07

1.1K 111 25
                                    

Paula entró a la oficina de Pablo, quien se encontraba hablando por teléfono mientras anotaba algo en un papel. –Avísame si despierta..._Paula hizo notar su presencia mientras se acercaba al escritorio de Pablo. Tomó asiento en frente de este, regalándole una sonrisa cuando él la miro antes de colgar. –Bien, chao..._Terminando la llamada se elevo de su asiento, inclinándose un poco hacia delante, para saludar a Paula con un beso en la mejilla.- Ayer no viniste... ¿No pudiste?..._Preguntó, a lo que esta negó.

-¿Cómo estas Paula?..._Tomó asiento.

-Mal..._Pablo hizo una mueca por la respuesta de la castaña, pues era claro la razón. Y él era culpable. -¿Pablo no sabes nada?..._Pablo se le quedo mirando. No sabía que decirle, se sentía tan mal de mentirle desde hace tiempo a su amiga. El quería poder decirle donde esta Lucas... Pero, si él hacia eso, todo lo que había construido con esfuerzo se derrumbaría. –Pablo yo ya no sé que hacer. Mi amigo esta desaparecido, y quién sabe si vivo. Estoy haciendo lo que me dijiste. Todo iba bien, pero, Matías me pregunto por él ayer en la mañana. Yo no puedo seguir ocultándoselo.

-Pero Paula, no serviría de na...

-De nada, lo sé. Pero... Es que ya no puedo más. No estamos buscando bien..._Pablo observaba como su amiga le hablaba aguantándose las ganas de llorar.

-Paula yo sé..._Esta lo miró esperando a que terminara. –Yo sé..._Quería. El quería decirle. –Yo sé que esto es difícil, pero solo espera un poco mas..._No podía y se sentía la mierda misma.

Nadie lo sabía, pero Pablo estaba enamorado de Paula. Desde que la conoció en la U. Pero después de que cometió un gran error no quiso acercarse a ella con una intención que fuera más que amigos. Cuando él se entero que la castaña estaba enamorada de él, se odio a sí mismo por no poder corresponderle.

De nada serviría tampoco hacer eso ahora, pues era cómplice de la tristeza que cargaba la castaña. De que serviría decirle que la ama, cuando luego se enteraría de la mierda que es... Pero... ¿Y si lo intentaba para llenar ese oscuro vacio?...

-Pablo te estoy hablando..._Este reacciono y miró a su amiga que se secaba las lagrimas... ¿Hacerlo?...

-Paula..._Esta hizo un sonido en modo de respuesta mientras botaba el pañito que había usado para secar las lagrimas. -¿Te gustaría ir a cenar conmigo, hoy en la noche?..._Esta se quedo sorprendida. Sintió sus mejillas arder y asintió levemente. –Perfecto..._Sonrió. Paula no se quería hacer ilusiones, así que pensó que esto solo era como amigos. –Bueno, yo ahora tengo que atender un caso... así que nos vemos después..._Ella asintió y salió de la oficina de Pablo. Este quedo en su oficina mirando un punto fijo, pensando bien lo que estaba haciendo. Aun había tiempo para retractarse, y no cometer un error. –Quiero sentir lo que no he podido... Que alguien me ame y yo ame a esa persona...

Toda su tarde estuvo intentando estar concentrado en su nuevo caso. Escucho como su cliente le hablaba sobre el problema, pero le era difícil concentrarse.

Al final de su cita con su cliente, le pidió el favor a su secretaria que le buscara el mejor restaurante. No lo iba a negar, el estaba nervioso.

A la hora de la cena el paso a buscar a la castaña a su casa, pero se sorprendió al ver las luces apagadas. -¿Sera que aun no llega del trabajo?..._Miro el reloj en su muñeca y miro nuevamente hacia la casa.

Decidió bajar del auto y caminar hacia la casa. Sacó su celular de su bolsillo y buscó el número de Paula para después marcarle. Ya estaba en frente de la puerta y comenzó a tocar.

