Rutina

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Si a Ash le pidieran que describiera su rutina con una palabra escogería "frustración". Una profunda frustración que recorría cada nervio de su cuerpo. Una sensación agobiante de calor y necesidad, un incendio debajo de su piel. Cada parte de él clamaba por alivio, de cualquier tipo, pero ser consciente en que no obtendría ese alivio lo envolvía en un desesperante bucle de frustración. Había escuchado de la boca de omegas que sus celos solían ser abrumadores, sus mentes se veían nubladas por el deseo de placer: sus sentidos se sensibilizan y se volvían más susceptibles a las sensaciones y olores, muchos lo definían como una sensación de impotencia. 

Una bruma de lujuria y necesidad.

No era muy diferente para un alfa, pero más que verse nublados por el deseo de placer su mente se veía inundada de una sensación incluso más primitiva y agresiva. Como una ira contenida que explotaría en cualquier momento. Un profundo deseo de dominar.

Sabiendo que sería peligroso salir, Ash se había arrastrado hasta una de las habitaciones del departamento, enterrándose debajo de las sábanas y golpeando su cabeza contra las almohadas. No se sentía cómodo de presentar su rutina en un departamento ajeno, pero era mejor a tenerla estando en el exterior.

—Es culpa de Yut Lung —se esforzó por articular. 

Lo único que podía hacer para evitar que los efectos de su rutina se apoderaran por completo de su habilidad de raciocinio era centrar su mente en algo más. Cualquier cosa. Si no iba a dejar que su mente se dispersara por el placer entonces lo haría con la ira. Ira hacia sí mismo por haber sido tan descuidado. Debió ser cuando estaba en la limusina. En ese momento Yut Lung había liberado sus feromonas, seguramente sabiendo lo que le provocarían. Tenía sentido. Incluso cuando abandonó el vehículo, éste permaneció en su lugar, como si esperara a que regresara. 

Probablemente Yut Lung había esperado que su rutina comenzara mientras seguía afuera, entonces sólo tendría que volver a acercarse con la solicitud de "darle una mano". Ese omega sabía bien que Ash no podría resistirse a él en ese estado. Desde un inicio sabía que sólo cosas terribles podrían resultar su encuentro, aquel mal presagio no era más que el aviso de que algo como eso ocurriría. En verdad debió verlo venir. Ser más cuidadoso.

—Si no me hubiera dejado afectar por él... —Si no se hubiera dejado afectar no se habría desviado de su camino, entonces la disputa con Arthur no habría ocurrido.

Cuando uno estaba enojado se liberaba noradrenalina. El detonador que su rutina había necesitado para liberarse por completo. Como su mente había estado demasiado centrada en las posibilidades de otro enfrentamiento, ya fuera con Arthur o con Yut Lung, no se dio cuenta de los claros indicadores de su calor. Ni siquiera había sido consciente del golpe en su rostro hasta que Eiji lo mencionó. «Eiji». Había sido verdadera una fortuna haberse encontrado con él en ese momento.

De no ser así, ni siquiera quería imaginar en las posibilidades.

En el mejor escenario conseguía regresar a su departamento antes de que fuera tarde, pero la distancia y el tiempo que le habría tomado le demostraban que incluso sin su desvío no lo hubiera. Pero, en el caso de no haber encontrado a Eiji y que Arthur decidiera seguirlo para continuar donde lo habían dejado, al menos Ash se sentiría feliz de liberar el calor en su interior por medio de sus puños. La ira alimentada por el placer frustrado... de algún modo sonaba mejor a estar desesperado en la cama de alguien más.

La próxima vez le haría caso al doctor Meredith y se aseguraría de alejarse de omegas en celo para evitar que su rutina se desatara antes de tiempo. 

—No tiene sentido quejarse...

Ash inhaló con profundidad, liberando las sábanas de su agarre. Por más que quisiera buscar un culpable, su rutina ya había comenzado y no había nada más que pudiera hacer. Había arrojado su camisa en algún momento durante su trayecto a la habitación, pero la falta de la prenda no aliviaba en lo absoluto la incomodidad, y definitivamente no iba a desnudarse en la cama de otra persona bajo esa situación. Pero al menos todavía podía pensar en otra forma de liberar un poco de la frustración que albergaba. 

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⏰ Última actualización: Jul 30, 2020 ⏰

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Not a game (Banana Fish)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora