Miki estaba nervioso, las cosas como son. Hace dos días se había acostado con su primo, y le había gustado. Después de eso, él se había ido de su casa sin avisarle, huyendo de él, y eso a Miki le dolía, o más bien le preocupaba.
Le había escrito un montón de mensajes, pero ninguno de ellos tenía respuesta, ni siquiera una simple llamada.
Hoy era la reunión de padres en el instituto, y no es que él no tuviera buenas notas, simplemente no le gustaba que sus padres supieran sus últimos resultados, que habían sido un tanto caóticos.
Al entrar a la cafetería del instituto, prácticamente vacía, un escalofrío recorre todo su cuerpo.
- ¡Amor!- Sabela viene corriendo a abrazar a Miki- mis padres quieren conocerte, una vergüenza, pero es la realidad- dice la gallega con una sonrisa.
Por un momento había olvidado su relación con la chica.
- Bueno.. pues si me los cruzo les digo algo..- contesta intentando evitar el tema.
- Pero si no sabes ni cómo son tonto- vuelve a decir la chica con una sonrisa.
- En ese caso ya me los presentarás- dice Miki haciendo una mueca- tengo que irme, María me espera.
Mentira, María no le espera ni de coña, es más, la chica se lo está pasando pipa con Marta, la cual se pone roja con cualquier comentario de la rubia.
- Vamos a ver Martuka, no es tan difícil- dice María divertida- a mí me gustaste en el campamento, a ti te gusté ¿cuál es el problema tronca?
Marta resopla.
- No es que haya ningún problema, es que yo no quiero nada- contesta la morena nerviosa.
Y si quiere, y evidentemente SÍ quería, pero tiene miedo. Es la primera vez que le gusta alguien de verdad, y es la primera vez que alguien se fija en ella.
- Joder chica me acabas de friendzonear muchísimo- dice María riendo mientras mira la expresión de la otra.
- Que no, que de verdad que no hombre- responde Marta aún más nerviosa.
Agoney y Mimi contemplan la escena mientras avanzan hacia el interior del centro.
- ¿Quién es la chiquita que está con Marta?- pregunta el canario curioso.
- Yo creo que es su lío o algo- responde la rubia mirando a su hija, la cual estaba roja como un tomate.
- Que nos la presente- dice el canario sonriendo ampliamente.
- Pero ahora no que llegamos tarde- responde la mayor tirando del moreno.
Ambos encuentran el aula y entran interrumpiendo al tutor.
- Sentimos el retraso- se excusa Mimi rápidamente.
- No importa- responde el hombre- tutores de..
- Natalia Hernández y Marta Guerra- se precipita el canario.
- Tomad asiento por favor- contesta el profesor con una lista en la mano.
Agoney da una mirada general a toda la gente sentada, y se detiene al encontrarse con él, con ese rubio que tan loco le dejaba, al que tanto quería y adoraba, al encontrarse con Raoul.
Y es que a Raoul nada más ver al canario entrar por la puerta se le pone mal cuerpo.
Tanto tiempo y coinciden en una reunión del instituto de sus hijos, vaya cuadro.
Encima acaba de descubrir que la nueva amiga de su hijo, Natalia, es la hija de ese moreno con ojos hipnotizantes.
Ambos se miran fijamente unos segundos hasta que Mimi llama la atención del canario.
- Chico ni que hubieras visto un fantasma- susurra la chica.
- Peor- explica Agoney con cara de espanto- acabo de ver a Raoul.
La rubia lo mira incrédulamente, y acto seguido busca al rubio entre la multitud.
Cuando lo encuentra pone la misma cara que Agoney.
- Hos tia- suelta ella de un suspiro angustiada.
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Pájaros de papel | OT 2017•OT 2018
Teen FictionMiriam y Amaia están descubriéndose a ellas mismas, y con ello, a su hija Julia, quien llega al Instituto Cervantes en su primer año de bachillerato. Allí conoce a Carlos, el "chico malo" según todos, y no le culpan, Luís y Aitana se separaron en pl...