Liquid [Larry Stylinson]

Cita

Harry golpeó la puerta de la casa y pronto una mujer abrió para sonreírle. -Hola, ¿buscas a Lottie?

-No, a Lou. -dijo y pronto Louis apareció para aclarar su garganta.

-Mami voy a salir.

-Soy Harry. -dijo el rizado extendiendo su mano.

-No formalidades. -dijo Louis bajando su mano antes de que su madre la acepte. Hace bastante Louis no traía a nadie a la casa.

Su madre rió. -¡Denme nietos pronto!-grito al ver como se iban juntos.

-¡Mama!-se quejó desde lejos. -Perdona, Harry. La ultima vez que alguien apareció en mi puerta, es porque lo presente como mi novio, entonces piensa eso.

-Me cae bien. ¿Cuántos hijos vamos a tener?

-Odio a los niños.

Harry rió. -¿Dos?

-Para. -se quejó, incómodo al pensar que estaban cayendo en una especie de romanticismo ahora mismo.

Harry aclaró su garganta nervioso. -Ok. ¿Qué película vamos a ver?

-Se estrena Cincuenta Sombras Liberadas.

El rizado rió. -¿Te gusta?

-El actor. -aclaró.

-Ah. -dijo pensativo.

(...)

Louis no dejaba de arrastrar a Harry hacia las portadas, emocionado. Ahora queria ver todas las peliculas.

Al entrar a la sala Louis encontro sus asientos mientras Harry alumbraba el suelo con su celular intentando no caer, no era paranoico, podria jurar que se caería si no ve el suelo.

Se sentaron y rapidamente empezó la película ya que perdieron tiempo afuera.

Harry no podía creer que en serio verían una pelicula asi. ¡Harry no tenía nada que ver con una pelicula asi! Menos con Louis.. pero ahí estaba, apostando todo.

No pudo prestar mucha atención en la película, solo podía ver la imagen de Louis iluminado por la pantalla. Su piel lisa, sus pomulos perfectamente resaltados, su nariz de pelotita tan respingada, sus pestañitas y las adorables cejas que tenía. Sus labios tan..

Entonces vio al chico morder sus labios y removerse en su asiento, ¡tenia una ereccion! Harry vio bien, y ahora él estaba algo afectado.

¡Que el chico tenga una erección no quería decir que era por él! ¡Harry era tan ingenuo!

Harry tragó saliva y el ver la escena en la pantalla no le ayudó, sino que ayudó a hacer crecer su erección. ¡Putas hormonas!

Pronto sintió la mano de Louis sobre su muslo, cerca de su entrepierna. -¿Vamos a otro lugar?-le preguntó en el oido haciendo temblar al chico.

-¿A donde? Vamos por la mitad.

(...)

Louis llevaba al rizado por el lugar hasta hacerlo ingresar al baño, precisamente a uno de los baños individuales donde cerró el inodoro y lo sento sobre él, viendo la mirada brillante del rizado y sus mejillas rojas.