Llegaste tu Capitulo 2 (Juliantina)

Tenemos ganas de vivir

DOS DIA DESPUÉS

VALENTINA

-es que no entiendo como no tienen habitaciones con dos camillas- Juls siempre ha tenido la razón, no dejo de ser una niña caprichosa, pero en estos momentos estoy en mi derecho de pedirlo ¡casi muero!

-mejor mantengase tranquila señorita- me decía la enfermera mientras checaba las hojas con mis niveles -ademas todas las personas ruegan por habitaciones separadas ¿por qué tanto interés en una habitación doble?-

-porque quiero estar cerca de Juliana- comente tranquilamente

-ella esta bien, acabo de venir de su habitación, ustedes dos están vivas de milagro, perdieron demasiada sangre- por primera vez durante toda la revisión volteo a verme -tienen mucha suerte-

-yo diría que tenemos ganas de vivir- ella me sonrió ligeramente y siguió con su trabajo -entonces... ¿me pueden poner en una habitación con ella?-

-mira que eres insistente -suspiro- veré que puedo hacer- eso sonó mas con fastidio pero ya era una ventaja, sonreí y tome el control de la tele mientras me terminaba de comer una gelatina.

En las noticias no dejaban de hablar de lo nuestro, Andrea que había escapado un día antes de la prisión haciéndose pasar por guardia, ahora entiendo de donde saco el arma, en casi todas las notas decían que no se explicaban como habíamos sobrevivido y definitivamente Mariana fue la estrella de esta historia, de no ser por ella otro final se estaría contando.

-creí que dormías- Guille se asomo antes de entrar

-¡hermanito!- exclame, tenia muchos meses sin verlo, entro con un ramo de flores y un globo, sonreí, me hubiera encantado levantarme rápidamente para abrazarlo, pero durante algunas semanas no podré

-¿como te sientes?- me pregunto después de abrazarme 

-mejor de lo que podría imaginar- sonreí ligeramente -me duele mucho la pierna y la cabeza, pero podría ser peor-

-me contaron lo que les hizo esa loca- sonaba temeroso de hablar -¿es cierto?-

-¿que?- hay tantas cosas que eh escuchado que no sabia a que se refería

-que estaba apunto de dispararte-

-si- respondí demasiado tranquila para el tema -ella disfruto demasiado vernos al limite de nuestro miedo- lo mire a los ojos -quería ver sufrir a Juls-

-estaba loca-

-creo que loca es poco- sonreí ligeramente -el amor que le tuvo a Juls se convirtió en obsesión-

-entonces nunca la amo- afirmo mi hermano

-creo que mas bien ella nunca tuvo un ejemplo claro de lo que es amor-

-¿por qué lo dices?-

-hasta donde se, es que venia de una familia disfuncional, sus papás no fueron cariñosos con ella, incluso creo que la maltrataban-

-tal vez la hacían creer que esa era la única manera de demostrar cariño-

-¡exacto!- en algún momento pensé que yo estaba distorsionando las ideas

-lo único que queda completamente claro es que ustedes fueron víctimas- tomo mi mano -pero la pesadilla termino- yo solo asentí -no eh comido nada, voy a la cafetería por algo y vuelvo- me sonrió

-creo que yo dormiré un poco- el salió del cuarto, por un momento todo se quedo casi en silencio, con algo de dificultad me acomode y cerré los ojos, tocaron ligeramente a la puerta y pensé que a mi hermano se le había olvidado algo -¡adelante!- exclame, la puerta se abrió lentamente dejando ver a Juliana con una bata igual que la mía, en su brazo traía un cabestrillo  y con la otra empujaba su suero. No pude evitar sonreír, la extrañaba, desde que nos subieron a la ambulancia ya no la había visto.