrío. Vio a través del vidrio muchas casas. Todas eran de diferentes tipos y tamaños. Las observaba con atención. Varias eran hogareñas de dos pisos. Pero parecían mansiones todas las demás. Ben se estaciono al frente de una.
— ¿Vives en una mansión? –dijo asombrada.
— No, vives en una casa grande.
—lo miro incrédula— Muy chistoso.
—rió— Ven bajemos.
Obedeció y abrió la compuerta. Salio de la camioneta. Agarro su cámara y la cerro.
— Vamos Amelia.
— ¡Espera!
La chica corrió al otro lado de la calle. Se posiciono. Tomo su cámara, y libero un flash. La fotografía de la casa iba para su álbum.
— ¿Lista? –Ben elevo sus cejas graciosamente.
— Si –dijo- ¿Quieres ver la foto?
— Claro.
Le paso su cámara. Ben quedo fascinado con su trabajo. Era excelente fotografiando.
— Eres buena, ¿Te lo he dicho?
—pensó— Como unas 50 veces.
Rieron los dos juntos.
— ¿Vamos?
Suspiro pesadamente. ¿Que tan malo podía ser conocerla?
— Si.
Se aproximaron a la entrada. Las piernas a Amelia le tambaleaban.
La gran puerta se abrió al escuchar como el picaporte giraba. Se metieron dentro de la choza. Todo era glamoroso y ordenado, muy ordenado. Ben dejo su abrigo en unos de los muebles de cuero de la sala.
Retratos pintados de paisaje e abstractos colgaban de las paredes blancas y vainillas. Varios jarrones con flores artificiales se encontraban en cada mesa, junto con adornos íntimos. Muebles tapizados por una tela azul cielo junto con uno de forma de L cubierto de cuero. Un piano eléctrico se situaba en el salón junto a una reluciente batería de marca Yamaha, era una Gigmaker. Amelia lo reconocería en cualquier parte. Todo estaba decorado muy bien. La luz solar abarcaba cada rincón de la habitación.
— ¡Es muy bonito! –comento.
— Elizabeth le encanta arreglar muy bien la casa.
Al fondo se escuchaba una música ligera en el salón. James blunt.
— Elizabeth adora a James. Para ella es tranquilizante y la ayuda a cocinar.
— ¿Cocinar? ¿Es chef?
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Love Is Not Easy |Harry Styles Fanfiction|
Fanfiction❞Cada historia tiene un final, pero esto apenas comienza❞ "— Me enamore de ti —Dijo Harry mirándola a sus ojos exigiendo respuesta—; ¿No escuchaste? Me enamore de ti — Esto es una locura, mírame —le dijo— Soy una niña, tengo 16. — No me importa —se...