Let me ▪ Tyunning

二

Sobredosis de Pastillas: Fue la primera idea pero la descartó al no tener acceso a fármacos de este tipo, además de tener miedo de que nadie notara su ausencia, de sólo morir en su cuarto y que nadie se enterara nunca de aquello, le causaba estrés que su poca relevancia hiciera de su muerte algo pasable y sólo un hecho más en la vida cotidiana.

Cortarsd: Una más, una menos, al igual que la sobredosis su muerte sería silenciosa y...

Lanzarse de un edificio:  ¿Sus compañeros lo querían ver muerto? Muy bien, lo harían, todos ganaban, un mundo feliz, iba a ser un héroe. Llámenlo cobarde o ténganle lástima, él iba a darles a todos en esa escuela el mejor día de su vida, ¿no?

Instituto Internacional de Corea, en Seúl, un colegio con gran prestigio y Hueningkai estudiante estadounidense de 19 años está en la azotea mirando hacia abajo con el afán de lanzarse sin más, ah, esto incluso podría arruinar la reputación de la escuela y sus compañeros tendrían unos días libres, ¿No es acaso la persona más generosa? Siempre pensando en lo mejor para los demás.

Sobre la azotea del colegio una paloma vuela alterada al notar su presencia, se aleja y en algún punto Kai la pierde de vista.

«Así que esto es todo....» cae al suelo de la azotea al sentir sus piernas temblar pero se levanta y se acerca al borde, los alumnos se comienzan a juntar, con las miradas llenas de morbo como cualquier adolescente.

— ¡Salta Kamal! ¡Haz algo bien en tu jodida vida! — realmente no les importaba, ¿no?

Entonces lo llevaría al límite. Jugaría su juego.

— ¿¡De verdad les vas a dar lo que quieren!? — de repente todo el mundo parece callarse y Huening solo siente su cabeza dar una vuelta antes de mirar hacia abajo. — ¡Hazlo, demuéstrale a todo como te rindes, pierde su estúpido juego! ¿¡Y luego qué!? — Entre la multitud reunida Kai reconoce al rubio causante del repentino silencio abrumador.

Kai da un paso hacia atrás percatándose del aire que había acumulado hasta que lo suelta y se tira al suelo llorando. Se había echado para atrás, no, no, no, se había jodido, era como cavar su propia tumba y aún así no encontraba la fuerza suficiente para levantarse y dar dos pasos al frente.

Una ola de gritos se hace presente debajo de él y no logra reconocer entre todo el disturbio cuáles son los gritos llamándole cobarde y cuales son los gritos que se alegraban de que no lo hubiera hecho, si es que existían, se asoma, el rubio ha desaparecido, se encuentra caminando hacia afuera de las instalaciones, Kai está confundido, por un momento creyó que subiría a apoyarlo, pero no fue así, está solo.

«Hubiera saltado, de todas formas, ¿Quién carajo es él?» cubriéndose con su capucha baja del edificio y sale de la escuela, se percata de que el dichoso rubio está fumando un cigarrillo afuera de la instalación, Hueningkai no puede evitar mirar, se percata de que es levemente más bajo que él, sus ojos eran grandes y sin duda llamaban la atención y su cabeza se comienza a llenar de dudas que no tarda en hacer notar:
— ¿Por qué hiciste eso? 

— ¿Disculpa? - el más bajo volteó a verlo y a pesar de sus palabras no parecía sorprendido

— Decirme que no me rinda.

— No lo dije, me daba igual si lo hacías pero me pareció injusto que les dieras la satisfacción, si lo que querías era librarte de toda esta mierda no creo que sea la forma, además... no parecía que realmente quisieras hacerlo — el castaño está fuera de si, no entiende nada, se siente nervioso de repente.

— No parecía que te diera igual - el rubio soltó una risa ante la confusión del contrario y este no pudo evitar sonrojarse un poco por la pena - ¿Quién eres?

— Kang Taehyun, quinto grado - Quedaron en un pequeño silencio antes de que el más alto decidiera contestar con su propia presentación pero fue interrumpido - Se quién eres - sonrió -¿quieres uno Huening-ssi? — preguntó acercando la cajetilla al contrario, esperando a que tomara uno.

— No fumo, gracias.

— La mayoría usan una adicción como método de escape y tú solo... ¿Qué haces para solucionar tus problemas? — cuestionó Taehyun tirando la colilla de cigarrillo y pisándola.

— Yo... antes solía escribir, tal vez tocar el piano un poco, pero, pero todo esto — de repente había comenzando a llorar sin darse cuenta — pero todo esto me sobrepasa.

— Kai — y aunque la forma en la que pronunció su nombre sonó como una orden para que dejara de llorar después de unos segundos viendo que su "nuevo amigo" no se calmaba lo volteó a ver levemente recargándose en la pared. — Eres muy amable con ellos, ¿no deberías priorizarte un poco más a ti mismo?

Hueningkai lo sabía, sabía que el ser bueno con los demás y esperar a que los demás sean buenos con él no estaba funcionando, sabía que era cuestión de tiempo antes de que todo volviera a explotar y aún así había algo en él que le gritaba que fueran bueno, pero estaba tan harto de eso.

- Tehyun - el más bajo hizo un sonido para hacerle saber que lo estaba escuchando así que el castaño continuó - enséñame a ser como tú.

El mencionado se sorprendió y después de unos cortos segundos soltó una leve risa, más honesta que la primera y eso tranquilizó a Kai,

- eh, ¿Por qué no mejor te enseño a ser tu mismo?