-Halo..._Una voz muy adormilada se escucho cuando le contestó el celular. -¿Quién es?..._Pablo soltó una pequeña risilla al escuchar lo tierna que se oía Paula.

-¿Se te ha olvidado nuestra cena?..._Pablo escucho un estruendo que provenía dentro de la casa. La llamada fue finalizada por parte de Paula, quien en unos minutos ya le había abierto la puerta. –Hola..._Saludo sonriente este.

-Perdón. No es que se me haya olvidado, solo que me había quedado dormida..._Se hizo a un lado dejando pasar a Pablo. –Yo ya estoy lista. Iré a echarme agua en la cara para sacarme esta cara de sueño..._Dijo antes de perderse por el pasillo e ingresar al baño.

Pablo observo su al redor y vio que encima de la alfombra habían fotos de la graduación en la U. Miró una en especial y en esa salían ellos dos. -¿Por qué no tengo esta foto?..._Se pregunto a sí mismo. Paula volvió del baño arreglada, miró que Pablo observaba una foto, y peor, esa foto tenía un mensaje atrás que ella había puesto ahí para dársela a él a los días que le fue entregada. Ella había pedido dos de esas, la idea era que cada uno conservara una. Pero se arrepintió de dársela cuando lo vio besar a una chica.

-¿Vámonos?..._Pregunto Paula llamando la atención de Pablo.

-¿Por qué no tengo esta foto?..._Pregunto, haciendo que Paula se pusiera nerviosa. Paula se acercó y se la quito. -¿Qué sucede?..._Esta negó. Pablo asintió no muy convencido y miró que en el suelo había otra de la misma. –No seas mala. Dame una..._Dijo recogiendo la otra.

-Toma esa..._Dijo ella. Pablo asintió con una sonrisa y la guardo en uno de los bolsillos que tenía su blazer.

-Ahora si vámonos..._Salieron de ahí. No sin que antes Paula guardara la foto.

Subieron al auto para tomar rumbo a su cita...

                                  (🏳️‍🌈)

-¿Ya despertó?..._Pregunto Vicente a María, quien venía saliendo de la habitación de Lucas..

-Si, pero... Hay un problema señor..._Vicente se quedo extrañado al escuchar tal cosa. –El...

-¿El qué?...

-No recuerda nada, de nada..._Vicente se quedo estático.

-¿Estas segura?

-Si. El apenas despertó me pregunto dónde estaba, y quien era yo..._Vicente asintió e ingreso a la habitación.

Cuando entró a esta, miró como Lucas observaba la habitación con rareza. Lucas notó su presencia, mirándolo como si tratara de recordar quién era.

-Lucas...

-¿Quién es usted?..._Vicente se acercó con cuidado de que este no se alterara.

-¿No me recuerdas?... Soy Vicente, tu esposo...

-¿Mi esposo?..._Vicente asintió y se sentó en la cama, quedando frente a frente. –Perdón, pero no puedo recordarlo...

Era la oportunidad para Vicente. Lucas no recordaba nada, esto le servirá de mucho. –Tranquilo amor, no te esfuerces. Con el tiempo nos recordaras a los tres..

-¿Tres?...

-Si, a mi. Y a nuestros dos hijos...

-¡¿Hijos?!...

-Si amor, tenemos hijos. Rentamos un vientre y yo pase mis espermas.

-¿Puedo verlos?

-Que pregunta es esa. Claro que si.. Voy por ellos..._Deposito un beso en la frente de Lucas antes de salir de la habitación, para ir con sus hijos...

Esto iba a la perfección, con Lucas así, sus vidas estarían tranquilas.     

                      CONTINUARÁ ⇨💙
   ESPERO Y TE HAYA GUSTADO
           HASTA LA PRÓXIMA  👋

TE ENCONTRARÉ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora