Un mes de placer y.m (ADAPTADA)

"La venganza es dulce"

Yoongi escribió unas cuantas palabras en su portátil y cerro el documento un momento después. Le dio un largo vistazo a su oficina y se levantó para servirse un vaso de whisky. Nada mejor que un Jack Daniel's cuando trabajas duro... y cuando tu plan de venganza está a punto de comenzar. Volvió a sentarse en su asiento y sonrió. Pero no era cualquier sonrisa, era una llena de malicia, cargada de completa venganza.

En pocos minutos el mismísimo Park Chanyeol estaría al frente de el con su arrugada mandíbula en el suelo y le rogaría que se callara. La simple visión de ver a Park arrodillado rogándole le hacía sentirse tan jodidamente bien.

Jennie, su asistente entro en su oficina y le aviso que tenía alguien esperando a entrar. El movió su cabeza en gesto de que lo dejara entrar y bebió otro trago. Sí, ya casi sentía a Chanyeol rogarle.

Pocos segundos después, un hombre canoso de unos cincuenta años entro en la habitación con su traje negro y una corbata roja, bien hecha.

El hombre cerró los ojos y arrugo su boca. Cerró la puerta y Yoongi lo miro por un momento. Luego se sentó en frente de él y lo estudio con sus ojos. Bufo y frunció el ceño.

-Vamos, ¿dime que mierda quieres? —espeto Chanyeol. Yoongi arqueo una ceja y meneo la cabeza.

-No has cambiado para nada, Chanyeol. Sigues siendo el mismo infeliz de siempre...solo que más viejo —se burló y Chanyeol volvió a cerrar sus ojos tomando aire para así relajarse y no lanzarse a romperle la cara a Min —¿He viajado desde Houston hasta acá y solo consigues en decirme que estoy arrugado?1

—Sí y no —lo miro — Si, estas arrugado. Y no, no es lo único que diré. Tengo muchas otras que decirte.

—Yoongi, todo lo que quisiste insultarme lo hiciste hace 10 años —le recordó —Dentro de unas horas tengo que hacer un discurso sobre mi candidatura.

—Cierto, eres candidato para ser gobernador de Texas —sonrió malicioso —Esto me encanta cada vez más...

—¿Que intentas decir?

—Digo que...si llegarás a ganar la candidatura, serías el más infeliz e imbécil gobernador de Texas. ¿Por qué? Todos los estafadores como tú lo son —la blanca piel de Park se tornó completamente pálida. Paso una mano por su corto y escaso cabello blanco y carraspeo.

—Jodido infeliz —espetó.

—¿Yo? —se burló —No más de lo que tú me has hecho a mí, me engañaste, hiciste que me fuera de tu casa y pasara el resto de mi vida intentando sobrevivir. El único infeliz aquí sigues siendo tú.

—¿Qué quieres? Esta cita no es solo para seguir insultándome, lo sé. Sé que quieres algo —dijo el temeroso.

—Sabes, hace unos días observe y escuche algunos videos de tu...hermoso hijo.

-¿Jimin?

—Es el único que tienes, hasta donde sé —John trago saliva. No le gustaba para donde iba esta reunión —Estoy impactado al ver como cambio, se volvió un hombre muy sensual y pasional diría yo. Y para ser sincero...me gusta como es ahora —tomo otro trago de su bebida.

—¿A dónde quieres llegar con esto, Min? —espeto el hombre canoso.

—Quiero a tu hijo, Chanyeol.

—¿Qué?

—Y no exactamente lo quiero para hablar con el —negó con la cabeza —Lo quiero en mi casa, específicamente en mi cama por treinta noches —dijo frio dejando a Chanyeol paralizado por unos segundos.

—¿Por qué crees que...? —antes de que Chanyeol terminara la frase Yoongi se adelantó en contestar.

—Porque puedo arruinar tu candidatura. Manchar tu nombre y hasta hacer que tengas que mudarte de Estados Unidos. Se muchas cosas sobre ti, estafas hechas años anteriores y en el presente. Y tú sabes muy bien que tengo una cantidad de personas en el gobierno junto a mí y no me resultaría difícil arruinarte la vida... —contestó con una sonrisa. Una sonrisa de malicia y venganza. Nuevamente aquellas palabras cayeron en Chanyeol como un balde de agua frio. Abrió su boca unos segundos para hablar e inmediatamente la cerró. Analizó cada una de las palabras de Yoongi y entendió.

—Esta es tu venganza, ¿no? —le dijo entendiendo todo al fin —Me dijiste que algún día te vengarías de mí y lo estás haciendo.

La sonrisa de Yoongi creció aún más asintió con la cabeza.

—Muy inteligente de tu parte —aplaudió sarcásticamente y cruzo los dedos sobre el escritorio. Chaneyol negó con su cabeza y se levantó de repente. Yoongi imito su movimiento.

—¿Quieres a mi hijo a cambio de que no hables? —el volvió a asentir — Eres un desgraciado... Jimin no es un trofeo o un objeto al cual pueda cambiar, Yoongi. Es mi hijo.

—Lo sé muy bien. Pero tengo que admitir que la idea de tener a tu hijo por un tiempo es muy...tentador —Yoongi rodeo el escritorio y le entrego un sobre. Chanyeol lo observo y frunció el ceño al instante

—Aquí hay un billete de viaje. Tienes hasta el domingo para que Jimin esté en mi casa. Si el tiempo termina y el domingo este precioso angél no está, es mejor que te vayas despidiendo de toda tu reputación. Tienes exactamente una semana y el tiempo ya está andando.

Chanyeol prácticamente le arrebató el sobre de las manos de Yoongi y salió furioso de su oficina. Yoongi volvió a su sillón de cuero y sonrió.

¿Quién decía que la venganza era mala? ¿Que era un pecado? Entonces a veces la venganza y el pecado podían ser tan dulces, como la miel...

Lo siento por la demora bellezas :"v, pero aqui les traigo 3 capítulo para que disfruten 7u7, muy pronto las cosas se van a poner buenas