➸ Coffee | KookV

Ocho☕️

¿Quién era ese tal Bogum y por qué le decía "bebé" a Taehyung? ¿Por qué debía pedirle perdón?

Jungkook no deseaba meterse en nada de eso, tal vez sólo estaría estorbando allí, pensaba él.

Taehyung estaba furioso aún, pero bajó un poco la guardia cuando Bogum le miró suplicante. Por más mal que le haya hecho, Taehyung tenía un corazón débil.

El mayor llevó a su extraña visita hacia dentro del lugar, donde, en una esquina, conversaban. Jungkook no quería mirar más, estaba hirviendo por dentro y no creía aguantar más tiempo allí sin querer romper algunas cosas.

Pensaba que estaba siendo exagerado, pero no podía controlar sus celos al mirar cómo el tal Bogum tocaba a Taehyung y éste no lo apartaba.

Tomó su celular e hizo como si fuese a hacer una llamada, salió del lugar y cuando estuvo fuera del rango visual de cualquier persona dentro del lugar en el que había estado, guardó su móvil y respiró, intentando calmarse.

Las dudas estaban carcomiéndole la mente, y sus tendencias a ser inseguro no le permitían aclarar nada.

Sabía que había sido grosero irse así como así, pero no podía estar más tiempo allí, sentía como fuera de lugar.

Caminó hasta su casa y al entrar, se desplomó en el sillón. Echó su cabello hacia atrás y miró al techo.

¿Sería prudente preguntarle a Taehyung sobre ese chico? O, ¿Debería esperar a que Taehyung le hablara de él?

No sabía exactamente qué sería lo correcto, pero estaba consciente de que no estuvo en una postura de pedir explicaciones, no eran nada más que amigos.

—Bogum, por favor, no te vuelvas a aparecer por aquí. Es mi trabajo, no puedes venir y distraerme así, si no te contesté las llamadas nunca, era por algo, ¿no te das cuenta?

—Sé que no podrás perdonarme nunca, pero...

—Si lo sabes, ¿por qué sigues insistiendo?—Interrumpió Taehyung.

—Porque no quiero aceptarlo, Tae. No puedo aceptar que el amor de mi vida me odie, no puedo vivir con eso.—Tomó las manos de Taehyung entre las suyas y éste le miró mal.

—No te odio, Bogum, odiarte implicaría darte atención, simplemente, ya no me importas. Así que, si lo que te preocupaba era que te odiara, despreocúpate, porque no lo hago.

Bogum hizo una mueca y lo miró directamente a los ojos, haciendo que Kim bajara la mirada de inmediato.

—Yo te sigo amando, Tae, y siempre será así, nada de lo que ha pasado ni lo que pase hará que eso cambie, ¿lo sabes?

—Preferiría no saberlo. Bogum, me engañaste, no te importó una mierda cómo podría sentirme al darme cuenta. Porque no fue una maldita vez, Park. Fueron muchas veces las que lo hiciste, y el amor no engaña. ¿Sabes cómo me sentí?—Lo enfrentó. —No, no lo sabes. No tienes idea de cuánto tiempo pasé llorando, no tienes ni la más mínima idea de lo horrible que me sentí, de cuánto me costó darme cuenta de que yo no debía de sentirme un idiota, porque yo no arruiné nada. Fuiste tú, Bogum.