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Salí de la habitación tras Morgan, invadido por el cólera la hale del brazo -¿porque no los dejas en paz?- exclamé -¡Por que no me da la puta gana!- respondió soltándose de mi agarre -Michael James Smith Jhonson es mio ¿capicci?- dijo amenazante -Deja en paz a Sam, Morgan.- dije y sonrió con aspereza -Ay hermano ¿jamas dejaras de amarla, verdad?-.escupió con odio, callé y salí de su habitación.
-¡Lo sabía!- exclamó mientras me seguía camino a mi recamara -Sabía que no habías dejado de amarla. ¿Tanto la amas que tu capricho con ella esta sobre nuestra relación de hermanos?- agregó con un tono de vóz mas suave, se le quebraba la voz mientras seguía pero ya conocía esta parte -No Morgan, no funcionará esta vez. Ya puedes dejar de fingir ofensa y regresar a tu cuarto ¿vale?- respondí con frialdad para luego entrar y cerrar la puerta en su rostro. La verdad no sabría que responder a su pregunta, aunque obviamente es solo una manera de manipulación. Pero, si fuera en serio...no lo sabría. Morgan es mi hermana pero, ¡santo cielos! es muy mala con Sam. Es decir, la manipulaba y utilizaba al igual que a Mike, pero ya conmigo no funcionaría y mientras yo este vivo, protegeré a Sam de ella, aunque eso me cueste caro.
Un bullicio en el pasillo me desperto, cuando miré el reloj no eran mas de las 3:15 de la madrugada ¿que carajos pasaba? -De seguro es Morgan- me dije y seguí en la cama. Tras unos minutos despues, el bullicio se convirtió en un estruendo que a esas altas horas, me parecía infernal. -¡Morgan!- exclamé desde mi habitación -¿Podrías callarte? maldita sea, es tarde- agregue pero mis palabras se desvanecieron en el aire, tal como el estruendo. Un escalosfrios subio por mi columna vertebral haciendo que la piel se me enchinara -Algo anda mal- me dije en voz baja. Me baje de la cama y caminé con sigilo y abrí la puerta -¿Morgan?- susurre al ver la puerta de su habitación medio abierta. Al llegar a la entrada de sus aposentos me detuve y abrí lentamente -¡Morgan!- exclamé al ver la habitación hecha un completo desastre: su cama destendida (al extramo) el suelo lleno de cosas, el closet vacio pero ubo algo que llamó mi total atención, una carta; estaba sobre la mesa de dormir al lado de la cama, estaba doblada y las letras escritas en color Rosa Brillante sobresalían.
''Querido Percie:
Estoy absolutamente cansada de ser un carga para tí, estoy cansada de ser siempre la hermana caprichosa que agobia tus dias. Por eso, he decidido dejarte, y sé que fue decisión de nuestros padres estar juntos pero no lo aguanto más.
Quiero regresar a nuestra antigüa casa, volver a tomar nuestras antigüas vidas y quiero ser feliz con la persona que amo. Pero esta vez será diferente, no habrá nadie en mi camino que sea un impedimento (lo que quiere decir que nadie se interpondrá en mis planes). No se cual será la reacción de los chicos cuando me vean llegar y se que hemos luchado por casi un año para mantenernos a salvo pero las aguas han calmado y es hora de salir de la cueva.
No te molestes en buscarme, tomé el dinero, las llaves de tu auto y de la casa :) no me odies, es solo para evitar contratiempos.
Con amor, Morgan''.
Luego de leer la carta solo imaginé una cosa: Estamos acabados, ahora sí. Y todo por los caprichos de esta endemoniada criatura.
