¡Al De Rojo Me Lo Cojo! || KTH

03

Instituto, maldito instituto, ahora resulta que me van a suspender por el trato hacía el querido Kim, me pregunto quien sería el soplón que aviso al director.

- ¡Sook ayudame! - corrí hasta donde se encontraba mi amiga.

- ¿Qué... Qué pasa? - preguntó desconcertada y confundida.

- ¡Me suspenderán! - grité pero no tan alto, lo suficiente como para no hacer escándalo. - bueno... Ahora que lo pienso - hice una pausa, una que realmente vale la pena. - no me importa.

- ¿Eres bipolar? - preguntó, yo negué levemente - ¿Entonces?, ¿por qué cambiaste tan repentinamente de opinión?

- Recordé algo excitante... - me miró con cara de, "de qué me pinches hablas".

- ¿Qué es tan... Excitante?

- Olvidé contarte que un dios... Y vaya dios que se mudo en mi barrio - estaba tan concentrada en mirar a la nada que no vi por donde iba que tropecé o más bien choqué ante un pecho fornido y un cuerpo que...

Éste es TaeHyung.

Alcé la vista, encontrándome efectivamente con aquel adonis.

- Vaya dios que me he encontrado, ¿por qué al olimpo no has llegado? - lo vi pícara y con una sonrisa adornando mi rostro, hablé sin pensar, porque simplemente mi boca se deja llevar antes dichos hombres.

- Otra vez ésta... - bufó en un murmullo que obviamente escuche, y sin más se alejó de nosotras.

- También es un gusto volver a encontrarme contigo, bombón - bromeé sarcástica pero juguetona antes de que esté demasiado lejos, sonreí.

- Sun... - llamó mi amiga tomando mi atención - ¿de quién me hablabas? - vaya testaruda que me salio.

- De Kim TaeHyung... - abrió sus ojos y boca asombrada.- se mudó hace unos días a mi barrio.

- Si que no vas a parar con ese chico ¿cierto? - negué absolutamente. - pobre chico.

(...)

Nos encontrábamos en cambio de clase, me tocaba la clase de álgebra, ¡mi favorita! nótese el sarcasmo, pero como soy alguien que infringe la ley, no entraré a clase, al fin de cuentas ya el profesor ni se sorprende de que falte por lo menos otra vez, así que qué más da.

Iba tranquila caminando por la escuela con el cuidado de no encontrarme con "la piernas bonitas", pero de tanto cuidar de no encontrármela me encontré con algo mucho mejor, si es que saben de que estoy hablando.

Kim TaeHyung, caminando por los lares solitarios del instituto, tan bello y radiante, pero aún me pregunto... ¿Qué hace fuera de clase?, sin cuestionarme más lo empecé a seguir.

Con cautela seguí sus pasos cuidando de que no me viera, cuando se detuvo me di cuenta de que había entrado a la biblioteca, visualizó antes de entrar y cerrar la puerta con cuidado, sin perder tiempo entre de igual manera.

- Vaya... - hablé captando su atención - ¿qué haces aquí pajarillo?

- Pregunto lo mismo... - dijo en un leve tartamudeo casi imperceptible dándome a entender que, estaba nervioso.

- Oh no querido, yo pregunté primero - me fui acercando lentamente a él. - ¿No se supone qué debes estar en clase?

- ¿Acaso importa? - me sacó un poco de lugar su contestación, fue incoherente.

- ¿Acaso importa que? - hablé dudosa.- ¿el hecho de qué estes fuera de clases o... Qué no te importa tus notas? - no respondió - no importa, ¿qué haces aquí? - volví a insistir.

- No es de tu incumbencia - me acerque más a él, y él por inercia retrocedió.- ¿q-qué haces? - tartamudeo.

- Si no me dirás, haré que lo hagas - me acerqué más a él, tanto así que hice que chocará con uno de los estantes de libros acorralándolo. - ¿me dirás? - susurré, el negó levemente entonces yo coloqué una de mis rodillas en medio de sus piernas.

- Pa-para, ¿quieres? - su voz sonó grave.

- No quiero... - subí un poco más mi rodilla llegando a rozar su entrepierna, él jadeo levemente. - ¿qué pasa pajarillo?, ¿no me quieres contar?

- N-no tengo razón - su voz era entrecortada y más grave, me encanta.

- ¿Entonces? - sonreí maliciosamente.

Me acerqué más a él así rozando más mi rodilla y noté que cerró los ojos fuertemente, soltando un jadeo.

- Oh queri... - no me dejó terminar ya que en un rápido y ágil movimiento yo ya me encontraba acorralada en el estante de libros. - ¿q-qué...?

- Bien, ahora te pregunto yo, ¿qué haces aquí? - preguntó en un tono serio, lo miré y su mirada era neutra, pero en cambio a él, yo no sentía nervios.

- ¿Qué no es obvio?- me miró confundido - te seguí pajarillo. - Sonreí.

Intente acercarme a él pero recibí a cambio un empujón de hombros, pero recibí mi recompensa al darme cuenta que ahora él era el que se acercaba intimidante.

- ¿Razón? - preguntó muy cerca de mi, no me afecta, al contrario mi sonrisa se agrando mucho más.

- N-no tengo razón - tartamudie adrede, imitándolo.

- No estoy jugando, yo se que tienes una razón... - ahora sí, su mirada me empezaba a intimidar un poco, sólo un poco.

Traté de negar o de articular una palabra pero no me dio tiempo de eso ya que TaeHyung me volteó bruscamente así quedando espaldas a él y mi boca pegada a los libros del estante.

- Mira gatita... - ¿qué?, ¿gatita?

- Oyeme no... - traté de observar pero en cambio él se apegó más a mi cuerpo tomándome de la cintura y rozando su masculinidad en mi, solté un jadeo - joder...

- ¿Qué pasa gatita?- río burlada mente ante mi reacción. - ¿ahora te encuentras muy dócil?, porque si es así me encantaría ver que tan dócil puedes ser...- susurró en mi oído.

- N-no... - apenas dije al notar como es que se frotaba contra mí - se supone que y-yo sería la q-que te intimidara - hable entre jadeos.

- Pues parece que tu jugada salió mal... - gimió al último, trate de concentrarme hasta que TaeHyung se separo de mi dejándome desconcertada. - buena suerte gatita.

- ¡No me llames gatita! - grité con la voz entrecortada... Esto no se va a quedar así TaeHyung esto no se va a quedar así.

En un rápido movimiento antes de que se alejara demasiado TaeHyung, corrí hacía él y grité su nombre, el giró de manera rápida, y yo noté que tras él había un sofá y sin más salté sobre él cayendo ambos en el sofá, lo acorrale contra éste y él me miro confundido y con temor.

- Mis jugadas nunca salen mal pajarillo...

~°~°~°~°~

candente 7v7...
Nos leemos el próximo fin ;3