Prólogo

53 2 0
                                    

Todo está oscuro

Huele mal, huele a humo

Me siento entumecida, no siento mi cuerpo

Me intento mover un poco, pero fracaso

Mis parpados pesan, hace mucho calor

Mi cuerpo se siente relajado

Me intento levantar, lo consigo

Algo ha caído, causó un estruendo

Un pensamiento llega a mi mente

Tengo que ir a ver a alguien, tengo que ir a ver a Mari

Pero ¿quién es Mari?

-Verónica

Alguien grita mi nombre, no lo siento mío, pero sé que es mío

Esa voz, yo la conozco

Yo no la conozco, pero ella sí, siento su cuerpo reaccionar.

¿Quién es ella?

Ella soy yo, más no soy ella

Estoy en el suelo, arrodillada

Intento abrir los ojos, acostumbrarme a la luz, poco a poco

Dios mío que calor

Logró acostumbrarme a la luz y abro mis ojos por completo

Todo está en llamas, la luz no era la luz que creía.

Eran las llamas

Mi apartamento está quemándose

El mío no... el de ella sí, pero yo soy ella.

¿Quién es ella?

Estoy aterrada, no sé a dónde ir.

-Verónica-

Sigue gritando

Algo truena encima de mí, algo se ha soltado del techo

Cae sobre mis piernas.

Duele como mil demonios, siento punzadas

Grito, grito tanto que siento como se me desgarra mi garganta

-Oh Dios mío, Verónica-

Alguien está aquí

Me siento segura al sentirlo cerca, sea quién sea

Siento su calidez, siento su cuerpo y sentirlo cerca de mí se siente tan bien.

Duele, duele mucho

-Si podemos salir-

Está llorando, lo escuchó en su voz

Me está arrastrando, intentando sacarme de debajo de lo que sea que haya caído

Más estruendo, se está derrumbando

Ambos se están derrumbando, tanto el apartamento como él

-NO- Lo escucho gritar

-Maldita sea, no- Siento su mano sujetando la mía, siento como su presencia se acerca a mi

Todo está oscuro aún, pero por un instante logro ver su rostro

Recuerdos me invaden y golpean con fuerza

-Emmanuel- Es lo único que sale de mi boca

-Aquí estoy, aquí estoy- Está llorando, esta sobre mí, por lo tanto, siento sus lágrimas caer en mi rostro.

-No quiero volver a perderte, se me hace cada vez más difícil, intento salvarte, pero- Sus sollozos ahogan las palabras.

Me siento lejos y se está oscureciendo aún más

Intento levantar un brazo, pero se cae en el intento

Eso le provoco un horrendo gemido, esta frustrado y angustiado

-Estuve contigo en esta vida y estaré en las que siguen, siempre te encontraré-

Todo se vuelve negro, siento como me estoy desvaneciendo

De repente, tanto el olor como su voz desaparecen

Y entonces

Suena mi alarma

Me levanto y mientras me ducho

Olvido lo que he soñado 

EntrelazadosWhere stories live. Discover now